30vicios kanda x lenalee (d.gray-man)
Título: Insecto
Serie: D.Gray-Man
Personajes: Kanda Yuu x Lenalee Lee
Género: General/Humor
Advertencias: G, 628 palabras
Tabla: Aquí
16. Insecto
Era un domingo a las nueve de la mañana, todo el mundo empezaba a levantarse al sentir el bonito canto de los pájaros previendo un agradable tiempo para ese día. La cafetería empezaba a llenarse de gente necesitada de café de buena mañana y como todos los días ahí encontraban el café listo para coger y beber.
Todo parecía tranquilidad hasta que el grito de Komui hace que toda la organización se ponga en guardia siendo su querida hermana la primera en llegar a la oficina de su hermano que fue donde se produjo el grito, la chica mira rápidamente hacía todos los sitios en busca del peligro pero cuando parece no encontrar nada mira extrañada a su hermano, que subido a su silla no puede evitar tartamudear de miedo al hablar.
“Hay... un...una... cu... cucara... ¡CUCARACHA!”
Como si hubiera una grabadora en la oficina, la voz de Reeves suena por toda la organización avisando que todo había sido una falsa alarma, que todo el mundo podía volver a la tranquilidad de siempre y todos deciden hacer caso a Reeves a excepción de Lenalee que está siendo agarrada por su hermano que no para de repetir un “sálvame”.
Teniendo los buenos empleados que tenían, Allen y Rabi no tardan en llegar a la oficina para asegurarse de que todo estaba bien, aunque más bien iban con intención de enterarse de los motivos del grito, pero cuando encuentran a Komui encima de la silla sollozando y a su hermana tirada por los suelos buscando algo desconocido para ellos no pueden evitar preguntarse qué era lo que estaba pasando allí y con la sencilla y tranquila explicación de Lenalee consiguieron reírse un ratito de Komui hasta que este reaccionó y los amenazó con un nuevo Komurin anti-Allen y anti-Rabi consiguiendo así que se callaran y se fueran.
“¡Lo he encontrado!” La chica soltó la frase con alegría haciendo que su hermano se emocionara al ver que la pesadilla iba a acabarse en cuestión de segundos pero justo cuando parecía que la chica ya lo tenía dicho insecto salió corriendo consiguiendo escaparse de un futuro incierto.
Mientras que Lenalee seguía tirada en el suelo persiguiendo a esa cucaracha, Komui volvió a chillar de nuevo sin parar hasta que la chica, ya bastante harte de la cucaracha y de los gritos, le dijo que tuviera la boca callada si quería tener a la cucaracha fuera del cuarto y fue entonces cuando el hermano mayor se mordió el labio para no emitir ningún ruido. La chica volvió a encontrar la cucaracha y sin quitarle el ojo de encima la persiguió hasta llegar a la puerta de la oficina, que se abrió para hacer acto de presencia del último caballero para quejarse de los “malditos” gritos de Komui que, sin darse cuenta, acabo pisando la cucaracha justo al entrar.
No lo notó, pero al ver a Lenalee tirada en el suelo con la cara a pocos centímetros de sus zapatos y al propietario de los malditos gritos saltando de la silla para tirarse a los brazos de su salvador, vigilando de no pisar a su preciada hermana aún sorprendida en el suelo, hizo que, intentando sacarse a Komui de encima preguntara que había pasado.
Lenalee se levantó ese momento bastante cansada al tener que aguantar de buena mañana una situación como esa y mirando a su hermano con una mirada que le hacía entender que no volviera a hacer una escena como esa solo le comentó al chico recién llegado que había un insecto en el cuarto.
Cuando la puerta se cerró, los brazos de Komui volvieron a agarrar a Kanda y con la cara llena de lágrimas le pidió una última cosa.
“Kanda... ¡¡Ayúdame a recuperar a mi preciosa hermana!!”
Serie: D.Gray-Man
Personajes: Kanda Yuu x Lenalee Lee
Género: General/Humor
Advertencias: G, 628 palabras
Tabla: Aquí
16. Insecto
Era un domingo a las nueve de la mañana, todo el mundo empezaba a levantarse al sentir el bonito canto de los pájaros previendo un agradable tiempo para ese día. La cafetería empezaba a llenarse de gente necesitada de café de buena mañana y como todos los días ahí encontraban el café listo para coger y beber.
Todo parecía tranquilidad hasta que el grito de Komui hace que toda la organización se ponga en guardia siendo su querida hermana la primera en llegar a la oficina de su hermano que fue donde se produjo el grito, la chica mira rápidamente hacía todos los sitios en busca del peligro pero cuando parece no encontrar nada mira extrañada a su hermano, que subido a su silla no puede evitar tartamudear de miedo al hablar.
“Hay... un...una... cu... cucara... ¡CUCARACHA!”
Como si hubiera una grabadora en la oficina, la voz de Reeves suena por toda la organización avisando que todo había sido una falsa alarma, que todo el mundo podía volver a la tranquilidad de siempre y todos deciden hacer caso a Reeves a excepción de Lenalee que está siendo agarrada por su hermano que no para de repetir un “sálvame”.
Teniendo los buenos empleados que tenían, Allen y Rabi no tardan en llegar a la oficina para asegurarse de que todo estaba bien, aunque más bien iban con intención de enterarse de los motivos del grito, pero cuando encuentran a Komui encima de la silla sollozando y a su hermana tirada por los suelos buscando algo desconocido para ellos no pueden evitar preguntarse qué era lo que estaba pasando allí y con la sencilla y tranquila explicación de Lenalee consiguieron reírse un ratito de Komui hasta que este reaccionó y los amenazó con un nuevo Komurin anti-Allen y anti-Rabi consiguiendo así que se callaran y se fueran.
“¡Lo he encontrado!” La chica soltó la frase con alegría haciendo que su hermano se emocionara al ver que la pesadilla iba a acabarse en cuestión de segundos pero justo cuando parecía que la chica ya lo tenía dicho insecto salió corriendo consiguiendo escaparse de un futuro incierto.
Mientras que Lenalee seguía tirada en el suelo persiguiendo a esa cucaracha, Komui volvió a chillar de nuevo sin parar hasta que la chica, ya bastante harte de la cucaracha y de los gritos, le dijo que tuviera la boca callada si quería tener a la cucaracha fuera del cuarto y fue entonces cuando el hermano mayor se mordió el labio para no emitir ningún ruido. La chica volvió a encontrar la cucaracha y sin quitarle el ojo de encima la persiguió hasta llegar a la puerta de la oficina, que se abrió para hacer acto de presencia del último caballero para quejarse de los “malditos” gritos de Komui que, sin darse cuenta, acabo pisando la cucaracha justo al entrar.
No lo notó, pero al ver a Lenalee tirada en el suelo con la cara a pocos centímetros de sus zapatos y al propietario de los malditos gritos saltando de la silla para tirarse a los brazos de su salvador, vigilando de no pisar a su preciada hermana aún sorprendida en el suelo, hizo que, intentando sacarse a Komui de encima preguntara que había pasado.
Lenalee se levantó ese momento bastante cansada al tener que aguantar de buena mañana una situación como esa y mirando a su hermano con una mirada que le hacía entender que no volviera a hacer una escena como esa solo le comentó al chico recién llegado que había un insecto en el cuarto.
Cuando la puerta se cerró, los brazos de Komui volvieron a agarrar a Kanda y con la cara llena de lágrimas le pidió una última cosa.
“Kanda... ¡¡Ayúdame a recuperar a mi preciosa hermana!!”