-¿Qué esperaba usted de la vida?
-Que empezara.

Me manda una alumna del taller de narrativa de hace dos años un mensaje de voz por la noche para decirme que soy grande. Puede que el alcohol y la desmemoria pongan de su parte, pero sigue siendo algo muy bonito.

-Que la muerte te encuentre trabajando.
-Será la inspiración.
-Sí, hombre, ni que fueras tan importante.

Poco a poco nos vamos convirtiendo en fantasmas, con cada vez más pasado que futuro. Cómo no echar la vista atrás, si el camino que lleva hacia delante no deja de estrecharse.

Llegar a la línea de salida cuando ya hace mucho que los demás cruzaron la meta.

Lo bueno de la radio en directo es que emiten tus palabras sin que importe que tengan algún valor o no. Esto también es lo malo de la radio en directo.

Pienso en los años noventa y me parece que en realidad fue una época de bastante ingenuidad, pero no sé si realmente fue así o era por mi percepción de adolescente. Habría que preguntar a otros, supongo. Por ejemplo, qué impresión tuvieron los que fueron adolescentes en la Alemania nazi.

-¿Qué llevas puesto?
-¿Por qué lo preguntas?
-Es para un estudio de mercado.

-Tienes unas piernas preciosas.
-Gracias. Son también muy prácticas: me llevan a todas partes.

-Dígame ( Read more... )