PARA:
jezabelwroteDE PARTE DE: Amigus anonimus
Título: Fin de curso
Fandom:Doctor Who
Personaje/pareja(s):Amy/Rory
Rating: PG
Resumen:A Amy le resultaba muy raro el desinterés de Rory por las chicas. Era muy buen muchacho, inteligente, divertido y no muy feo, si le mirabas bien. De hecho tenía cierta clase de atractivo, si te gustaban los de su tipo, claro. Fuera como fuera, Rory necesitaba a alguien, a alguna chica agradable y parecida a él.
Disclaimer:Los personajes son del señor Moffat excepto una que es original.
Advertencias:
Fin de curso
-Venga ya, Rory, alguien tiene que gustarte.
La chica se sentó de la cama de un salto haciendo que su melena pelirroja se agitara a su espalda y Rory, sentado en el suelo, sonrió agitando la cabeza. La conocía desde hacía años, solían quedar cada tarde para estudiar juntos y siempre había sido su mejor amigo, pero cuanto más la conocía más necesitaba ser algo más. Más patente se hacían sus sentimientos por ella, que estaba enamorado hasta la médula de Amy.
Y cada vez que ella preguntaba si había alguien especial para él, más claro le quedaba que no era correspondido.
Rory cerró el libro de historia y la miró. Era la chica más guapa que había visto en su vida. Sus ojos verdes le hacían sentir escalofríos y cada día que pasaba le costaba más resistir la tentación de acariciarle la melena roja fuego que enmarcaba su cara.
Tenía un problema y bastante grave.
Amy era popular. Tenía muchas amigas y mucho éxito entre los chicos. Él sólo era un amigo más y ni siquiera uno especialmente guapo. ¿Qué oportunidades tendría con ella?
-¿Pero por qué iba a gustarme alguien?
La chica se encogió de hombros y se bajó de la cama para sentarse a su lado en la alfombra.
-No se. Porque es lo normal, supongo.
Rory tragó saliva. Tal vez era su oportunidad para declararse, para decirle todo lo que sentía por ella.
-Supongo que no seré normal.
Se dijo para si mismo que en otro momento sería. Amy, por su parte, frunció el ceño y abrió la boca como para decir algo pero se arrepintió por un momento y simplemente sonrió.
-No te preocupes. En algún momento llegará esa persona.
Rory sonrió también y volvió al libro. Cuanto deseaba haberla encontrado ya.
*
A Amy le resultaba muy raro el desinterés de Rory por las chicas. Era muy buen muchacho, inteligente, divertido y no muy feo, si le mirabas bien. De hecho tenía cierta clase de atractivo, si te gustaban los de su tipo, claro. Fuera como fuera, Rory necesitaba a alguien, a alguna chica agradable y parecida a él.
Y Amy había decidido que la encontraría.
No era necesario que fuese el amor de su vida. Su meta era encontrarle una cita para la fiesta de fin de curso. Con eso se conformaba. Ella iba con su chico, Matt, y Rory no podía quedarse en casa ni podía llevarle de carabina...
La única solución era encontrar a alguien que quisiera ir con él. No podía ser tan difícil.
-¿Qué te parece Sarah?
Rory hizo una mueca de asco.
-Es demasiado joven, Amy. Es de primer año.
Amy chasqueó la lengua con fastidio.
-A todas les pones pegas... A Alice, que es demasiado alta...
-Amy, me saca veinte centímetros...
-... Susan porque es animadora...
-¿En serio piensas que saldría conmigo? Prefiero ahorrarme la humillación, gracias.
-...Melody...
-No, Melody no. No preguntes por qué, pero no...
-...Y ahora Sarah porque es de primer año... Dime al menos cual es tu tipo.
Rory bajó la cabeza y Amy entornó los ojos intentando leerle. No le cabía en la cabeza que un tipo al que conocía tan bíen fuera tan cerrado con ella cuando se trataba de las chicas. Una vez Melody, su mejor amiga, le sugirió que tal vez le gustase ella, pero Amy lo descartó rápidamente. No era posible. Después de tanto tiempo, si Rory hubiese tenido interés en ella, lo habría notado o él le habría dicho algo... No es que ella se hubiese planteado la idea de salir con Rory como algo más que amigos nunca...
Suspiró y volvió a mirar a su alrededor buscando posibles candidatas.
-Ella - dijo Rory de repente.
Amy se volvió a mirar en la dirección en la que le indicaba su amigo y vio a una chica muy guapa, de largo pelo rojizo y ojos verdes a la que no conocía.
-¿Ella? ¿Por qué ella? ¿Quién es?
Rory se encogió de hombros.
-Está en mi clase. Se llama Julie. Tal vez le pida una cita y así me dejas en paz.
Amy se cruzó de brazos y frunció el ceño.
-Tal vez debas...
Rory asintió con la cabeza y se ajustó las gafas sobre el puente de la nariz antes de acercarse a la chica. Amy no era capaz de escuchar lo que decían pero Rory parecía tímido y ella complacida. Entonces la chica asintió y Rory sonrió. Amy se cruzó de brazos con el ceño fruncido mientras él se acercaba a ella con expresión triunfal en la cara. Vale que era lo que quería, pero quería ayudarle ella. Al final lo había conseguido por si solo...
-¿Qué tal?
-Ya tengo pareja para fin de curso y sin tu ayuda.
Amy le sacó la lengua y se dio media vuelta para dirigirse a su próxima clase. Tenía lo que quería. Rory tenía una cita para la fiesta. No tenía por que molestarle tanto. No sabía por que lo hacia...
