Cuestion de derecho

May 25, 2014 02:29

Recientemente (y por razones que quizás especifique en otra entrada porque me da flojera en esta) estoy medio obsesionada/enamorada de cierto autor de comics/novelas gráficas/libros llamado Neil Gaiman.

El susodicho Neil resulta que tiene un blog desde hace muchos años, y ayer (gracias a otra cierta autora de comics que también admiro) leí una de sus entradas, una del 2009, y que tiene un tema que a mi me parece bastante interesante. Trata de "Entitlement issues", o de como las personas (consumidores del trabajo de artistas, escritores, y afines, más que todo) a veces se toman atribuciones que en realidad no les corresponden. Cuestión de derechos, y a veces, de la falta de ellos.

Los autores de fanfiction (y los creadores de fan arts y otras clases de fanworks) a veces tenemos que lidiar con ciertos aspectos del Entitlemen de nuestros lectores o fans, así que quizás alguien por allí afuera se sienta identificado (o al menos entretenido) con lo que viene a continuación.

La entrada está originalmente en inglés (la pueden leer aquí), y aunque el blog de Neil tiene varias traducciones oficiales, las mismas son de entradas mucho más viejas, así que yo decidí hacer la propia. Aquí va:

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Hola Neil,

Me he suscrito recientemente al blog de George RR Martin (http://grrm.livejournal.com/) con la esperanza de obtener información de cuando será publicado el próximo libro de "Canción de Hielo y Fuego". Amo la serie [de libros], pero desde que me suscribí al blog me he ido frustrando cada vez más con la falta de información por parte de Martin en cuanto a la fecha de publicación de la nueva novela. De hecho, parece como si estuviera haciendo todo lo posible por evitar trabajar en la misma. Lo que plantea una serie de preguntas:

1. Con los blogs y el Twitter y otros medios de comunicación social ¿Crees que el público tiene demasiado protagonismo a la hora de someter a escrutinio las acciones de un artista? Si hubieras anunciado un nuevo libro hace dos años y todavía no lo hubieras entregado ¿Piensas que evitar el tema en tu blog le haría pensar a los lectores que estás siendo "flojo"? ¿Acaso bloggear acerca de tu trabajo y de tu vida te hace ser más responsable de cumplir con tus compromisos?
2. Al escribir una serie de libros, igual que Martin lo está haciendo con "Canción de Hielo y Fuego" ¿Qué responsabilidad tiene él de terminar la historia? ¿Es poco realista pensar que, al no escribir el próximo capítulo, Martin me está decepcionando? ¿Incluso a pesar de que la escritura del libro y el tiempo que tarde en llevarse a cabo depende completamente de él?

Estaría muy interesado en tu punto de vista.

Saludos,
Gareth
Mi opinión...

1) No.

2) Sí, es poco realista de tu parte el pensar que George está "decepcionándote".

Mira, puede que esto no sea agradable, Gareth, y sigo tratando de encontrar una mejor manera de decirlo, pero la simplicidad de las cosas, al menos desde mi punto de vista, es la siguiente:

George R. R. Martin no es tu perra.

Es útil saber cosas como esta, quizás sea útil para tomarlo en cuenta cuando te encuentres pensando que posiblemente George sea, en efecto, tu perra, y debería de estar allí afuera escribiendo lo que tú deseas leer ahora mismo.

Las personas no son máquinas. Los escritores y los artistas no son máquinas.

Te quejas de que George esté haciendo otras cosas en vez de estar escribiendo los libros que quieres leer, como si tu compra del primer libro de la serie fuera un contrato con él: que pagarías tus diez dólares, y George, por su parte, pasaría cada hora del día escribiendo el resto de los libros para ti, hasta que la serie estuviera terminada.

Nunca existió tal contrato. Pagaste tus diez dólares por el libro que leíste, y supongo que te gustó, dado a que quieres saber qué sucede después.

A mí me parece que el mayor problema con las series de libros es que, o bien los lectores se quejan de que los libros solían ser buenos pero en el esfuerzo de sacar un libro todos los años la calidad ha decaído, o se quejan de que los libros, aún manteniendo la calidad, no salen a tiempo.

Ambas cosas hacen que me alegre de no estar escribiendo actualmente una serie, y me alegra aun mas el hecho de que en la década en la que yo escribí cosas para una serie, en Sandman, yo era joven, tenía impulso, era casi un adicto al trabajo, y fui muy afortunado. (Y aún así, cerca del final, me tardaba cinco semanas en escribir un cómic mensual, con todos los problemas de plazos que eso representa).

