Fic
Fandom: Katekyo Hitman Reborn!
Pairing: Gokudera/Lambo, 59L, TYL!Lambo/Gokudera, TYL!L59
Título: Recorrido en el tiempo (1/??)
Advertencias: Insinuación de yaoi. Yaoi. Spoilers del Arc de los Varia.
Notas: Este método me gusta más que el otro xD.
―P-Porfavor te lo encargo, Gokudera-kun―suplicó Tsuna, intentando calmar el aura homicida que invadía a su guardián.
Funcionó… un poco, al menos Gokudera había guardado las dinamitas y ya no parecía a punto de cometer un asesinato.
―Solo porque Décimo me lo pide.
Tsuna suspiró aliviado y, mientras veía como Lambo se subía al hombro de Gokudera y le decía, ordenaba, exigía, que caminara rápido hacia el cuarto de ambos, suplicó a alguno de los entes divinos allá arriba que por favor, por favor, no se terminaran matando.
Si solo Lambo no se hubiera puesto caprichoso con eso de que el cuarto que le habían asignado a Gokudera le gustaba más que el suyo propio y por ende tenía que ser suyo y, ante la negativa del italiano, había obligado al de cabello gris a que lo dejara invadir su habitación, nada de esto estaría pasando.
Al menos solo serían unos días, la misión acabaría y él volvería a su casa, a gozar de un poco de más tranquilidad.
Un poco.
Por eso, al día siguiente, mientras caminaba hacia la habitación de ambos para comprobar que siguieran vivos, no pudo dejar de jugar con sus dedos mientras miles de terribles escenarios pasaban por su mente, casi todos incluyendo una habitación destrozada y una factura muy costosa por reparaciones dirigida a él.
―G-Gokudera-kun… L-Lambo… ¿e-están bi….?
Ok, eso sin duda no se lo había esperado y, sinceramente, no sabía si eso era mejor o peor de lo que se había estado imaginando.
Porque el ver a Lambo dormido, acurrucado en el pecho de un también dormido Gokudera, el cual rodeaba con su brazo al más pequeño, era tan raro que, igual que si hubiera encontrado una habitación calcinada, lo hizo temblar de pies a cabeza.
….
Tsuna a veces se preguntaba porque, al llegar de la escuela y preguntarle cómo le había ido, Lambo, rápidamente, siempre volteaba en dirección de Gokudera y le contaba todo su día con pelos y señales. A Gokudera, no a Tsuna, a Gokudera.
Quizá era por presumirle, quizá era una forma de pelear con él, Tsuna no estaba seguro, solo podía sudar en frío cuando Gokudera, medio sonriendo de lado, le regalaba un caramelo al hiperactivo Guardián cuando este le contaba que había logrado patear a alguien sin salir muy herido en el proceso.
Menuda buena influencia que estaba teniendo.
…..
Tsuna ya solo suspiraba resignado mientras Gokudera veía todo con un tic en el ojo, murmurando un “vaca cabeza hueca” por lo bajo, en lo que la nube rosada se iba difuminando y un Lambo, traído por accidente… otra vez, aparecía en medio de la habitación, suplantando a su versión de seis años.
Luego el suspiro resignado se volvía una mueca confundida cuando veía el rostro avergonzado que mostraba el recién llegado, mientras veía de reojo a su Guardián de la Tormenta y pasaba su mano por su cabello nerviosamente.
Y la mueca confundida se volvía una evidente expresión de shock cuando Lambo, no soportando la mirada fija de Gokudera sobre él, volvía a dispararse con la bazooka, trayendo a su yo de veinte años en el futuro a ese tiempo quien, luego de parpadear, ligeramente confundido, mostraba una sonrisa demasiado divertida, antes de saludarlo a él con una inclinación de cabeza y, campante, agarraba al de cabello gris del brazo, sacándolo de la habitación a pesar de las protestas de Gokudera quien exigía con gritos que lo soltara.
La mueca de shock solo crecía cuando, luego de un par de minutos, veía a su Guardián entrar a la habitación otra vez… con el cabello desarreglado, las mejillas demasiado rojas y podría casi afirmar que hasta con la ropa mal acomodada.
En verdad que no quería saber nunca lo que pasaba en esos minutos y, si pudiera, borraría incluso de su mente las teorías que se formaban en su cabeza de lo que esos dos hacían.
