El invierno empieza a trepar como una enredadera entre las sábanas que por la noche me intentan abrigar del frío de mi desesperación. Parece que fue hace tanto que fui feliz, que pisé tierras lejanas donde se hablaba de otras cosas y en otro idioma; parece hace tanto que nos besábamos en ascensores y sin embargo no han pasado apenas unos días. Me
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Sin embargo, hay instantes fugaces en los que se vuelve roja, o amarilla o verde brillante, para un instante despues volver de nuevo a su gris habitual. Nunca sabemos cuando aparecerá una de esas pinceladas de color, pero ahí están para sorprendernos y ayudarnos a seguir adelante en ese océano de gris.
El viajero sin destino.
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Aun en momentos grises y cuando parece que la felicidad se acaba y se rompen todos los sueños, te acuerdas de esos colores, de ese sentimiento de esperanza y notas la emoción y piensas: todo saldrá bién.
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tambien hay qe tener en cuenta qe esta vida es como una noria, aveces arriba y aveces abajo.
estoy segura qe habra mas encuentros, mas viajes, mas besos, mas fotografias en blanco y negro y mucho, muchisimo mas amos.
creo qe en vez de lamentarnos deberiamos aprender a valorar lo qe tenemos, hay gente qe nunca en su vida a logrado encontrar ese amor..
te quiero siempre
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