5x10: Drabbles de San Valentín [ARASHI]

Mar 18, 2012 23:35

Este fue mi especial de San Valentín. Se me ocurrió la idea un día anterior y el día que publiqué estaba deprimida (por algo que había hecho mi mejor amiga), pero esto me animo.

Espero que les guste. Más fanfics en español aquí



---------------------------SakurAiba----------------------------------

Aiba no dejaba de dar vueltas por su apartamento. Tenía que encontrar un regalo para Sho y tenía que ser de inmediato. El problema es que sabía que cualquier regalo que quisiera darle sería extravagante.

- Cómprale algo que le sea útil en el trabajo- había sugerido Jun cuando Aiba preguntó.

- Tal vez deberías hacer algo tú- dijo Ohno, ganándose una sonrisa del menor.

- Si tienes sexo con él será un buen regalo- sugirió Nino sonriendo burlón. Ese comentario había causado que Aiba lo zapeara.

Aiba lo pensó bien, ¿había algo que pudiera darle a Sho que fuera práctico y que reflejara lo mucho que lo quería? Afortunadamente así fue, y Aiba pasó toda la tarde entre diamantina, pinturas y adornos.

Al día siguiente cuando Sho fue a su casa, Aiba lo saludó sonriente.

- Feliz San Valentín- dijo Sakurai abrazándolo y besándolo en la mejilla.

- Tengo algo para ti- anunció feliz, sacando un paquetito envuelto con cintas de colores.

Sho lo tomó con cuidado y comenzó a desenvolverlo. Tras el papel se dejó ver la portada café de un cuaderno de notas.

- Ah, gracias- dijo Sho ligeramente desconcertado.

- Necesitabas algo para tomar notas en el noticiero, ¿no es así?- dijo Aiba. Sho asintió sonriendo levemente.

- Gracias, no era…

- Ábrelo- le interrumpió Aiba. Sho parpadeó extrañado, pero obedeció.

En la contraportada del cuaderno, en medio de un sinfín de adornos, se encontraba la foto que ambos se habían tomado en su primera cita. La sonrisa de Sho no pudo haber sido más radiante en ningún otro momento.

- Esto es lo que realmente quería- dijo abrazando al menor fuertemente- Yo también tengo algo para ti.

Aiba estaba a punto de preguntar cuando un ladrido sonó en el pasillo. Y Sho supo por su sonrisa que había encontrado el regalo perfecto.

-----------------------------------JunToshi------------------------------------------------------

“Ohno-kun, me gustas” esas habían sido las exactas palabras de aquel desgarbado muchacho de diecisiete años. La reacción de Ohno en ese momento había sido reírse.

- Aún eres muy pequeño para estar enamorado de mí- dijo, revolviendo sus suaves rizos castaños.

- Es verdad- insistió Jun cruzándose de brazos- Y quiero que salgas conmigo en una cita.

Ohno suspiró y negó con la cabeza.

- No juegues con eso, Matsumoto-kun- le pidió el mayor abandonando la sala.

Unos años después, con Arashi en la cima, Jun repitió su petición.

- Jun-kun, no puedes estar hablando en serio- negó Ohno.

- ¿Qué tiene de malo? Oh-chan, me gustas- insistió el menor. Ohno suspiró y negó con la cabeza.

- No puedo hacerlo,- dijo- no sería correcto para el grupo.

-Entonces la razón por la que no quieres salir conmigo es más por el grupo que porque no te guste, ¿verdad?- preguntó Jun sonriendo. Ohno no pudo contradecirlo.

Y es que en todo ese tiempo sus sentimientos para con Jun habían cambiado tanto como el mismo Jun. El menor tenía una voz tan potente que podía hacerlo temblar, pero tan dulce como para que Ohno necesitara escucharlo a todo momento. Jun era más que un compañero, era un gran apoyo para él. ¿Qué si amaba a Jun? Por supuesto, pero su orgullo le impedía admitirlo.

No fue sino hasta que Ohno fue consciente de que no era el único que sentía algo por el menor que decidió dejar el orgullo a un lado y aceptar sus sentimientos por él.

-Jun, me gustas- le dijo frente a frente una noche tras el ensayo. La sonrisa de Jun jamás se había visto más radiante.

-Entonces, ¿saldrías conmigo?- le pidió a Ohno mientras lo tomaba de la mano. Ohno atrajo hacia sus labios la mano de Jun y asintió sonriendo.

Entonces Jun lo abrazo y jamás lo dejó ir.

