Blanco. Un mar insondable de nada blanca, de todos los colores y ninguno a la vez.
Nada. No sentía nada. Pero podía recordar los gritos, la angustia y, por encima de todo, la sensación de ahogo que provoca el saber que ya no queda nada por hacer y la muerte llega...
El chico abrió los ojos muy lentamente, casi como con miedo. Se desperezó entre las
(
Read more... )
Comments 2
A mi me parece un texto asombroso y sensacional. Transmiten muchisimo hasta el punto de extremecer ^^
Reply
Reply
Leave a comment