Lamentablemente no podía. Lamentablemente.
Pairing: Gokudera/Lambo, 59L, TYL!Lambo/Gokudera, TYL!L59
Título: Recorrido en el tiempo (1/??)
Advertencias: Insinuación de yaoi. Yaoi. Spoilers del Arc de los Varia.
Notas: Este método me gusta más que el otro xD.
―P-Porfavor te lo encargo, Gokudera-kun―suplicó Tsuna, intentando calmar el aura homicida que invadía a su guardián.
Funcionó… un poco, al menos Gokudera había guardado las dinamitas y ya no parecía a punto de cometer un asesinato.
―Solo porque Décimo me lo pide.
Tsuna suspiró aliviado y, mientras veía como Lambo se subía al hombro de Gokudera y le decía, ordenaba, exigía, que caminara rápido hacia el cuarto de ambos, suplicó a alguno de los entes divinos allá arriba que por favor, por favor, no se terminaran matando.
Si solo Lambo no se hubiera puesto caprichoso con eso de que el cuarto que le habían asignado a Gokudera le gustaba más que el suyo propio y por ende tenía que ser suyo y, ante la negativa del italiano, había obligado al de cabello gris a que lo dejara invadir su habitación, nada de esto estaría pasando.
Al menos solo serían unos días, la misión acabaría y él volvería a su casa, a gozar de un poco de más tranquilidad.
Un poco.
Por eso, al día siguiente, mientras caminaba hacia la habitación de ambos para comprobar que siguieran vivos, no pudo dejar de jugar con sus dedos mientras miles de terribles escenarios pasaban por su mente, casi todos incluyendo una habitación destrozada y una factura muy costosa por reparaciones dirigida a él.
―G-Gokudera-kun… L-Lambo… ¿e-están bi….?
Ok, eso sin duda no se lo había esperado y, sinceramente, no sabía si eso era mejor o peor de lo que se había estado imaginando.
Porque el ver a Lambo dormido, acurrucado en el pecho de un también dormido Gokudera, el cual rodeaba con su brazo al más pequeño, era tan raro que, igual que si hubiera encontrado una habitación calcinada, lo hizo temblar de pies a cabeza.
….
Tsuna a veces se preguntaba porque, al llegar de la escuela y preguntarle cómo le había ido, Lambo, rápidamente, siempre volteaba en dirección de Gokudera y le contaba todo su día con pelos y señales. A Gokudera, no a Tsuna, a Gokudera.
Quizá era por presumirle, quizá era una forma de pelear con él, Tsuna no estaba seguro, solo podía sudar en frío cuando Gokudera, medio sonriendo de lado, le regalaba un caramelo al hiperactivo Guardián cuando este le contaba que había logrado patear a alguien sin salir muy herido en el proceso.
Menuda buena influencia que estaba teniendo.
…..
Tsuna ya solo suspiraba resignado mientras Gokudera veía todo con un tic en el ojo, murmurando un “vaca cabeza hueca” por lo bajo, en lo que la nube rosada se iba difuminando y un Lambo, traído por accidente… otra vez, aparecía en medio de la habitación, suplantando a su versión de seis años.
Luego el suspiro resignado se volvía una mueca confundida cuando veía el rostro avergonzado que mostraba el recién llegado, mientras veía de reojo a su Guardián de la Tormenta y pasaba su mano por su cabello nerviosamente.
Y la mueca confundida se volvía una evidente expresión de shock cuando Lambo, no soportando la mirada fija de Gokudera sobre él, volvía a dispararse con la bazooka, trayendo a su yo de veinte años en el futuro a ese tiempo quien, luego de parpadear, ligeramente confundido, mostraba una sonrisa demasiado divertida, antes de saludarlo a él con una inclinación de cabeza y, campante, agarraba al de cabello gris del brazo, sacándolo de la habitación a pesar de las protestas de Gokudera quien exigía con gritos que lo soltara.
La mueca de shock solo crecía cuando, luego de un par de minutos, veía a su Guardián entrar a la habitación otra vez… con el cabello desarreglado, las mejillas demasiado rojas y podría casi afirmar que hasta con la ropa mal acomodada.
En verdad que no quería saber nunca lo que pasaba en esos minutos y, si pudiera, borraría incluso de su mente las teorías que se formaban en su cabeza de lo que esos dos hacían.
Lamentablemente no podía. Lamentablemente.