(no subject)
― ¿Día de suerte? ―Repitió Julia totalmente incrédula, habían ido a una feria y una de esas locas adivinas le había dicho que hoy había sido su día de suerte―Que idiotez.
― ¿Por qué lo dices? ―Pregunto su amiga curiosa, Julia tomo aire, no quería hablar de eso, pero se había caído tan duro que se había lastimado la cara y la bicicleta se le había roto, para colmo le habían robado la cartera que cargaba su mesada y sus padres le matarían ¿Qué tipo de suerte es esa?
Julia tomo aire y miro hacia la feria, todo era muy divertido pero no tenía dinero para montarse en las atra… ¿Por qué había un niño desmayado en mitad de la calle?
― ¡Eh, niño! ¿Estás bien? ―
Parecía no haber comido en días, sabía que su raza se dedicaba a entrenar desde niños, pero esto era una exageración, les dijo a sus amigas que llevaría al chico a su casa y que las veía más tarde.
Let abrió los ojos lentamente, esa habitación tenía un aire femenino, había entrenado mucho, se froto los ojos y miro a una rubia unos años menor que él mirándole curiosa.
―Al fin despertaste―
― ¿D-Donde estoy? ―
―En mi casa, te encontré desmayado ―
―Estaba entrenando y perdí la noción del tiempo―dijo simplemente encogiéndose de hombros y Julia sonrió divertida, explicándole que le había encontrado en la feria inconsciente, Let se sonrojo avergonzado cuando se dio cuenta que vivían prácticamente en frente.
―Gracias, por cierto, mi nombre es Let―
―Julia, a tus servicios―
Quizás era su día de suerte después de todo.
― ¿Por qué lo dices? ―Pregunto su amiga curiosa, Julia tomo aire, no quería hablar de eso, pero se había caído tan duro que se había lastimado la cara y la bicicleta se le había roto, para colmo le habían robado la cartera que cargaba su mesada y sus padres le matarían ¿Qué tipo de suerte es esa?
Julia tomo aire y miro hacia la feria, todo era muy divertido pero no tenía dinero para montarse en las atra… ¿Por qué había un niño desmayado en mitad de la calle?
― ¡Eh, niño! ¿Estás bien? ―
Parecía no haber comido en días, sabía que su raza se dedicaba a entrenar desde niños, pero esto era una exageración, les dijo a sus amigas que llevaría al chico a su casa y que las veía más tarde.
Let abrió los ojos lentamente, esa habitación tenía un aire femenino, había entrenado mucho, se froto los ojos y miro a una rubia unos años menor que él mirándole curiosa.
―Al fin despertaste―
― ¿D-Donde estoy? ―
―En mi casa, te encontré desmayado ―
―Estaba entrenando y perdí la noción del tiempo―dijo simplemente encogiéndose de hombros y Julia sonrió divertida, explicándole que le había encontrado en la feria inconsciente, Let se sonrojo avergonzado cuando se dio cuenta que vivían prácticamente en frente.
―Gracias, por cierto, mi nombre es Let―
―Julia, a tus servicios―
Quizás era su día de suerte después de todo.