*
No había visto a Amy en casi una semana. Los exámenes estaban a la vuelta de la esquina y ambos habían estado ocupadísimos y no habían podido quedar ni para tomar un refresco juntos a pesar de la insistencia de Melody, la amiga de Amy, que siempre parecía encantada de que Amy y el se vieran.
Ni siquiera le había enseñado su vestido para la fiesta.
El se había comprado un traje azul, sencillo y discreto con una pajarita a juego. Cuando se miró en el espejo se vio guapo por primera vez en su vida y sonrió.
Su madre se acercó y le puso la mano en el hombro.
-Estas muy elegante, cariño. - Rory le dió las gracias con una sonrisa.- Ahora deberías irte. Amy debe estar esperándote.
Rory se giró y miró a su madre.
-No voy con Amy, mamá.
La mujer miró a su hijo confundida.
-¿Ah no? Cuando me dijiste que comprara un ramillete para una chica pelirroja pensé... Lo siento.
-¿Qué sientes? - contestó encogiendose de hombros.- No hay nada que sentir. Me da igual. Julie es fantástica.
-Seguro que sí.- contestó con una sonrisa demasiado condescendiente para el gusto de Rory.- Sin embargo, sigues llegando tarde a recogerla.
Rory miró su reloj de pulsera sobresaltado y, tras besar a su madre en la mejilla salió corriendo de casa. No sabía de donde había sacado la idea de que iba a ir a la fiesta con Amy. Es decir, ¿tan obvio era lo mucho que le gustaba que hasta su madre lo había notado? Eso de que todo el mundo le leyera tan fácilmente no le hacía ninguna gracia. Si Amy lo notaba...
Al final llegó cinco minutos antes de tiempo. Julie ya estaba lista y muy guapa y Rory le sonrió al darle las flores y le tendió el brazo para acompañarla fuera. Hizo los cumplidos apropiados que la chica le devolvió y ambos charlaron animadamente camino a la fiesta. Sin embargo, la idea de que Amy supiera lo que sentía por ella no le abandonaba y sabía que estaba mal. Estaba mal eso y que tuviese más interés en lo que llevaría puesto Amy que en como le quedaba a su pareja el precioso vestido verde que llevaba.
Cuando llegaron, Rory miró por encima buscándola pero su amiga aún no había llegado. Con la resolución de portarse como un buen acompañante y de quitarse a Amy de la cabeza al menos por esa noche, fue a buscar a su pareja algo de beber, pero tanto él como sus intenciones se quedaron a la mitad del camino cuando vio acercarse a Amy, increíblemente guapa con un vestido dorado y sola. Se recordó que tenía que expulsar el aire al verla acercarse a él con una media sonrisa.
-Estás guapo. - dijo arreglándole la pajarita.
-Gracias. Tú también. ¿Y Matt?
Amy se encogió de hombros con los ojos brillantes.
-Nos hemos peleado esta mañana. Se acabó.
Rory le acarició los hombros comprensivamente y murmuró “lo siento” a pesar de que por dentro estaba encantado de oírlo.
-¿Quieres bailar? - preguntó olvidando totalmente su propósito de ser buen acompañante para Julie. Amy asintió y tomó la mano que su amigo le ofrecía. Rory colocó la mano en su cintura por primera vez en su vida y tragó saliva. El pelo de Amy olía a flores y no pudo evitar cerrar los ojos para percibirlo mejor. La música era lenta y suave y a cada segundo a Rory le costaba más mantenerse en la linea de la amistad.
De repente alguien le tocó en el hombro.
-¿Puedo hablar contigo? - Julie no parecía enfadada pero definitivamente tampoco estaba especialmente contenta.
-Claro. - miró a Amy, cuya expresión era algo indescifrable y quien murmuró algo sobre ir a tomar algo, y acompañó a Julie hasta la puerta. - Dime.
-Voy a irme a casa, Rory.
-¿A casa? ¿Por qué?
La chica sonrió comprensiva.
-Porque no quieres venir a la fiesta conmigo, sino con ella.
Rory giró la cabeza y vislumbró a Amy apoyada en la pared del fondo de la sala, mirando al suelo y con un vaso rojo en la mano.
-Julie, no... Yo...
-No me expliques nada. Es evidente todo. No te preocupes. Ya lo sabía antes de decirte que sí, pero me gustas y quería probar si era posible, pero parece que no. Lo entiendo. -Añadió cuando vio que Rory estaba a punto de añadir algo más.- No podemos controlar de quien nos enamoramos.- Se puso de puntillas y la besó en la mejilla.- Ve con ella. Diviértete. Baila con ella y bésala al final de la fiesta. Eso nos encanta a las chicas.
Julie se echó a reír suavemente y Rory sonrió.
-Lo siento.
-Lo se. - La chica se dirigió a la puerta y Rory no hizo ademán de seguirla.- Diviértete. Y a por todas, Rory. Que la vida es corta y nunca se sabe que vueltas va a dar.
Rory se despidió con la mano y volvió a mirar a Amy. Julie tenía razón. La vida era corta y llena de imprevistos. Había que aprovechar el tiempo.
Se dirigió a Amy y sin una palabra más la besó. Sin esperar al último baile. ¿Y si Matt se daba cuenta de lo estúpido que había sido y volvía a por ella? Tenía que hacer caso a los consejos e ir a por todas. Cuando se separó de ella, Amy sonrió.
-¿Bailamos? - preguntó.
Rory asintió con la cabeza con una sonrisa antes de que Amy volviera a besarle y le arrastrara a la pista de la mano.