Tabla básica - Dulces y golosinas
Título: Básicamente
Título del capítulo: Dulces y golosinas.
Prompt: #1 "Dulce"
Género: Romance
Categoría: G / K
Palabras: 266
Sumario: Tomado de la comunidad 15drabbles .
Advertencia: ...Shonen ai? Si no es así, no creo que haya.
Link a la tabla
Desde que era un niño, Misaki había tenido una increíble debilidad por los dulces. Chocolates, caramelos de todos los sabores, helados, paletas, dulces de leche, galletas, postres atiborrados con crema… y casi cualquier cosa que tuviese un alto grado de concentración de azúcar.
Además había sido afortunado: podía estar comiendo golosinas por un largo rato y nunca empalagarse ni cansarse de ellas. También era increíble cómo su cuerpo casi no reaccionaba a las colmadas cantidades de éstos que recibía: Misaki nunca había echado panza y como se cepillaba bien los dientes, las caries jamás habían sido un problema para él.
No obstante, con el tiempo fue dejando de consumir tanto azúcar. No que habían dejado de gustarle, sólo era que había perdido la costumbre. Quizás eso había sido por la muerte de sus padres, ya que el desafortunado evento había cambiado más de una cosa en su vida. O tal vez la causa había sido que al crecer empezaron a gustarle otro tipo de comidas y postres.
A pesar de ello, Misaki no extrañaba el efecto que los adictivos dulces alguna vez le habían producido, ya que ahora tenía una suerte de reemplazo que lo hacía sentir de la misma forma que las golosinas: este substituto también era suave y agradable como la miel, a veces un poco pegajoso al igual que las paletas, pero no dejaba de ser delicioso como la crema.
Sí, Misaki podía comparar a su amado Usagi-san con un dulce.
Después de todo, se dice que comer mucho chocolate produce la misma sensación que el que se tiene cuando uno está enamorado.
Título del capítulo: Dulces y golosinas.
Prompt: #1 "Dulce"
Género: Romance
Categoría: G / K
Palabras: 266
Sumario: Tomado de la comunidad 15drabbles .
Advertencia: ...Shonen ai? Si no es así, no creo que haya.
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Desde que era un niño, Misaki había tenido una increíble debilidad por los dulces. Chocolates, caramelos de todos los sabores, helados, paletas, dulces de leche, galletas, postres atiborrados con crema… y casi cualquier cosa que tuviese un alto grado de concentración de azúcar.
Además había sido afortunado: podía estar comiendo golosinas por un largo rato y nunca empalagarse ni cansarse de ellas. También era increíble cómo su cuerpo casi no reaccionaba a las colmadas cantidades de éstos que recibía: Misaki nunca había echado panza y como se cepillaba bien los dientes, las caries jamás habían sido un problema para él.
No obstante, con el tiempo fue dejando de consumir tanto azúcar. No que habían dejado de gustarle, sólo era que había perdido la costumbre. Quizás eso había sido por la muerte de sus padres, ya que el desafortunado evento había cambiado más de una cosa en su vida. O tal vez la causa había sido que al crecer empezaron a gustarle otro tipo de comidas y postres.
A pesar de ello, Misaki no extrañaba el efecto que los adictivos dulces alguna vez le habían producido, ya que ahora tenía una suerte de reemplazo que lo hacía sentir de la misma forma que las golosinas: este substituto también era suave y agradable como la miel, a veces un poco pegajoso al igual que las paletas, pero no dejaba de ser delicioso como la crema.
Sí, Misaki podía comparar a su amado Usagi-san con un dulce.
Después de todo, se dice que comer mucho chocolate produce la misma sensación que el que se tiene cuando uno está enamorado.