XF review: 1x04. Conduict o Empezando a atisbar las profundidades de los traumas de Mulder

Oct 18, 2015 20:10


Conduict es el primer capítulo que escribió el otro dúo de guionistas guayoso que se sacaron de la manga en la primera temporada: Alex Gansa y Howard Gordon. No tan buen debut como Squeeze y bastante pálido al lado de perlitas como Fallen Angel o Dod Kalm, pero ni tan malo.

De lo que más me acuerdo siempre de este capítulo es que sale el niño perturbador de The Calusari, pero con el pelo rubio. Nunca dejó de llamarme la atención lo buenos que eran en los casting esta gente, pero es que con los niños chungos lo bordaban: éste en particular en Los Calusari, seguido muy de cerca de la cría de Born Again, me daban miedo.

El capítulo no es de los mejores de la temporada, pero tampoco de los peores, y eso traducido es un notable, lo cual no pueden decir muchas series. Tenemos más arrojamiento descontrolado de tejos entre Mulder y Scully (Okoboogee), Mulder despelotado y establece una costumbre que nos acompañará a lo largo de los años, es decir, que Mulder identifique un caso con su hermana, Scully se preocupe, intente pararle los pies, y él no le haga ni puñetero caso. Como digo, se convertirá en una costumbre, que cuando salía bien nos dejaba joyas como Paper Hearts y cuando salía mal (menos, como en IWTB donde de hecho es Scully la que cree que Mulder identifica el caso con su hermana), nos hacía tirarnos de los pelos. Los niveles de empatía por las víctimas de Mulder son siempre bastante altos, pero en estos casos suelen crecer exponencialmente y eso le hace muy sexy, mal que le pese a Scully, que al final acaba siguiéndole porque ella es la primera vendida.

Hay quien pueda pensar que ese sempiterno sentimiento de culpa de Mulder es su cualidad más odiosa, no lo sé. Es de las peores, pero no sé si hasta el punto de no poder vivir con una persona así. Desde luego no creo que lo sea para Scully. Mulder y Scully han evolucionado mucho a lo largo de los años, pero esta cualidad es una que Mulder nunca llega a superar y como héroe, lejos de redimirle, no deja de conferirle cierto nivel de patetismo. Lo que creo es que Scully sí se la perdona. Bueno, no sé si en algún momento llega a reprochársela de verdad, más que reprochársela, a ella le duele infinitamente cada vez que le ve sufrir así. La vamos a ver muchas veces preocupada por las cotas de autoculpa que llega a inflingirse, pero creo que nunca es suficiente para que ella piense en abandonarle por eso. En realidad es algo que no quiere que sienta Mulder, porque realmente a veces nos transmite un DOLOR infinito, pero a la vez es evidente que esa culpa imperecedera que siente Mulder está íntimamente relacionada con esa capacidad inmortal de empatía que parece tener, y eso, aunque también suele acabar haciéndole daño, no deja de ser una de las cualidades más atractivas de Mulder.

El límite es difuso.

En cualquier caso, esta es la primera vez que Scully tiene que lidiar con esto y lo que hace es intentar comprenderle para intentar ayudarle. Como tantas veces después, no está de acuerdo con él, pero como dirá también después, esa pasión que Mulder pone la arrastra irremediablemente a seguirle. Mulder y Scully se están midiendo todavía a estas alturas, pero no deja de llamar la atención que, igual que ella le sigue por su determinación aun sin estar convencida, él la deja elegir y está con ella en lo que elija porque la respeta profundamente.

Más cosas: el lago Okoboogee es el mismo que el de Quagmire (y otros capítulos), y a mí me encanta. He de decir que también me encanta ese plano del lago cuando Mulder se da cuenta de que las copas de los árboles están quemadas y Scully está mirando al cielo con esa chaqueta de tweed. Está muy guapa.

Tenemos la aparición de Scully!nerd cuando identifica los Conciertos de Branderburgo de la secuencia binaria del niño. Hay que fijarse en la cara de Mulder ahí.

Ah, otro detalle, pero los datos de Samantha los cambian. Nos enteramos de que nace el 22 de enero de 1964 (luego sabremos que es exactamente un mes y un día mayor que Scully), y además, su segundo nombre empieza con la inicial T, cuando más adelante sabremos que es Ann.

Otra curiosidad: oímos hablar a Mulder con Danny por primera vez. Creo que junto con el hermano pequeño de Scully, el otro gran secundario invisible de la serie.

La actriz que hace de Tessa, es interpretada por, tachán… ¡La hermana de Chris Owens! Aka el medio hermano de Mulder. Esto tendría una lectura oculta un poco perversa, si lo piensas.

El final es un poco perturbador para Scully, que por primera vez se está empezando a plantear que igual no es capaz de encontrar todas las respuestas en la ciencia y se concentra en intentar comprender a Mulder para poder ayudarle, pero sobre todo para el espectador cuando vemos a Mulder acudiendo a llorar a la iglesia. Me resultó un poco raro en su momento, y me lo sigue pareciendo, aunque entiendo que querían hacer ver lo que sufre el personaje detrás de su fachada guasona y su pinta de importarle todo un pijo. No sé. El caso es que lo que me resulta raro no es que Mulder sufra o llore por la culpa, Dios sabe que Mulder tiene un auténtico problema con su culpa, pero verle ahí en la iglesia después de todas las veces que le he visto recitarle a Scully todas esas retahílas sobre la falacia de la iglesia cuando ella se vuelve loca con el tema religioso, me resulta cuando menos un poco increíble.

Lo peor: el rollo religioso que le quieren dar al final del capítulo
Lo mejor: descubrimos por primera vez la empatía por las víctimas de Mulder en todo su esplendor.

#savemsr, #scully, #mulder

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