------------------------------------SakuMiya-----------------------------------------------------

Cuando entraron a la sala de ensayos y vieron a Nino y a Sho sentados lo más lejos posible el uno del otro, todos supieron que algo estaba mal.

- ¿Y ahora qué?- le preguntó Jun frustrado a Sho.

- Lo estuve esperando y nunca llegó- respondió el mayor, mirando ceñudo a su pareja.

- Ya te dije que tenía que hacer algo importante- se defendió Ninomiya. Sho simplemente lo ignoró y caminó a donde el entrenador los esperaba, siendo seguido por Nino- Y además, ya me disculpé.

- Era nuestro aniversario Nino- gritó exasperado Sho- ¿qué podía ser más importante que eso?

En ese momento la puerta se abrió y un mensajero

- ¿Sakurai Sho-kun?- preguntó, haciendo que todos lo voltearan a ver. El aludido, asintió confundido- Bien, esto es para usted.

Acto seguido le entregó un gran ramo de flores y salió de la habitación. Sho miró sorprendido las flores y tomó la tarjeta que venía en ellas.

“Te amo. Feliz aniversario”

Sho sonrió y abrazó a su novio.

- Lo lamento- le susurró al oído. Nino desvió la mirada, sonrojado.

- Esas flores debieron llegar ayer- gruñó molesto. Sho no pudo evitar soltar una carcajada.

---------------------------------------MatsuMiya--------------------------------------------------

Nino estaba de mal humor, eso no era raro, pero también Ohno y Jun evitaban todo contacto, y eso ya no era normal.

- ¿Ocurrió algo Nino?- preguntó Aiba.

- No es asunto tuyo- murmuró el menor, poniéndose de pie y saliendo de la habitación. Ohno y Jun intercambiaron miradas y lo siguieron.

- ¡Eh, Nino!- lo llamó el mayor. El aludido se detuvo y volteó a mirarlos- ¿Sabes? No es necesario que elijas ahora.

- Pero sería mejor si lo hiciera- murmuró Jun, ganándose una mirada molesta por parte del mayor del grupo- ¡Oh, por favor! Como si tú no lo pensaras.

- No es lo que yo piense o no Jun- dijo fríamente Ohno- Sino lo que Nino quiera.

- De hecho,- interrumpió Nino, mirándolos fijamente- yo ya hice mi elección.

Nino sabía que le causaría problemas cuando Jun se le declaró. No era porque a él no le gustara el menor, sino porque sus caracteres eran bastante explosivos, pero pronto se dio cuenta de que era algo más grave cuando Ohno también le dijo que estaba enamorado de él.

- Yo… tengo que pensarlo Oh-chan- había sido su respuesta.

- Todo está bien- dijo Ohno sonriendo- Te esperaré

Obviamente cuando Jun se enteró su actitud hacia el líder se volvió fría. Quienes en un momento fueron excelentes amigos se convirtieron en rivales no declarados.

- No quiero forzarte a elegir- le había dicho Ohno-, pero sé que ambos podemos ser felices juntos.

Jun por su parte se había comportado distante, lo cual casi le había causado un ataque a Nino. Pasó un tiempo antes de que pudiera aclarar sus pensamientos y entender sus sentimientos.

- Oh-chan- comenzó a decir, mirando exclusivamente al mayor- eres mi mejor amigo y siempre he podido confiar en ti, pero eso es todo. No puedo ser más que un amigo contigo.

La expresión de Jun se iluminó mientras que Ohno luchaba por no quebrarse.

-Lo entiendo Nino-chan, todo está bien entre nosotros- dijo el mayor, luego volviéndose hacia Jun inclinó levemente la cabeza y añadió- Por favor cuida de él.

Acto seguido, volvió a la sala de ensayos, dejando a la pareja a solas. Nino y Jun se miraron un largo rato sin decir nada, hasta que Jun dio un par de pasos vacilantes y atrajo al hacia él.

- Gracias- dijo antes de besarlo. Nino cerró los ojos correspondiendo el beso y deseando que Ohno estuviera bien con su decisión.

-------------------------------------MasaMoto----------------------------------------------------

Jun estaba tumbado en su cama mirando al techo. De vez en cuando miraba al reloj, ansioso, antes de suspirar. Su teléfono celular vibró y rápidamente se apresuró a tomarlo.

“Jun-kun, lo lamento pero no podré ir hoy.
Nos veremos mañana.
Aiba”

Jun suspiró molesto y se apresuró a marcar el número de Aiba. Uno, dos, tres tonos y él no contestaba. Frustrado se dejó car de nuevo en la cama, luchando por no perder la compostura.

- Ese idiota- murmuró intentando olvidar el tema.

