#Tabla Simbólica, 07 Impulso

Jan 14, 2009 16:57



Autor: meztli_lu
Titulo: Un día lluvioso

Fandom: Prince of tenis

Claim: Kirihara Akaya

Tabla: Simbólica

Tema: #07 Impulso

Disclaimer: Esté escrito esta hecho sin animo de lucro y ninguno de los personajes utilizados me pertenece

Nota: ligero yaoi (R-13)

Resumen: Echizen cae de las escaleras, mientras Kirihara cura sus heridas, un par de emociones cruzan por su cuerpo.


Me retrase un poco con la tabla de Akaya, soy mala persona… Por un rato se me fueron las ganas de escribir de él, a causa de mi otra tabla y de otro drabble. Como sea, espero quedará, lo hice en dos horas…

No hay mucho que comentar acerca del texto. Quizá no maneje bien a los personajes. De cualquier manera hice lo que pude, espero que no exista mucho OOC

Cualquier duda, comentario u aclaración, hacedlo saber.

Saludos.

Un día lluvioso

El pavimento seguía húmedo a causa la lluvia hace dos horas. Akaya regresaba del entrenamiento. Decidió llegar tarde a casa, no estaba de buen humor con su familia. Tomó otra ruta. Llevaba un paraguas y los zapatos mojados. Pensaba en las nacionales y las palabras de Sanada. Ahora con el capitán de regreso, sentía más confianza de ganar los siguientes partidos. Levanto el rostro al sentir una gota caer en su nariz. Un trueno avisó la próxima tormenta. Sacudió el paraguas y caminó con la misma tranquilidad.

Cruzaba sin notar a su alrededor el parque de las canchas publicas. Su mente viajaba; ya había ganado dos partidos seguidos y nadie lo había notado. Jugaba con el paraguas como si se tratara de la raqueta, brincaba simulando un saque.

-Ahora entrenan con eso-escuchó, Akaya se detuvo al instante, buscaba por todos lados al dueño de la voz-aquí-arriba de las escaleras, el pequeño Ryoma Echizen los observaba con su soberbia acostumbrada.

Kirihara sonrió. Tres gotas más cayeron sobre sus manos. Iba a continuar su camino, pero el menor del Seigaku lo retó.

-Te da miedo el agua-aseguró sin dejar esa mueca de autosuficiencia-una vez, jugué con Fuji mientras llovía. ¿Quieres intentarlo?

Akaya razonó por un momento. Si jugaba, rompería una de las reglas del equipo. Ningún partido extra dentro de los torneos. Aunque fuera como practica, para eso estaban los entrenamientos en el club. Y ese niño sólo pensaba en jugar y tomar experiencia.

-¿No tienes otra cosa que hacer?-Kikirhara se exasperó un poco.

La lluvia aparecería en cualquier momento, jugar en esas condiciones, bien podía darle más seguridad. Echizen bajó despacio las escaleras. Lo hacía más interesante.

-La pista de aquí esta muy gastada, conozco un mejor lugar-decía mientras sus pies chocaban con los restos de agua.

Uno de ellos lo hizo resbalar. A causa del concreto húmedo, sus manos no pudieron sostenerse y cayó de frente. Una rodilla sangraba al igual que las palmas de las manos con raspones muy notables. Kirihara caminó a él.

-¿Estás bien?-su pregunta fue más por compromiso que por interés.

-Me duele la pierna-dijo Ryoma con un jadeo delicado.

La lluvia apareció y Akaya maldijo la tarde y la torpeza de Ryoma. Abrió el paraguas, el menor lo sostuvo mientras Akaya buscaba una venda o algún pañuelo en su mochila para limpiar la herida.

Pasó una gasa con medicamento por la rodilla. Ryoma volvió a hacer ese ruidito, sus ojos se cerraron.

-Duele mucho-Echizen se sentía avergonzado, pero no podía ocultar el dolor. Volvió a gemir al sentir la solución entrando por su carne.

Las manos tuvieron la misma cura, no dolían tanto, sin embrago, no dejaba de quejarse. Las muecas en su rostro y sus labios entre abiertos. Tuvieron un efecto a los ojos de Kirihara. Vendó sus manos con habilidad, ya estaba acostumbrado a las curaciones y sabía como hacerlo. La rodilla no dejaba de sangrar y algunas gotas caían a la cera, mezclándose con la lluvia. El aroma llegó hasta su cerebro. Algo similar a los tiburones cuando perciben el líquido vital en el mar.

-¿Podrás caminar?-intentó preguntar Akaya. Un remolino de sensaciones cruzaban por su piel.

El rose de sus dedos con su pierna le produjo escalofríos. Los gemidos seguían constantes. Trataba de contener el impulso que le provocaba aquel sentimiento.

Echizen estaba indefenso, dócil. Era pequeño, si quería podía besarlo, tal vez hasta…

-¿Qué haces?-preguntó Ryoma al verlo lamer lentamente su herida.

Akaya abrió los ojos. Sin darse cuenta se dejo llevar. La sangre traspasó sus dientes y calentó sus labios. ¡Quería comerlo!

-Gracias, ya no me duele-el menor se levantó despacio.

Cubrió su rostro con la gorra, ninguno de los dos, pudieron ver sus expresiones avergonzadas. Devolvió el paraguas y caminó con dificultad en dirección a su casa. Kirihara abandonado a mitad de la calle, con la lluvia y un paraguas en mano. Trataba de comprender, que había pasado. La sensación en sus labios no desaparecía y menos la sangre que seguía en la garganta.

Gracias por leer.

#tabla simbólica, prince of tennis: kirihara akaya, autor: meztli_lu

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