Por mi, preferiría leer un buen libro, que provenga de un autor satisfecho. Y en realidad no me importa qué [tiempo] se necesite para lograrlo.

Algunos escritores necesitan un tiempo para cargar sus baterías, y luego escriben sus libros muy rápidamente. Algunos escritores escriben una página más o menos todos los días, llueva o truene. A algunos escritores se les acaba el combustible, y tienen que hacer lo que sea que necesiten hacer para volver a sentirse preparados para escribir. A veces los escritores no tienen el próximo libro de una serie absolutamente planeado dentro de sus cabezas, pero, en vez de eso, tienen otro completamente listo en su lugar, por lo cual escriben lo que está listo, provocando gritos de indignación por parte de la gente que quiere saber por qué razón el autor habría escrito el libro X, mientras que los fans estaban esperando el libro Y.

Recuerdo haber escuchado a un enojado editor de cómics contándole a una sala llena de otros editores acerca de un artista de cómics que se había tomado un par de semanas de descanso para pintar su casa. El editor señaló, en repetidas ocasiones, que por el dinero que se le habría pagado al artista por su trabajo durante esas semanas, fácilmente se podría haber permitido contratar a alguien para pintar su casa, y que también hubiera ganado algo de dinero. Y pensé, pero no lo dije, "¿Y qué tal si él quería pintar su casa?"

Recientemente, me cargué un plazo. Me lo cargué terminantemente. Por primera vez en 25 años, suspiré y dije: "No puedo hacer esto, y no tendrás tu historia." Ya estaba atrasado, me encontraba bajo un montón de presión debido a las fechas límite, mi padre murió, y de repente la historia también murió en esa página. Me gustaba la idea, pero no estaba funcionando, y con el tiempo, en vez de volver locos a directores y editores por esperar una historia que no iba a llegar, me di por vencido con ella y me disculpé, preocupado de ya no ser capaz de escribir ficción.

Volví mi atención a la siguiente fecha límite en la lista: un guión. Fluyó fácil y deliciosamente, me divertí más escribiendo de lo que lo había hecho en mucho tiempo, todos los personajes hicieron exactamente lo que yo esperaba que hicieran, y la historia resulto ser mejor de lo que yo me hubiera atrevido a esperar.

A veces sucede así. Uno no elige lo que va a funcionar. Simplemente haces lo mejor que puedes cada vez. E intentas hacer todo lo posible para aumentar la probabilidad de que se cree buen arte

Y a veces, y esto es tan cierto con los autores como lo es con los lectores, tienes una vida. Las personas dentro de tu mundo se enferman o mueren. Te enamoras, o desenamoras. Te mudas. Tu tía llega para quedarse. Accediste a dar una charla del otro lado del mundo hace cinco años, y de repente te das cuenta de que dicha charla debe ser impartida ahora. Tu último libro salió y los críticos gritaron a voz en cuello que lo odiaban, y ahora simplemente no tienes ganas de escribir otro. Tu gato aprendió a levitar y el asunto debe ser debidamente documentado e investigado. Hay ciervos en el huerto de manzanas. Una tormenta eléctrica quemó tu disco duro y también tu unidad de respaldo...

Y la vida es algo bueno para un escritor. Es de donde obtenemos nuestra materia prima, para empezar. Nos gusta mucho detenernos y observarla.

Las economías de escala para un escritor significan que muy pocos de nosotros podemos darnos el lujo de escribir libros de 5000 páginas, y luego separarlos y publicarlos anualmente una vez que están listos. Así que los escritores con historias enormes, o las que, como ocurrió con Sandman, crecen en la narración, van a escribirlas y a publicarlas sobre la marcha.

Y si estás esperando por el nuevo libro de una serie larga y en curso, ya sea de George o de Pat Rothfuss o de otra persona...

Espera. Lee de nuevo el libro original. Lee otra cosa. Sigue con tu vida. Ruega por que el autor esté escribiendo el libro que quieres leer, y no muriéndose, o algo igual de dramático. Y si pinta la casa, eso está bien.

Y Gareth, en el futuro, cuando veas a otras personas quejándose de que George RR Martin ha sido cachado haciendo algo distinto a escribir el libro que ellos están esperando, explícales, más educadamente de lo que yo lo hice, la simple e irrefutable verdad: Que George RR Martin no trabaja para ustedes.

Espero que eso ayude.
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Fuente (source): http://journal.neilgaiman.com/

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