(no subject)
Reto: 23.
Autor: Fatita.
Personajes: Principalmente Pansy, aunque aparecen otros... *^*
Rating: Pues para gente que le guste la angustia... me parece que dentro de todo está bastante Disney.
Palabras: 408... no recuerdo si piden eso..., pero bueh...
Notas: Creo que todos estamos escribiendo del mismo reto, voy a ver si se me ocurre algo sobre los otros... es que están difíciles... ^^u
La mazmorra estaba de fiesta…
Desde que el fulano San Potter había salido en busca del Señor Tenebroso, llegaban cada vez más rumores de su muerte, y de la victoria del mal. Y tales rumores no podrían significar más que alegría para media casa Slytherin, que odiaba a muerte al niño que vivió.
- Ahora ese enano no nos hará quedar mal, ¡Jamás! - gritó Draco Malfoy agitando una botella de Jerez al aire.
Risas y gritos apoyaron al rubio. Si algo era cierto es que ya no todo sería como antes.
Pero no todos estaban tan felices de lo que posiblemente pudo haber sucedido con el joven Gryffindor. Una pelinegra había salido elegantemente por la pared mágica de la Sala Común, con una botella de ron de grosella escondida dentro de la túnica.
Inconscientemente, no podía disfrutar de la alegría colectiva de su casa, y, también sin darse cuenta, se encontró abandonando las mazmorras, yendo a un sitio indefinido.
Su placa de Prefecto brillaba en la negrura de su ropa, y le daba la autoridad necesaria para vagar esa noche por el castillo. Lentamente llegó al vestíbulo que, blanco como siempre, la abrigó en las sombras de una esquina cuando se sentó debajo del cuadro de unos monjes que dormitaban haciendo murmullos indescifrables.
Pansy tomó directamente de la botella, maldiciéndose por haber olvidado la copa en la mesa del centro, donde estaba con las otras chicas. Y sintió el licor carcomiéndole la garganta. A decir verdad, era una bebida bastante fuerte, más de lo que recordaba, pero no le importó.
Siguió tomando, y sosollando suavemente sin saber por qué. Fuera llovía, llovía mucho, y se oía a las cinturas del bosque corriendo buscando refugio. Pansy tomó más, y más, hasta que le quedaba el fondo naranja. Su cabellera negra bailó cuando sus piernas fueron incapaces de hacer parar a la delgada figura de la ebria Slytherin, haciéndola caer de rodillas sobre el mármol albino y los vidrios rotos de la botella. Sus sollozos se transformaron en llanto incontrolable al sentir el dolor en sus extremidades, y en su corazón.
Los monjes despertaron, y vieron extrañados a la niña arrodillada y sangrante, sobre el licor mezclado con su linaje en líquido.
Tal vez nunca sabría que la incitó a beber… pero sabía que la bebida fue la que la incitó a hacer lo último que haría en su vida… un vidrió de la botella fue incrustado en ella a propósito, y las lágrimas de dolor se transformaron en placer… en él último placer que Pansy sentiría siempre…
Autor: Fatita.
Personajes: Principalmente Pansy, aunque aparecen otros... *^*
Rating: Pues para gente que le guste la angustia... me parece que dentro de todo está bastante Disney.
Palabras: 408... no recuerdo si piden eso..., pero bueh...
Notas: Creo que todos estamos escribiendo del mismo reto, voy a ver si se me ocurre algo sobre los otros... es que están difíciles... ^^u
La mazmorra estaba de fiesta…
Desde que el fulano San Potter había salido en busca del Señor Tenebroso, llegaban cada vez más rumores de su muerte, y de la victoria del mal. Y tales rumores no podrían significar más que alegría para media casa Slytherin, que odiaba a muerte al niño que vivió.
- Ahora ese enano no nos hará quedar mal, ¡Jamás! - gritó Draco Malfoy agitando una botella de Jerez al aire.
Risas y gritos apoyaron al rubio. Si algo era cierto es que ya no todo sería como antes.
Pero no todos estaban tan felices de lo que posiblemente pudo haber sucedido con el joven Gryffindor. Una pelinegra había salido elegantemente por la pared mágica de la Sala Común, con una botella de ron de grosella escondida dentro de la túnica.
Inconscientemente, no podía disfrutar de la alegría colectiva de su casa, y, también sin darse cuenta, se encontró abandonando las mazmorras, yendo a un sitio indefinido.
Su placa de Prefecto brillaba en la negrura de su ropa, y le daba la autoridad necesaria para vagar esa noche por el castillo. Lentamente llegó al vestíbulo que, blanco como siempre, la abrigó en las sombras de una esquina cuando se sentó debajo del cuadro de unos monjes que dormitaban haciendo murmullos indescifrables.
Pansy tomó directamente de la botella, maldiciéndose por haber olvidado la copa en la mesa del centro, donde estaba con las otras chicas. Y sintió el licor carcomiéndole la garganta. A decir verdad, era una bebida bastante fuerte, más de lo que recordaba, pero no le importó.
Siguió tomando, y sosollando suavemente sin saber por qué. Fuera llovía, llovía mucho, y se oía a las cinturas del bosque corriendo buscando refugio. Pansy tomó más, y más, hasta que le quedaba el fondo naranja. Su cabellera negra bailó cuando sus piernas fueron incapaces de hacer parar a la delgada figura de la ebria Slytherin, haciéndola caer de rodillas sobre el mármol albino y los vidrios rotos de la botella. Sus sollozos se transformaron en llanto incontrolable al sentir el dolor en sus extremidades, y en su corazón.
Los monjes despertaron, y vieron extrañados a la niña arrodillada y sangrante, sobre el licor mezclado con su linaje en líquido.
Tal vez nunca sabría que la incitó a beber… pero sabía que la bebida fue la que la incitó a hacer lo último que haría en su vida… un vidrió de la botella fue incrustado en ella a propósito, y las lágrimas de dolor se transformaron en placer… en él último placer que Pansy sentiría siempre…