Nella Fantasia - El Cielo es el límite

Aug 25, 2015 01:18

Autor: darkluthien
Fandom: Original
Claim: Natasha Volkova
Tabla: Nella Fantasia
Tema: #30 - El Cielo es el límite
Título: El Cielo es el límite
Advertencias: Ninguna
Notas: Natasha, 22 años


El Cielo es el Límite.-
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El tiempo había pasado demasiado rápido sin que me diese cuenta, demasiadas cosas en muy poco tiempo. Habían pasado casi dos años en donde no tuve noticias de Nikolai, las cosas en La Academia demandaban mí tiempo y mi atención. Y sin darme cuenta habían pasado casi dos años sin saber de él. Habían sido demasiados eventos.
Para comenzar, me asignaron más cursos de lo esperado, por lo que mi tiempo libre se redujo bastante. No me desagradaba, realmente me gustaba motivar a la nueva generación y trabajar con los más experimentados, a pesar de que era una de las maestras más jóvenes los alumnos me respetaban bastante. Igualmente el resto de los maestros, me aceptaban sin problemas, y a muchos les parecía que mis métodos de enseñanza eran nuevos y que nunca los estudiantes habían estado tan entusiasmados en tratar de llevar sus mentes más allá. Era como si el periodo de Alain hubiese dejado solo sombras, pero no me gustaba pensar mucho en él. Me provocaba sentimientos encontrados. Para mitad de semestre, el Headmaster nos citó a todos los maestros pues tenía una noticia importante que comunicarnos. Michail por lo general no era tan formal para dar las noticias que tenían que con el día a día en La Academia, pero el tono que había usado nos puso a todos en alerta.

- Les agradezco que hayan venido con tanta prontitud. Pero debo comunicarles algo de suma importancia para el futuro de La Academia… - hizo una pausa que nos mantuvo a todos en el borde de nuestros asientos esperando a que continuase - He de convocar una votación con ustedes y con el consejo superior, para la elección de un nuevo Headmaster - hubo un murmullo generalizado que amenazaba con alzarse peligrosamente, pero Michail levantó una de sus manos, pidiendo calma - No es algo que vaya divulgando por ahí, pero todos ustedes saben que he gozado de una vida muy, muy, muy larga… - Michail bajó la cabeza, sonriendo de forma apagada, su mirada se nubló por unos momentos - Pero la flama de la vida en mí se está extinguiendo poco a poco, y muy pronto me sumaré al mundo espiritual. Y antes de ello, se me ha concedido la oportunidad de pasar mis últimos días en el templo de Lhûn. Regresaré a DoAki antes de que ocurra… claro.

Me sentía en extremo afectada por la noticia que el Headmaster nos estaba comunicando, y al parecer no era la única en el salón. Muchos de los maestros habían bajado la cabeza, tratando de asimilar la información. El Headmaster formaba parte de nuestras vidas, era un hombre formidable, de impresionantes poderes. Pero todos conocíamos la situación sobre su longevidad.

- El consejo me ha pedido que deje la recomendación sobre unos de ustedes para ocupar el cargo del Headmaster. Y he tomado mi decisión, pero será el consejo y ustedes mismos quienes determinen si mi recomendación debe ser tomada en cuenta. Espero que todos puedan llegar a un acuerdo - Michail respiró profundamente antes de continuar - Quiero que sepan que me he tomado el tiempo de sopesar mi decisión, y que la persona a la que he elegido ha demostrado tener el talento y el coraje que significa ser el cabecilla de esta institución, La Academia es el faro en el que DoAki confía, somos nosotros quienes motivamos a las nuevas generaciones. Ha sido difícil, ya que todos ustedes cumplen con los requisitos, pero debo decir que, quien he elegido ha demostrado algo diferente y espero que pueda mantenerlo y sembrarlo en las nuevas generaciones. Natasha Volkova, espero que puedas motivar a las mentes jóvenes, como yo lo hice contigo hace tantos años atrás cuando te traje aquí.

De ahí en adelante todo había sido como torbellino. Aparentemente todos estaban de acuerdo con respetar la última decisión del Headmaster Michail, el consejo estuvo encantado con que yo tomará el cargo como la próxima Headmistress, así como el resto de los maestros. Yo no tenía objeciones, pero estaba pasando todo demasiado rápido. Pronto me vi siendo preparada por el consejo para asumir el cargo en cuanto Michail abandonara DoAki. Para mi fortuna, pude reunirme con él antes de su viaje a Lhûn, él tenía la completa seguridad de que yo lo haría espléndidamente y que todo iría bien. Recuerdo sus últimas palabras antes de que se fuera.

- Natasha… en ti veo lo que La Academia necesita en el futuro. Pero no solo eso, creo que serás tú quien comience una nueva época para los Hechiceros… Hay grandes cosas destinadas para ti. Tienes el porte de una reina y la determinación de una maestra, ten fuerza mi niña, pues en ti recaerá la responsabilidad de mantener el equilibrio de las fuerzas mágicas… - me miró una vez más, sonriéndome - Natasha, el cielo es el límite para ti…

Recuerdo sus palabras aun hoy, como si hubiesen quedado marcadas a fuego en mi piel. Era prácticamente lo mismo que me había dicho la Maestra Raisaa hacía muchos años. Pero no tuve mucho tiempo para pensar en ello, las cosas estaban pasando demasiado rápido. Ni siquiera había podido enviarle un mensaje a Nikolai, aunque era seguro que en La Torre de los Colmillos la noticia ya se sabría.

