Fandom: Axis Powers - Hetalia
Título: No es nada.
Claim: Inglaterra!centric. Aparición de las demás Islas Británicas.
Tabla: Inspirada - Canciones
Prompt:
Little Lion Man - Mumford & SonsDisclaimer: Gales (Oliver), Irlanda del Norte (Liam), Irlanda (Cian) y Escocia (Ian) son propiedad de mishpkad :3
Para:
mision_insanaNotas: OHDIOS. TERMINÉ LA TABLA *rueda por es suelo de la emoción* Ok, ya xD Bueno, esto se suponía que iba a ser para ayer, Día de San Patricio, pero no lo logré *fail* Pero aquí está, dedicado con amour a mi waifu bella,
mishpkad.
Está basado principalmente en que ayer el equipo de rugby de Irlanda y el de Inglaterra jugaron un partido del torneo de 6 naciones... y en realidad no valía nada, porque Gales ya los había apaleado a ambos(?), pero bueno, Inglaterra terminó ganando 30-9. En Día de San Patricio. Ouch. Y bueno, también está basado en el headcanon que tenemos mi waifu y yo, sobre el hecho de que Arthur no deja que Liam festeje su cumpleaños el 17, como hacía antes de la separación de las Irlandas, sino que se aferra a que lo celebre el 3 de mayo (que fue cuando se constituyó formalmente Irlanda del Norte)... y obviamente a Liam no le hace ni puta gracia D:
Y después de las notas kilométricas... aquí está :3
[No es nada]
Tremble to yourself, my man,
You know you’ve seen this all before…
Giras el balón de rugby entre tus manos con lentitud, examinándolo. Lo miras fijamente, como si tuviera todas las respuestas que has buscado desde el principio de los tiempos, como si fuera a darte una solución rápida, sencilla y eficaz.
-Vamos, Li, ¡apresúrate! ¡Nos esperan en el pub!
La voz de Cian es alegre, y no puedes evitar apretar el agarre que tienes sobre el balón. No se supone que esté alegre. ¿No recuerda que acaba de perder humillantemente? ¿Acaso no acabas de vencerlo? Estás de espaldas a los gemelos, sentado en una de las bancas del vestidor, recién salido de la ducha. Maldices interiormente a la estúpida caldera que decidió dejar de funcionar justo después del partido, obligándote a compartir el vestidor con ellos. Ja, y ellos hablan de mala suerte.
Dejas el balón a un lado y te concentras en abrochar tu camisa con parsimonia, tratar de hacer algo con tu cabello e ignorar la conversación animada que tienen los gemelos a tus espaldas, con sus planes para el festejo y sus risas espontáneas. Tsk. Estúpido Liam.
Tremble, little lion man,
You’ll never settle any of your scores…
No es como si fuera su cumpleaños, de cualquier forma (o eso te dices siempre). No es como si tuviera razón alguna para ignorarte de esa forma, ni para mirarte con desprecio cada que intentas captar su atención (aunque sabes que la tiene).
«-Tienes trabajo, Liam, no irás. -Tu voz fue tajante y ni siquiera levantaste la vista de los papeles que estabas firmando.
-Es sábado, mi día libre, y si quiero celebrar el cumpleaños de mi hermano -y sentiste ese “y el mío” tamborileando en sus labios, dudando salir- con él, no puedes impedirlo -contestó finalmente él, también firme-. Además, aunque hubieras cambiado mis días libres, es el partido, ¿recuerdas? No puedes cambiar el día de eso.
Levantaste la cabeza, mirándolo con frialdad.
-Ya te lo dije antes, tienes trabajo que hacer, Liam -repetiste, sin desviar los ojos de los suyos-. Regresaremos después del partido, tienes mucho papeleo atrasado. Hubieras pensado en eso antes.
Y bajaste la vista de nuevo hacia tus documentos, satisfecho con tu punto, notando la tensión y frustración que Liam soltaba.»
Pero al final el tiro te salió por la culata, ¿no es así, Arthur? Pudiste ver a Liam quedarse varias noches sin dormir, pero el día anterior al partido todo su papeleo estaba en tu escritorio, ordenado y listo. Su sonrisa de satisfacción no cabía en su cara, y tu sorpresa y enfado no cabían en la tuya. Le habías puesto trabas, pero las había saltado una a una, e incluso Cameron le había dado su consentimiento.
