Título: Insomnio
Serie: D.Gray-Man
Personajes: Kanda Yuu x Lenalee Lee
Género: General/Drama
Advertencias: G, 664 palabras
Tabla:
Aquí 20. Insomnio
Kanda ya se había olvidado de cuando empezó todo. Se acuerda de que un día en el que se encontraban por un pasillo y se decían "hola" o "adiós" aunque en su caso era más un gruñido y al día siguiente la chica le empezó a hablar como si fueran amigos de toda la vida.
Apretaba sus pequeños ojos en un esfuerzo para intentar quedarse dormido cuando la puerta de su cuarto se abrió lentamente y en la oscuridad pudo prever la figura de la joven niña que se acercaba a él en puntillas para no hacer ruido. Mentalmente se rió, la niña tenía que ser estúpida si creía que él, Kanda, no la iba a escuchar por mucho esfuerzo que hiciera ella para no hacer ruido, pero decidió hacerse el dormido para ver como acababa la cosa con esa niña que en el comedor siempre intentaba saludarlo. Intentó no hablar, pero cuando la mano helada de la niña tocó ligeramente las sabanas, y accidentalmente su mano, para estirarlas y intentar hacerse un hueco el chico, o niño aunque él ya se viera mayor, se levantó de golpe.
“¿Qué haces?”
“No puedo dormir.”
“No seas cría.”
“Mi hermano me dejaba dormir con él.” Comentó la niña mientras se apretaba el labio inferior para que no le saliera un puchero.
“Yo no soy tu hermano.”
“Pero aquí eres el único que no me mira de forma... rara...”
Kanda se acordó de que muchas veces por la organización se hablaba de esa niña que intentaba hacer de todo para poder salir de ahí. La veía a veces de lejos y mientras que algunos la miraban con lástima pero no hacían nada, los otros la miraban como si de una rata de experimentos se tratara.
“Fuera.”
Al día siguiente cuando el chico se levantó de buena mañana se encontró a la niña dormida delante de su puerta.
No era algo rutinario, volvió a intentarlo al día siguiente y no volvió durante una temporada. La primera vez que ella consiguió dormir con él fue un día que él llegó a la organización de madrugada después de una dura misión que lo dejó totalmente muerto. No se enteró de nada en toda la noche y cuando se levantó, la niña estaba durmiendo en su cama, en la otra esquina de la cama, y cogiéndole de la camiseta.
Fue entonces cuando se dio cuenta de que la niña no hacía daño.
Después de eso, tardó otra vez en ir y cuando volvió Kanda la pilló antes de que se pudiera sentar. Las palabras, necias porque la niña tenía que despertarse y ser fuerte, no consiguieron salir de su boca al ver como la niña lo miraba con los ojos rojizos sin parar de llorar y acabando haciendo un gesto de indiferencia, se giró en la cama dándole la cara a la pared y haciendo un pequeño hueco para que ella pudiera tumbarse. Esa fue la última vez que la niña entró en su habitación y al principio ni le dio importancia, pero después acabó preguntándose el por qué.
"¿Duermes... bien?" El chico estaba mirando más al plato vacío que tenía delante suyo que a la niña que se había sentado a su lado para comer.
"¡Si!" No la miraba pero notó la sonrisa infantil que no sabía como aún la podía mantener. "Cuando no puedo dormir, voy a la habitación de mi hermano." Él se había olvidado de que su hermano, poco después de la última noche durmiendo juntos, había llegado a la organización. ¿Cómo podría ir la niña con él cuando su hermano ya estaba allí?
El grito deprimido de Komui lo sacó de sus recuerdos cuando lo escuchó hablando con Reeves sobre como su queridísima y preciosa hermana ya no dormía con él cuando no podía quedarse dormida.
¿Había dejado Lenalee de sufrir insomnio? Suspira, para preocupación de un Allen sentado a su lado, y se alegra al saber que la niña que tanto sufría ahora dormía bien.