A la mañana siguiente, Jun estaba histérico porque en todo el día AIba no lo había mirado ni una sola vez. Para él eso era una señal inequívoca de que algo estaba mal.

- Lo lamento chicos, pero tengo cosas que hacer hoy- se disculpó Aiba mientras se ponía de pie- Los veré mañana.

- ¡Eh, Aiba-chan! Prometiste que irías al bar con nosotros hoy- le reclamó Nino mientras el aludido recogía sus cosas.

- Lo siento, pero tengo algunos pendientes que arreglar- se disculpó sonriendo.

- ¿Y esos pendientes son bonitos?- preguntó Nino con intención de molestarlo- ¿No necesitas ayuda con ellos? Creo que estoy libre…

- Gracias Nino-kun pero…- en ese momento se escuchó un golpe. Todos miraron a Jun sorprendidos, mientras él se apresuraba a tomar sus cosas y a salir de la habitación. Aiba frunció el ceño y miró a Nino, molesto- Gracias Kazu-chan

- ¿Yo que hice?-preguntó él, confundido. El más alto no respondió, sino que de inmediato salió corriendo de la habitación tras Jun.

- ¡Jun-kun, Jun-kun!- le llamó Aiba. El menor se dio vuelta y lo abrazó de improviso.

- Lamento no haber podido acompañarte a visitar a tus padres

- Está bien- respondió Aiba, devolviéndole el abrazo.

- Lamento no estar disponible cuando quieres salir, lamento no poder quedarme contigo en las noches cuando te sientes solo y también lamento ser un pésimo novio, pero por favor no me dejes.

- No planeo dejarte- dijo Aiba riendo. Jun lo miró confundido- Y tampoco eres un pésimo novio.

- ¿Entonces por qué me ignoras?- preguntó el más bajo, intentando disimular su preocupación.

- Ven- pidió Aiba tirando de su brazo- Hay algo que quiero que veas

Así que Jun se dejó guiar por la ciudad hasta un amplio jardín que daba a la bahía de Tokio.

- Ahí- dijo el mayor, señalando un punto en la obscuridad en la otra orilla. Jun intentó mirar pero no vio nada- Espera un segundo.

Aiba sacó de su bolsillo un pequeño control remoto y oprimió el botón. Las luces del otro lado se iluminaron, mostrando un letrero de muchos colores. La frase “te amo” resaltaba a mitad de este.

- ¿Cómo...?- preguntó Jun sin aliento. Aiba sonrió.

- ¿Te gusta? Tarde en conseguir la pintura y en que alguien quisiera dejarme pintar ahí. Quería que fuera algo que todos pudieran ver y que a ti…

No pudo terminar la frase. Los labios de Jun se apoderaron de su boca y de su capacidad de pensar.

- Es perfecto- murmuró Jun antes de volver a besar a Aiba, obteniendo una sonrisa radiante por parte del mayor.

----------------------------------------OhMiya-------------------------------------------------

Las luces brillaban sobre todo el escenario. A Ohno le costaba trabajo mirar al público, pero sabía que todos lo estaban viendo. Pudo escuchar a algunas de las chicas gritar cuando Nino pasó un brazo sobre sus hombros mientras seguían cantando. Con un minuto restante de la canción al mayor no le molestó que Nino no quisiera alejarse, sino que por el contrario, rodeó su cintura y lo atrajo más a él.

- ¿Crees que deberíamos hacerlo?- le susurró el pelinegro al oído. Ohno sonrió tímidamente.

- Tal vez, ellas lo quieren

- No te estoy preguntando lo que ellas quieren- dijo Nino poniendo los ojos en blanco- ¿Lo quieres tú?

- ¿Qué?- preguntó sorprendido Ohno. Nino rió levemente

- ¿Quieres que te bese?

- Ah… eso creo- dijo el mayor nervioso- Quiero decir, puedes hacerlo si tú quieres.

Nino sonrió, con esa sonrisa tan típica suya.

- Aquí no- dijo, encaminándolo al centro del escenario- Quiero que todos lo vean.

El corazón de Ohno se aceleró cuando sintió la mano de Nino en su barbilla. Lentamente sus labios se unieron en un tierno beso, arrancando un gritó a las fans mientras los reflectores se iban apagando. Y cuando terminó, Ohno apenas podía respirar.

- No estuvo mal- dijo, desviando la mirada. Nino sonrió travieso.

- Tienes razón, pero creo que puedo mejorarlo- dijo, apresando sus labios de nuevo. Esta vez el beso fue tan apasionado que Ohno agradeció que los reflectores estuvieran apagados o sino las fans hubieran visto un problema en su entrepierna.

