30Vicios kanda x lenalee (d.gray-man)
Título: Reglas
Serie: D.Gray-Man
Personajes: Kanda Yuu x Lenalee Lee
Género: General
Advertencias: G, 587 palabras
Tabla: Aquí
03. Reglas
Su relación siempre ha estado llena de reglas, hechas por ellos o por gente que no formaba parte de dicha relación.
Cuando se conocen, Kanda le da una lista larga de reglas: no me sigas, no me hables si no es necesario, no te me acerques más de lo necesario, no me toques el pelo ni menciones lo mucho que te gusta, no me toques nada, no entres a mi habitación, no me hagas caras, no me abraces ni me cojas de la mano,...
Lenalee se rió cuando escuchó esa lista pero intentó cumplirla, lástima que acabó sin poder resistirse a muchas de esas cosas que tenía prohibidas.
Cuando dejan atrás la lista de Kanda y ya son más amigos que antes, Lenalee decide que es hora de seguir sus reglas.
No luches solo, no te mueras, cree en los demás, deja que te ayuden, vuelve siempre y cuanto más antes mejor, no me hagas sufrir esperándote, llévate mejor con Allen y Rabi,…
Kanda gruñó porque era como si la chica viviera con la preocupación y aunque desea decirle que no se preocupe, no puede y se calla.
Cuando empiezan a haber rumores, creados evidentemente por Rabi que seguramente habría metido a Allen también, Komui secuestra al moreno y le da una lista.
No la toques, no le miras nada más a parte de la cara y solo cuando ella te hable, no pienses en ella, no la utilices para hacer xxx cosas, no te acerques a ella, no la beses, no vayas a su cuarto, no la espíes,...
Kanda vuelve a reírse porque la mitad de esas cosas eran cosas que él no hacía, aún.
Muchas de las reglas de Komui acaban siendo incumplidas cuando, al cabo de un tiempo, se cogen, o más bien ella le coge, de la mano, cuando ella se pone de puntitas y él se deja besar, cuando sus ojos observan cada parte de ella y cuando a veces se esconden en el cuarto de la chica y, como era normal, todo el mundo se entera.
Muchos de ellos, o todos, se acercan a él y le dicen no la ensucies y otras cosas parecidas y él se ríe de ellos pero cuando el general Tiedoll se acerca a Lenalee y le dice que no le haga daño a Kanda siente que sería mejor morir que aguantar la situación.
Reeves, cuando la cosa parece hacerse “oficial” le dice a Kanda que como haga daño a Lenalee que no solo sufrirá las garras de Komui, sino las suyas y la de los demás miembros de la organización, que no estaba en contra suyo, pero que ante todo, para él, estaba la felicidad de la chica.
Kanda no se queja ante ninguna de las reglas que le ponen, pero eso no quiere decir que las acepte tampoco, y mientras piensa en a quien tiene que maldecir se da cuenta de que a él todo el mundo le estaba poniendo reglas y cuando preparaba la Mugen para enseñar ahí quien mandaba, Lenalee le coge de la mano.
“Cuando tengamos nuestra primera hija tú serás el primero poniendo reglas a todo el mundo para que nadie se le acerque ni le haga nada de lo que tú no quieras que le hagan.”
El moreno no le hace caso, está ocupado digiriendo la palabra “hija”, porque aunque la espada se le cae en todo el pie y mientras la chica va desapareciendo por el pasillo riéndose, seguramente de él, él esta simplemente en estado de shock.
Serie: D.Gray-Man
Personajes: Kanda Yuu x Lenalee Lee
Género: General
Advertencias: G, 587 palabras
Tabla: Aquí
03. Reglas
Su relación siempre ha estado llena de reglas, hechas por ellos o por gente que no formaba parte de dicha relación.
Cuando se conocen, Kanda le da una lista larga de reglas: no me sigas, no me hables si no es necesario, no te me acerques más de lo necesario, no me toques el pelo ni menciones lo mucho que te gusta, no me toques nada, no entres a mi habitación, no me hagas caras, no me abraces ni me cojas de la mano,...
Lenalee se rió cuando escuchó esa lista pero intentó cumplirla, lástima que acabó sin poder resistirse a muchas de esas cosas que tenía prohibidas.
Cuando dejan atrás la lista de Kanda y ya son más amigos que antes, Lenalee decide que es hora de seguir sus reglas.
No luches solo, no te mueras, cree en los demás, deja que te ayuden, vuelve siempre y cuanto más antes mejor, no me hagas sufrir esperándote, llévate mejor con Allen y Rabi,…
Kanda gruñó porque era como si la chica viviera con la preocupación y aunque desea decirle que no se preocupe, no puede y se calla.
Cuando empiezan a haber rumores, creados evidentemente por Rabi que seguramente habría metido a Allen también, Komui secuestra al moreno y le da una lista.
No la toques, no le miras nada más a parte de la cara y solo cuando ella te hable, no pienses en ella, no la utilices para hacer xxx cosas, no te acerques a ella, no la beses, no vayas a su cuarto, no la espíes,...
Kanda vuelve a reírse porque la mitad de esas cosas eran cosas que él no hacía, aún.
Muchas de las reglas de Komui acaban siendo incumplidas cuando, al cabo de un tiempo, se cogen, o más bien ella le coge, de la mano, cuando ella se pone de puntitas y él se deja besar, cuando sus ojos observan cada parte de ella y cuando a veces se esconden en el cuarto de la chica y, como era normal, todo el mundo se entera.
Muchos de ellos, o todos, se acercan a él y le dicen no la ensucies y otras cosas parecidas y él se ríe de ellos pero cuando el general Tiedoll se acerca a Lenalee y le dice que no le haga daño a Kanda siente que sería mejor morir que aguantar la situación.
Reeves, cuando la cosa parece hacerse “oficial” le dice a Kanda que como haga daño a Lenalee que no solo sufrirá las garras de Komui, sino las suyas y la de los demás miembros de la organización, que no estaba en contra suyo, pero que ante todo, para él, estaba la felicidad de la chica.
Kanda no se queja ante ninguna de las reglas que le ponen, pero eso no quiere decir que las acepte tampoco, y mientras piensa en a quien tiene que maldecir se da cuenta de que a él todo el mundo le estaba poniendo reglas y cuando preparaba la Mugen para enseñar ahí quien mandaba, Lenalee le coge de la mano.
“Cuando tengamos nuestra primera hija tú serás el primero poniendo reglas a todo el mundo para que nadie se le acerque ni le haga nada de lo que tú no quieras que le hagan.”
El moreno no le hace caso, está ocupado digiriendo la palabra “hija”, porque aunque la espada se le cae en todo el pie y mientras la chica va desapareciendo por el pasillo riéndose, seguramente de él, él esta simplemente en estado de shock.