Autor:
anna_tsukiko Tabla:
Básica 1Fandom: Bleach
Claim: Kurosaki Ichigo/Kuchiki Rukia
Tema: # 6 - Plenitud
Advertencias: Ninguna
Extensión: 1537 palabras
Desde el techo de esa casa, el cielo nocturno se veía hermoso. Después de otra noche en vela a causa de los hollows, lo mejor que podían hacer esos dos, era admirar el paisaje celeste.
- Bonita noche, ¿no? Ichigo.
- Mm, no tiene nada en especial a otras noches.
- Tsk, ¡Qué aguafiestas!
Pero aunque él demostrara lo contrario, esa noche en verdad era agradable. El cielo era iluminado por la luna, acompañado de grandes estrellas que iluminaban esa, ahora, pacifica noche. Se podía sentir una brisa ligera. Solo el ruido de pequeños grillos y uno que otro automóvil que pasaba a lo lejos eran los sonidos que se escuchaban alrededor.
Ambos chicos se encontraban sentados observando el cielo, sin emitir ni una sola palabra, cosa particularmente extraña, considerando el hecho de que pareciera que no pueden vivir un solo segundo sin pelear. Pero este hecho insólito parecía que por fin iba a terminar.
- Entremos a la casa, Rukia.
- No, quiero quedarme un rato más.
- ¿Qué dices? ¿Y para que quieres quedarte en el techo de mi casa a observar el cielo? Además, ¿recuerdas? Salimos tan rápido a atender lo del hollow que ni siquiera vimos en que parte de la habitación quedaron nuestros cuerpos.
- Con mi gigai no hay problema, sabes que Chappy inmediatamente se va a la recamara de tus hermanas.
- Si, pero ¿y mi cuerpo? ¿Qué tal si alguien entra y…?
- Es muy tarde como para que alguien se meta a tú recamara, y muy temprano para que tu padre vaya a darte los buenos días- esto ultimo dicho entre risas- Pero si tú quieres entrar: adelante. Nadie te obliga a permanecer. Yo me quedo aquí.
- Agh- expresó con desagrado y se sentó nuevamente a su lado- yo solo lo decía por que ya es muy tarde, además, comienza a hacer frío.
- Ah, el niño tiene frío y sueño, ¿desde cuando Kurosaki-kun es tan delicado?
- Jum, no lo decía por mí.
- Oh, entonces lo decías por mí. Ah, ¡Qué considerado eres Kurosaki-kun!
- No, claro que no. Si vamos a estar aquí, solo cállate y dedícate a lo que estas.
- Uh, vaya amargado.
Nuevamente el silencio se hizo presente mientras ambos, solo se dedicaban a observar el paisaje nocturno, como anteriormente hacían. Rukia cansada un poco del actual mutismo entre ambos, comenzo a hablar:
- Mira Ichigo, se que pensaras que son cosas de niñas, pero la verdad, noches como estas son dignas de apreciarse.
- ...
- No es muy común contemplar un cielo tan iluminado, con una brisa ligera acompañándote. Veras, son esos pocos instantes de paz que podemos disfrutar, considerando todo lo que actualmente afrontamos... - tras esto ella emitió un ligero suspiro-... y afrontaremos.
-...
- Se que tal vez tú no estas disfrutando de esta noche, pero yo…
Y sin que pudiera llegar a imaginarlo, claramente sintió como la cabeza de Ichigo se acomodaba inesperadamente en su hombro, acción que la puso un poco nerviosa, tomando en cuenta el anterior discurso que le daba a su amigo, palabras que muy en su interior las considero un poco “sentimentales” y más si estaban dedicadas al cabeza hueca que tenia a lado, cosa que le hizo pensar ¿Acaso el chico también se estaba poniéndo sentimental? O más bien, ¿Le daba a entender que él también disfrutaba de esa noche?
- I… Ichi…-pero su nombre no fue terminado de pronunciar, ya que el antes mencionado soltó un sonoro ronquido que explicaba a la pelinegra la causa de su previo acto.
- Te… ¡Te quedaste dormido!… tsk... semejante idiota.
Ese “semejante idiota” no sabia bien por quien lo estaba diciendo, si a él por quedarse dormido a mitad de la noche, en el techo de su casa; o a ella, al considerar por un momento que el chico estaba disfrutando ese instante a su lado.
Rukia soltó otro leve suspiro mientras se movía un poco hacia atrás, ante este movimiento, el pelinaranja cayó sobre el regazo de la shinigami, cosa que ella lo tomo con una extraña naturalidad mientras volvía su vista nuevamente hacia el firmamento.
- Mira que quedarte dormido mientras yo me sincero contigo, ¡Qué diablos te pasa! Pero anda, tú te lo pierdes, ni creas que la gran Kuchiki volverá a dar estas sabias palabras a un idiota como…
Nuevamente, otra acción del chico la volvió a interrumpir. Esta vez, el joven se había rodado sobre las piernas de su amiga y como si fuese la cosa más natural del mundo, la abrazó por la cintura, como un infante quien toma entre sus brazos a su oso de peluche. Rukia estaba sin habla ¿Qué clase de atrevimiento era ese? ¿Quién se creía para abrazarla así sin más?