La ceremonia de presentación se realizaría en conjunto con La Torre de los Colmillos, para honrar la -muy antigua- alianza entre las dos instituciones. Ese día había amanecido con prisas, me habían entregado la túnica que usaría como Headmaster, la cual tenía un broche con el emblema de La Academia, el cual hacía juego con el anillo que ya usaba. La ceremonia consistía en presentar al nuevo Headmaster, en este caso Headmistress, a todo el alumnado, a los maestros y al consejo, a las figuras ilustres de DoAki y a la comitiva proveniente de La Torre de los Colmillos, la cual incluía al Headmaster, al consejo de La Torre y a maestros y alumnos destacados. Mi papel en toda la ceremonia era mantener la calma, proclamar el juramento a La Academia y presentarme como la nueva Headmistress.
Hasta que me anunciaran, debía esperar en una pequeña sala, que quedaba en la parte de atrás del gran salón. Desde ahí, las voces solo me llegaban en murmullos algo molestos, por lo que el llamado sería mucho más escandaloso y además telepático -para asegurarse de que les escuchara-
Yo estaba en calma, algo abrumada, por lo que pegué un salto cuando sentí un suave golpe en la puerta de la sola, con curiosidad me acerqué y la abrí, encontrándome con Michail.

- ¿Michail q-que hace aquí? - balbuceé

- No estarías pensando que me perdería tu ascenso en La Academia ¿O sí? - Michail me dijo con la voz llena de risa. Se veía tan joven… no podía creer que le quedara poco tiempo con nosotros. Ese pensamiento me llenó de tristeza y él lo notó. Con suavidad levantó mi rostro desde mi mentón con sus dedos suavemente, y me miró a los ojos - No. Yo voy a estar bien, querida… además, hoy comienza tu propia aventura, no podría perderme el inicio por nada… después, te veré desde arriba - me hizo un guiño, logrando levantar en algo mi espíritu - ¿Has hablado con Nikolai?

Eso me sorprendió - N-no, no he sabido nada de él en estos dos años, creo que ambos estamos ocupados con nuestros asuntos. Y bueno, estos meses han sido como un torbellino.

- Entonces te llevarás una sorpresa - se rio suavemente, me besó en la frente y se fue.

En cuestión de minutos me llamaron para presentarme a tomar el juramento. Como era de esperarse, el gran salón estaba repleto de personas que no había visto jamás, me acerqué hasta una especie de altar que habían levantado y me coloqué frente al líder del consejo, quien sostenía el broche de los Headmasters.
Recité el juramento mientras colocaba mi mano sobre El Libro de Nicte, ella era la guardiana de los hechiceros, según la historia del tiempo fue ella quien nos concedió el don que disfrutábamos. Una vez terminado mi juramento, el líder del consejo colocó el broche en mi túnica… convirtiéndome en la nueva Headmistress. Una de las más jóvenes en toda la historia de La Academia.

- Rendid vuestros respetos a la nueva Headmistress - Dijo el líder del consejo con una voz potente para que se escuchara a lo largo de todo el salón. A cambio recibí una ovación de parte de los presentes - Recibid a la comitiva proveniente de La Torre de los Colmillos…

Entonces el grupo que venía en representación de La Torre se levantó, con el Headmaster a la cabecilla del grupo. Tuve que mantener la calma, sentí como mis rodillas comenzaron a ceder pero me mantuve firme en mi lugar. Ahora era la Headmistress, no podía permitirme perder el control o demostrar debilidad frente a cualquier situación.
Oh, pero Michail había estado en lo correcto. Debí hacerle caso, pues si me había llevado una sorpresa. Y vaya que sorpresa.
A la cabecilla del grupo, como flamante nuevo Headmaster, venía Nikolai.
Maldito, podría habérmelo advertido.

- Presentamos nuestros respetos a la Headmistress - Dijo, sonando solemne, pero en sus ojos pude ver el brillo de un niño cometiendo una travesura, y cuando se aseguró que nadie más nos ponía atención, me guiño un ojo.

Bastardo.

El resto de la ceremonia transcurrió sin novedad. Gente presentando sus respetos, sus felicitaciones. Era todo demasiado protocolar para mi gusto, por lo que en cuanto me escabullí para descansar un poco de todo aquello, sabía que tendría que acostumbrarme a llevar los rígidos protocolos de La Academia, pero en ese momento solo quería respirar. Me refugié en uno de los balcones del salón, uno de los que daban al jardín interior de La Academia.

Respira

Sentí una mano sobre mi hombro, pero no me sobresalté. Sabía perfectamente a quien pertenecía esa mano.

- ¿Ah sí que Headmaster? - susurré

- Bueno… tu sabes, soy extremadamente talentoso y encantador - se rió sin tono de burla, más bien de forma traviesa, yo también reí suavemente.

- Ahora debemos ser responsables y todo eso, buena suerte con tu nuevo puesto… Pero podrías habérmelo comentado. Han sido dos años Nikolai

- Dos años, si… pero quizás sabrás como son las cosas en La Torre, una vez estuve listo… tuve que asumir casi de inmediato. Mucho más turbulento de lo que ha sido para ti querida.

- Si, ha sido todo demasiado turbulento, estoy algo mareada…

- Pues entonces… - Pasó su brazo sobre mis hombros suavemente, manteniéndome cerca de él en un abrazo - Yo estaré aquí, para ayudarte cuando te sientas así.

Ambos nos quedamos así un rato. Confiaba en él, como él confiaba en mí. Sabía que nuestros caminos estaban separados y a la vez demasiado cercanos, ambos emprendíamos una nueva aventura, quizás la más grande que nos hubiésemos imaginado. Ambos éramos la representación de un símbolo de poder y fortaleza respectivamente.
El cielo era el límite para nosotros ahora. Y podríamos compartirlo.
Aquel abrazo me lo decía. Este no era el final para nosotros.
El cielo es el limite Natasha.

o: nella fantasia: natasha volkova, #tabla hipnótica, autor: darkluthien

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