-------------------------------------SakuMoto----------------------------------------------------

Jun solo quería tener una cita normal, ¿acaso era mucho pedir? Él y Sho habían ido a un restaurante pequeño para no armar tanto alboroto, sin embargo la chica de la registradora, la mesera y otras comensales los habían reconocido.

- Solo ignóralas- le pidió Sakurai, tomándolo de la mano. Y él lo intentó, pero pronto se vieron rodeados por una multitud de paparazzi

- ¿Cómo nos encontraron?- preguntó Jun mientras intentaba esconderse de los flashes. Sho no respondió, se puso de pie y caminó hacia la puerta trasera seguido por el menor. No bien se hubieron alejado del lugar, el castaño redujo la velocidad hasta detenerse a la orilla del camino.

- ¡Eh, quita esa cara Matsumoto!- dijo al notar la expresión molesta de Jun.

- No, se suponía que esto no debía pasar- se quejó el aludido, cruzándose de brazos- Tú y yo deberíamos estar cenando tranquilamente mientras conversamos, eso sucedería en una cita normal…

- Exacto, en una cita normal- coincidió Sho- y esto es normal para nosotros. Es normal que los paparazzi quieran sepan dónde estamos, que hacemos y con quien. También es normal que las fans nos reconozcan y nos pidan autógrafos. No es normal que pasemos más de cinco minutos en un lugar sin que nos noten.

- Pero aun así…- Jun no pudo terminar su protesta, lo acallaron los labios de Sho.

- Podemos hacer algo menos ostentoso, si eso te hace feliz- dijo acariciando su mejilla.

- ¿Qué tienes en mente?

- Una película y ramen instantáneo en tu casa- repuso sonriendo el mayor. Jun suspiró.

- No sé por qué tengo la sensación de que no veremos la película- dijo sonriendo levemente. Sho sonrió y arrancó el auto.

- Realmente cuento con eso.

--------------------------------------AiMiya---------------------------------------------------

- Neee Nino-chan, ¿qué harás para san Valentín?- preguntó Aiba, intentando disimular su curiosidad. El aludido apenas levantó la mirada de su revista antes de contestar.

- Nada- respondió secamente. Aiba lo miró desconcertado.

- ¿De verdad no tienes ningún plan?

- Ninguno

- ¿Por qué?- preguntó Aiba. Nino suspiró.

- No estoy dispuesto a gastar dinero para mantener una relación

- ¡Que frío eres!- se quejó Aiba. El más bajo suspiró de nuevo.

- ¿Por qué lo dices?

- No tienes que gastar dinero para que alguien te quiera- dijo Aiba- Basta con estar junto a esa persona especial y algo cotidiano se volverá algo extraordinario.

- ¿Algo ordinario?- repitió el pelinegro dejando a un lado su revista- ¿Cómo caminar por las calles viendo ropa y burlándose de ella?

- Sí, eso podría ser- dijo el mayor riendo. Nino se inclinó hacia delante, súbitamente interesado.

- ¿Y qué me dices de caminar hasta la playa para nadar en la noche?- preguntó. Aiba lo pensó un momento.

- Sí, eso también. Sería interesante.

Nino se puso de pie y le tendió la mano al mayor.

- Entonces vamos- dijo. Aiba miró su mano, sorprendido.

- ¿Qué?

- Te estoy invitando a hacer algo cotidiano, un día cualquiera con la esperanza de que se vuelva algo extraordinario- dijo Nino sonriendo. El más alto le devolvió la sonrisa y tomó su mano.

- Pero hoy no es catorce…

- No creo que eso importe.

- Lo tenías planeado, ¿verdad?- dedujo Aiba sonriendo. El menor lo miró, sonriendo travieso.

- Por supuesto que si- dijo antes de robarle un beso.

-----------------------------------Yama pair------------------------------------------------------

+Sho intentaba no gritar, pero Nino estaba demasiado cerca de Ohno. El mocoso todavía tuvo el descaro de pasarle un brazo por el hombro al mayor mientras miraba con ojos burlones a Sho. Él respiró profundo y se mordió la lengua.

-Eh, Sho-chan- le llamó la atención Aiba. Sho volteó a ver a su compañero y este lo tomó de la mano- Ven, necesito que me ayudes con algo.

Sho siguió al menor hasta la puerta, ante la mirada furiosa de Ohno.

-¿A dónde van Aiba-chan?- preguntó, intentando esconder la molestia que se escuchaba en su voz. Aiba se volvió sin soltar la mano de Sho.

