tabla: The Smashing Pumpkins... ♪
Título: Anywhere you are
Fandom: Card Captor Sakura
Tabla: The Smashing Pumpkins | Prompt: 7 - Where is your heart?
Claim: Sakura/Shaoran
Rating: R | Advertencias: Soy una maniática asesina y me envicie con la sangre (¿?)
Notas:Someone likes blood, someone is violent, someone murder characters.. ♪ (¿?)
Anywhere you are
Voces, las escucho, en los pasillos, acompañadas de lamentos y dolores.
El dolor y la agonía de un sin fin de personas que sufren por alguna noticia que les deja en un abismo, como me pasó a mi.
Siempre he odiado este lugar. Cuando era niña rogaba a mamá que jamás me trajera.
Poco después, cuando ella enfermó, tuve que asistir seguido. Y lo odié más.
Después de su muerte, no volví a un hospital en lo que fue hasta hace dos días. Cuando fuiste tu el que llegó aquí.
No quise saber en ese entonces y tampoco quiero saber ahora cómo fue que llegaste a este estado. No quiero que nadie me lo diga, dolerá más.
Quiero creer que tú despertarás y me lo dirás, me contarás que pasó. Afuera dicen que quizás te quede poco tiempo, yo no quiero creerlo.
Acaricio tus manos, bajo los vendajes en tu piel. ¿Qué pasó? Por favor Shaoran, abre los ojos y cuéntame.
¿Fue un golpe? ¿Un choque? ¿Caíste de un edificio? ¿Te asaltaron a mitad de la noche?
¡Quiero saber! Necesito que me digas por qué ya no escucho tu voz en mi oído. Por qué tu respiración es cada vez más lenta.
Mis labios recorren tus mejillas. Frías.
Y me asusto. Jamás has sido frío. Siempre fuiste tú mi fuente de calor.
¿Qué es esto Shaoran? ¿Por qué no puedes despertar?
Comienzo a creer que lo único que hay aquí ahora es tu cuerpo. Que tu alma está a mi lado, acariciando mis hombros con dulzura.
Una de tus manos limpia mis lágrimas, y me abrazas contra tu pecho mientras yo sollozo y acaricio tu frente, tu cabello.
De repente tu presencia no está más. Y hace frío. Controlo los signos vitales, van disminuyendo. Pero siguen allí.
La yema de mis dedos se desliza por tu rostro. Tus labios también están fríos, Shaoran.
¿Por qué estás tan frío? No te siento, tú no estás allí. Pero estás cerca.
¿Dónde estás? ¿Dónde está tu alma? ¿Dónde esta tu corazón?
¿Y dónde está el mío?
Mis sollozos se hacen cada vez más intensos. Lo siento tan cerca. Tu último respiro, estoy viendo como la vida se apaga de a poco en tu cuerpo.
Tú vas hacia la luz, yo me quedo en este presente. ¡Y no quiero quedarme!
No sin tus ojos, sin tu sonrisa, sin tus abrazos.
No voy a quedarme sin ti.
De nuevo siento que me abrazas, dulce y delicadamente. Y repartes besos de despedida sobre mi piel. Se siente un adiós doloroso.
¡No voy a despedirme! No voy a dejar que te vayas. Eres lo que me queda en este mundo, Shaoran. ¡No puedes despedirte!
Mi furia destruye el jarrón de cristal sobre la mesa. Nadie parece darse cuenta.
Miro de reojo los pedazos de cristal, esparcidos sobre el agua. Tu alma me mira y niega con la cabeza.
Es una mirada de advertencia. “Ni te atrevas Sakura” Pero yo no estoy haciéndote caso. Si tengo que correr detrás de ti de esa manera, de esa manera será.
Me abrazas más fuerte. Desde mi posición puedo observar lo que queda de ti en este plano. Y entonces un escalofrío me recorre el cuerpo.
Estás más pálido. Tu tacto ya casi no lo siento.
Te grito que no te vayas, no me dejes. Tú me dices ‘Te amo’ en silencio y el sonido interminable de aquella máquina me indica que te has ido.
Para siempre.
No voy a resistir eso. Si Shaoran Li se va, Sakura Kinomoto se va con él.
Y en medio de ese anuncio de tu partida, tomo un pedazo de cristal del suelo. Lo observo fijamente unos segundos, cierro la mano con fuerza.
El cristal atraviesa mi piel, la palma de mi mano comienza a sangrar. Me acerco a tu cuerpo sin vida y beso tus labios una última vez.
Gotas de sangre se derraman sobre las sábanas blancas. Contrastan.
Con la poca fuerza que me queda, tomo con la mano ensangrentada el pedazo de cristal y miro tu rostro apacible una vez más.
Entonces suelto un grito desgarrador al sentir el corte sobre mis muñecas y la sangre deslizándose por mi piel. Una mancha que tiñe el blanco de rojo. De muerte.
Caigo a tu lado y respiro por última vez. Ahora solo me queda buscar.
¿Dónde está tu corazón, y dónde está el mío?