Estuvo a punto de lanzarle un golpe y mandarlo volar muy lejos de ahí, pero nuevamente se detuvo un instante a verlo. Era raro, muy raro ver esa expresión en su rostro. Su inmutable ceño fruncido permanecía en su semblante, pero este se encontraba un poco más relajado, era una expresión de tranquilidad, de paz, de goce ¿En verdad estaba gozando ese instante? Bien, aunque la shinigami imaginó que estos hechos estaban basados más en reflejos que a movimientos concientes, quizó pensar, muy dentro de ella, que eran porque en realidad a él le gustaba encontrarse en esa forma, después de todo: Dicen que el cuerpo reacciona inconcientemente a lo que queremos en realidad ¿no? Entonces él tal vez, aunque fuese muy en el fondo, estaba disfrutando ese instante, tal y como ella lo estaba haciendo y sintiendo. Percibio dentro de ella tantas cosas en ese instante, que no sabia que hacer pero, opto por seguir con aquella especie de sermón dirigido su compañero de batallas.
- Ah, ya se que eres un maldito impulsivo que se lanza a la pelea sin pensarlo la gran mayoria de veces, un tonto cabeza dura que contadas ocasiones hace caso a lo que digo, y que ahora te enfrentas a seres que en tu vida imaginaste encarar... - volvió a emitir un suspiro mientras dirigió su mirada hacia el chico en sus piernas-...pero aun así... - proseguía mientras ahora dirigía su mano al rostro del pelinaranja- ...sigues teniendo esta estupida tierna apariencia de niño, cuando de tierno no tienes…
Y tal parecía que esa noche seguían esas acciones inesperadas, ya que ahora, el shinigami sustituto afianzaba con más fuerza la cintura de su compañera entre sus brazos, dejando en su rostro una ligera muestra de plenitud, más bien una especie de ¿sonrisa? Si, eso sin duda alguna era una sonrisa ¿Era seguro que ese idiota en verdad estaba dormido? o ¿Solo fingía y en realidad se estaba burlando del actual estado de la chica en el que ella se portaba tan amable con él? Con otro grácil ronquido, confirmó que estaba entre brazos de Morfeo, y si no era así, en verdad, era un buen actor, aunque claro, tenia una buena maestra a su lado de la cual pudo aprender.
- Idiota. ¿Quien diría que nuevamente estaríamos en esta posición?- exclamó mientras le miraba dulcemente- Claro, con ligeros cambios: Tú no estas herido, creo que Kon no esta por los alrededores y… -ahora, el cabello del pelinaranja era quien recibía caricias de las manos de esa chica- …parece que la lluvia esta muy lejos de presentarse otra vez.
Antes estas ultimas palabras, volvió a dirigir su mirada al cielo, quien parecía ser el único testigo y a la vez, el causante de todo lo ahora acontecido. Ella no se había equivocado, esa noche, la estaba disfrutando, y parecía que el tonto en su regazo no difería con ella.
-… kia- asemejaba decir entre esa especie de suspiro combinado con un sutil gruñido mientras volvía a acomodarse en su actual lugar de descanso, claro, sin dejar de rodear con sus brazos a la shinigami.
- ¿Qu-qué dijiste?- fue lo primero que logró balbucear la chica ante ese murmullo expresado por Ichigo- “¿Es-esta soñando conmigo?”- M-más te vale que si estas soñando conmigo sea algo bonito, tremendo idiota- con nerviosismo, fue lo primero que se le ocurrió decir, aunque claramente sabia que no tenia mucho sentido, ya que el joven se encontraba profundamente dormido.
Era confirmado, ese hombre también se encontraba, conciente o inconcientemente, feliz de estar junto a ella.
A Rukia le hubiese gustado estar un poco más como se encontraban en ese instante, pero tal y como Ichigo le había dicho con anterioridad, esa brisa parecía no tener consideración y comenzó a sentirse con mayor intensidad que hace unos momentos. Lo mejor era entrar a la casa.
-“Y ahora, ¿como te voy a meter a tu habitación?”
Cargarlo hasta haya no era un gran problema, un poco complicado considerando que el chico era más grande y pesado que ella, pero no imposible de realizar. Aunque, la posibilidad de despertarlo se volvió tentadora para la pelinegra. No es que quisiera ser una maldita quitándole ese momento de tranquilidad al pelinaranja, pero, ver la cara que pondría cuando se diera cuenta de la posición en que se encontraba, era simplemente…
-“Imposible de dejar pasar”
Y una mueca traviesa sobre el rostro de Rukia se hizo presente.
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Nota:
Cuando Rukia dice: ¿Quien diría que nuevamente estaríamos en esta posición? es referente al capitulo 24 del manga, en la escena en la que Ichigo cae sobre Rukia después de la pelea contra Grand Fisher, dando a entender que la postura de ambos en el one-shot, es decir, Ichigo recostado en las piernas de Rukia, es parecida a la de escena del manga, excepto por todas las cosas que Rukia explica despues, lo de "Tú no estas herido, creo que Kon no esta por los alrededores y… parece que la lluvia esta muy lejos de presentarse otra vez"