-Es un secreto- dijo sonriendo. En ese momento la puerta se abrió y Jun entró a la habitación.

-Ah, Riida- dijo aparentemente aliviado- que bueno que te encuentro, el director esta como loco gritando que te necesitan en el set. Vamos rápido.

Acto seguido Jun tomó la muñeca de Ohno y lo jaló hacía el pasillo.

-Espera- dijo Sho cuando pasaron a su lado. Jun lo miró molesto.

-No, tenemos que ir con el director de inmediato

-¿A dónde?- Jun puso los ojos en blanco.

-Al set, por supuesto- dijo como si fuera evidente.

-Yo también voy para allá,- dijo de improvisto Sho, intentando no mirar a Ohno a los ojos- puedo acompañar a Ohno-san. Así ustedes pueden descansar… ya ven, tienen que quedarse hasta tarde y eso…

-Pero Sho-chan yo tenía que enseñarte algo…- dijo Aiba con un puchero.

-Lo siento Aiba-chan, esto es más importante- dijo Ohno serio, mirando exclusivamente a Sho. Ambos salieron al pasillo, cerrando la puerta a sus espaldas. Apenas escucharon que la puerta cerraba, Ohno estrelló a Sho contra la pared y lo besó. El besó fue tan apasionado y profundo, que Sho no pudo evitar soltar un gemido.

-¿Tienes alguna intención de ir al set ahora mismo?- le preguntó Ohno con la voz entrecortada. Sho negó con la cabeza, su respiración acelerada. Rápidamente Ohno lo tomó de la mano y lo condujo hasta la puerta más alejada de la sala de ensayos. Una vez ahí echó el cerrojo de la puerta y volvió a besar a Sho.

En cuanto los escucharon alejarse el trio kaze salió de la sala de ensayos y miró a su alrededor, buscando alguna señal de ellos.

-Por fin- suspiró Aiba- pensé que jamás lo harían.

-Son unos idiotas- dijo Nino cruzándose de brazos- llevamos semanas provocándolos y hasta ahora dio resultado.

-Lo único que me preocupa- dijo Jun- es la reacción del director cuando Ohno no se presente a grabar su escena. Creo que todos tendremos problemas por eso.

Sus compañeros suspiraron resignados.

--------------------------------------MasaToshi---------------------------------------------------

-Aiba-chan, ¿qué estas haciendo?- preguntó Ohno divertido al ver la mitad del cuerpo de Aiba desaparecer bajo la cama.

-Intento encontrar mi ropa- respondió el menor. Ohno rió levemente.

-¿Por qué? Te ves lindo así- dijo dándole una nalgada a Masaki.

-Pero tengo que ir a casa- dijo al mayor sentándose en la cama- sino todos comenzarán a sospechar.

Ohno suspiró y se recostó en la cama, mirando al techo.

-Bueno, pues tu camiseta está sobre la televisión de la sala,- dijo- creo que vi tus pantalones en la cocina y el ultimo lugar donde tuviste puestos los boxers fue en el baño, así que creo que siguen ahí.

-¿De verdad?- preguntó Aiba, tumbándose en su estomago y mirando a Ohno- No recuerdo mucho de lo que pasó después de que me besaste.

-Puedo recordártelo si quieres- respondió Ohno acercándose a su rostro. Aiba cerró los ojos y dejó que sus labios se encontraran con los del mayor.

-Tal vez te tome la palabra- dijo arrastrándose para quedar sobre el cuerpo de Ohno. La mano del mayor recorrió el pecho de Aiba y siguió bajando hasta encontrarse con su entrepierna, haciendo gemir al menor.

-Mmm, creo que tienes un problema aquí abajo- dijo Ohno sonriendo. Aiba lo besó profundamente.

-Y creo que se me quitaron las ganas de ir a casa- dijo entre beso y beso. Ohno sonrió.

-Pues ahora, yo no tengo ganas de ir a trabajar- dijo dándole la vuelta a la situación y colocándose sobre Aiba.

-¿Crees que sea muy sospechoso si faltamos los dos?- preguntó Aiba mientras la boca de Ohno bajaba por su cuello.

-Pero si todo el mundo ya lo sabe- dijo el mayor mientras su mano comenzaba a frotar la entrepierna de Aiba- ¿O crees que los comentarios de Nino son puro sarcasmo.

Aiba no pudo contestar ya, estaba muy ocupado gimiendo ante las caricias de su amante.

5x10, juntoshi, sakumiya, drabbles, arashi, ohmiya, sakumoto, matsumiya, yama pair, masatoshi, aimiya, sakuraiba, masamoto

Previous post Next post
Up