Your grace is wasted in your face
Your boldness stands alone among the wreck
-¿No deberían ya salir de su cubil, ancianos? -La voz de Oliver llega de pronto, sacándote de tus maldiciones internas. Volteas a ver cómo el rubio les sonríe sardónicamente a los gemelos y luego regresas tu atención al espejo que usas para tratar de aplacar tu cabello, que sigue disparándose como paja.
-¿A quién llamas anciano, enano? -No puedes distinguir si ha contestado Cian o si lo ha hecho Liam, porque sus tonos son iguales, felices-. Al menos nosotros podemos entrar a cualquier pub sin que nos pidan identificación.
Tratas de ignorar la pelea divertida entre tus hermanos mayores, dándote por vencido con el cabello y pasando a la corbata, anudándola lentamente. El peso que sientes en la bolsa del pantalón parece hacerse cada vez más pesado, como si te recordara tácitamente que no va a irse, que está todavía ahí.
-Ian los está esperando en el auto, y nos dejará aquí si lo hacemos esperar más… o si intentas convencerlo de manejar, Cian -dice Oliver, con voz significativa.
-Sólo espera… listo, vamos.
Puedes escuchar los pasos de los gemelos salir por la puerta, entre risas y bromas, listos para festejar hasta bien entrada la noche.
-¿No irás con ellos, Oliver? -Lanzas la pregunta sin voltear, seguro de la presencia de tu hermano-. Te dejarán.
Te pasas una mano por el cabello, cerrando tu mochila y volteando a ver a tu hermano mayor, que te observa sin decir nada, como meditando lo que te dirá.
-¿Se lo diste? -pregunta de pronto.
But it was not your fault but mine,
And it was your heart on the line…
Te quedas rígido e instintivamente tu mano se mueve hacia tu bolsillo.
-¿Darle qué a quién? -preguntas a tu vez, esquivando la pregunta, y finges que acomodas tus cosas en la maleta.
-Sabes bien de lo que hablo -contesta Oliver, y tú finges ignorarlo-. Es su cumpleaños, Arthur.
-No lo es -contestas, firme en tu postura-. Su cumpleaños es el 3 de mayo.
Oliver rueda los ojos con exasperación, y seguramente te daría un buen golpe si estuviera un poco más cerca. Lo miras, con ojos firmes, pero tu mano sigue jugueteando con el bulto que tienes en el bolsillo derecho, como si estuvieras nervioso.
-Lo único que van a celebrar va a ser haber perdido -agregas, para desviar la conversación hacia cosas más simples.
-Sabes perfectamente que hoy a Cian no le importa haber perdido o ganado, porque Liam va a estar con él -dice Oliver, molesto por tu actitud. Sabes que Oliver toma muy en cuenta los cumpleaños, por que son de esas pocas veces en que están todos juntos sin intentar matarse... mucho. Todos los cumpleaños son así, excepto el de los gemelos-. Digas lo que digas, es su cumpleaños, Arthur.
-No lo es, Oliver, es el cumpleaños de Cian.
-Entonces, ¿por qué le compraste un regalo a Liam?
Te quedas de piedra, mirando directamente a los ojos acusadores de Oliver, tan parecidos a los tuyos. Oliver sabía.
-Oli, ¿qué haces? Dice Ian que si no vienes, hará barbacoa con tus ovejas... -La cabeza de Liam se asoma por la puerta y echa un vistazo; cuando entra, te ignora olímpicamente y mira al galés con simpatía-. Y Cian ya quiere una cerveza, vamos.
-No es nada, vamos -contesta Oliver, dándote la espalda. Tú sólo observas cómo ambos empiezan una pequeña pelea mientras se encaminan hacia la salida.
Te levantas con desgana y sacas la pequeña caja forrada con papel verde y un moño discreto, o lo más discreto que puede ser un moño naranja. La observas un momento y luego cargas la mochila y caminas hacia la salida, dejando caer la caja en el bote de basura que está junto a la puerta, sin mirar.
-Realmente no es nada.
I really fucked it up this time
Didn't I, my dear?
.