Fandom: Finder Series.
Personajes: Yoh/Liu Fei Long.
Resumen: Yoh se había equivocado. Y Fei Long también.
XIV
Era un hecho que Fei Long dejaría lo que fuese que estuviese haciendo tarde o temprano, una vez perdiese la paciencia u obtuviese el resultado que buscaba.
Y qué era lo que había sucedido primero era algo que Yoh no sabía, pero al entrar esa noche a las habitaciones de Fei Long y verlo con un changshan y su mirada perdida, sólo pudo asumir que la Cabeza de Dragón de Baishe ya había llegado a una conclusión.
Sin dejar que eso lo afectase Yoh comenzó a dar su reporte del día, informándole de todos los pormenores, tal como se había vuelto costumbre, a pesar de la ausencia de una orden para que lo hiciese así esta ocasión y el silencio que casi parecía distraído de Fei Long; al menos hasta que éste lo interrumpió.
-Eres un mentiroso.
Esas frías palabras lo callaron de inmediato, no por temor sino por la confusión que le causaron.
No era imposible mas sí improbable que Fei Long lo estuviese confrontando hasta ahora sobre su previa conexión con Asami, por lo que le costaba creer que lo que le había omitido durante sus años de servicio fuese la razón de ese comentario, por mucho que Fei Long fuera el tipo de persona que no olvidaba ni perdonaba.
-¿Hubo un error en algún informe? -preguntó.
Fei Long lo observó fijamente por primera vez en esa noche, giró sus ojos y se levantó con lentitud, para luego caminar con paso firme hacia a él.
A diferencia de la forma en que había actuado en el hotel, Yoh no hizo ningún movimiento para alejar de él a Fei Long o para salir del lugar rápidamente y en lugar de ello permitió que el líder de Baishe lo arrinconara, consciente de que esta vez Fei Long estaba decidido a algo y no tanteando su reacción ni dejándose llevar por el licor.
-Dices -comenzó Fei Long, sonriéndole con desprecio- desearme. Y no haces nada para hacerme tuyo. ¿Esa declaración fue una idea de Asami? ¿Fue...?
-Nunca dije eso -pronunció Yoh, interrumpiendo la rápida sucesión de palabras.
Aunque no podía decir que ya había salido de la sorpresa inicial, Yoh había sido capaz de procesar suficiente de lo dicho por Fei Long como para entender que estaba escuchando lo que el líder de Baishe pensaba de él, sus acciones y sus palabras.
Ahora estaba claro que sí lo había estado probando, aunque no para confirmar su posible lealtad hacia Baishe como Yoh había sospechado, y que tal vez lo había dejado vivir e incluso continuar en su puesto, cosa impensable a la hora de tratar con un traidor, porque sus palabras le habían provocado a Fei Long al menos cierta curiosidad -que tan ciertas habían sido, porqué las había dicho-.
Y también era evidente que Fei Long se había equivocado en sus suposiciones, tal como Yoh mismo lo había hecho.
-Prefieres decir falsos romanticismos -afirmó Fei Long, como si estuviese aceptando lo que Yoh acababa de decir pero sin dejar la idea que parecía haberse formado-, como los que funcionan en una mujer.
-No -replicó Yoh nuevamente, sin apartar la mirada a pesar de que los ojos de Fei Long se habían entrecerrado en obvia molestia.
-¿No? -cuestionó Fei Long, alzando una ceja-. ¿Estás negando que estabas intentando engañarme de nuevo?
-Fui sincero -dijo Yoh con calma-. Nunca le he mentido sobre mis sentimientos.
El silencio que siguió a sus palabras fue extrañamente pesado y en el rostro de Fei Long se reflejó el desconcierto que éstas le causaron, mas esa emoción pronto fue remplazada por desconfianza y luego por una fría expresión pensativa
-Pruébalo -ordenó Fei Long y sin esperar a que Yoh dijese o hiciese algo, lo besó con desespero y usó sus brazos para impedirle escapar.
Aquella acción fue repentina, pero el deseo que se había negado a sentir -o a aceptar- antes hizo que Yoh le correspondiese sin pensar en lo que estaba haciendo.
Mas eso no impidió que también usase su mano izquierda para acariciar una de las mejillas de Fei Long, ni que intentase disminuir la violencia del beso.