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Autor: ro_malfoy <
Fandom: Harry Potter
Personaje/Pareja/Trío: Draco Malfoy/Hermione Granger
Tema: 1.Inicio
VICIO 1: INCIO
Hermione se encontraba nerviosa y sus padres podían notarlo. Era el inicio de una nueva vida para ella. Con tan solo 11 años sufriría un cambio radical en su modo de vivir. Debía alejarse de sus padres por varios meses para poder comenzar sus estudios en el colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Porque según lo dicho en la carta y lo que el señor ese Albus Dumbledore le había contado en su visita ella era una bruja. Pero no una de esas malas que aparecían en los cuentos de hadas que sus padres le contaban, no. Ella era buena e iría allí para ser una extraordinaria hechicera. Pero igualmente sentía miedo… ¿Qué ocurriría si todo aquello era una mentira? Esa pregunta venía dando vueltas en su interior hace varios días…
-Hermione, cariño. Apúrate, se hace tarde…-gritó la madre de la joven desde el primer piso. La niña hizo caso, pero aun seguía con miedo. Hoy era el inicio de las clases. Como la carta decía tenía que ir a la Estación King’s Cross el 1ero de Septiembre a las 11 de la mañana. Y hoy, ¡era ese día! Ansiosa tomó sus cosas y salió corriendo con una sonrisa de oreja a oreja.
Pero había un problema.... Al llegar a la estación comenzó a buscar desesperada el andén que diga 9 ¾… ¡Pero allí no había ninguno! Estaba entre el andén 9 y el 10… Mirando con tristeza la carta. ¡Le habían mentido! Levantó la vista y vio a sus padres apenados. El reloj marcaba las once menos diez. De repente, como si fuera una señal una familia se acercaba discutiendo hacia el lugar que se encontraba Hermione. Adelante iba un joven rubio, peinado a la gomina y que caminaba con paso arrogante. Tenía puesta una túnica similar a la que ella le había visto a Albus Dumbledore. Atrás de él venían sus padres. Ambos eran rubios, con ojos grises y con la misma expresión de asco en el rostro. El pequeño la miró y se concentró en ella, la hizo ruborizar. El joven Draco Malfoy le dedicó una sonrisa y sin dejar de mirarla caminó con rapidez hacia la barrera que se encontraba entre los andénes 9 y 10.
-¡Cuidado!-gritó Hermione pensando que este se golpearía. Pero para su sorpresa, el joven rubio desapareció tras la barrera. Ahora sabía que debía hacer para llegar al andén 9 ¾. Miró a sus padres.
-Bueno, creo que aquí nos despedimos…- susurró con lágrimas en los ojos.
-Hasta luego, princesa. Cuídate mucho-dijo su padre dándole un abrazo. Se giró para saludar a su madre.
-Y escríbenos de vez en cuando…-le dijo a su hija.
Al finalizar el saludo, cerró los ojos y corrió hacia la barrera. Al abrirlos todo había cambiado. Pudo observar un gran tren escarlata con un cartel que decía Expreso de Hogwarts. Sonrío. Nadie le había mentido. Aún con lágrimas en los ojos subió al tren. No había ningún compartimiento libre, así que entró en el que se encontraba el joven rubio que la había ayudado indirectamente a entrar al mundo mágico. Abrió la puerta, él solo se limito a mirarla. Enseguida corrió la vista a la ventana. Hermione se sentó en frente de él…
-Hola…Hermione Granger-dijo extendiéndole la mano y presentándose.
-Malfoy, Draco Malfoy.-respondió simplemente este sin tomar la mano de la joven. Hermione apenada la apoyo sobre su regazo.
-¿Tu primer año?-preguntó el rubio
-Si, si. ¿El tuyo también, verdad?-dijo ella
-Exactamente.-dijo esta vez mirándola a los ojos. Era linda, pensó.- ¿Ya sabes en que casa estarás?
-¿Cómo en que casa?-preguntó ella
-Claro. Puedes estar en Hufflepuff donde van la mayoría de sangre sucias. Se dice que son “justos y leales”. Esta también Ravenclaw donde van todos los ratones de biblioteca. Gryffindor, que son la peste del colegio. Algunos dicen que son leales y corajudos pero para mi son un par de ratas apestosas. Y por último, la mejor casa, Slytherin, allí van los de linaje puro y los que realmente son astutos. Yo quiero entrar en esta última.-explicó Draco Malfoy.
-Pues… yo no sé que voy a elegir…-dijo algo confundida
-¡Pero si tú no eliges! El sombrero seleccionador dice donde irás… Espero que entres en Slytherin, me caes bien…-dijo divertido Malfoy.
-Ah, lo siento. No sabía.-antes de que Hermione pudiera proseguir entro un chico robusto un poco agitado y con una rana en la mano.
-Nevielle Longbottom. ¿Puedo?-preguntó señalando los asientos libres.
-Por supuesto.-respondió Hermione. En cuanto el joven se sentó la rana se le escapó de las manos.
-Trevor, vuelve acá. Otra vez no…-chillo- ¿Me ayudarían a buscarla?-preguntó.
-Claro, yo te acompaño.-dijo con una sonrisa Hermione.-Adiós, Draco Malfoy. Gracias pro compartir tu sabiduría conmigo y por ayudarme indirectamente a llegar al anden 9 ¾.
Con en ese saludo, Hermione salió del compartimiento. Muy en el fondo, ambos sabían que ese seria el inicio de una nueva relación.
Fandom: Harry Potter
Personaje/Pareja/Trío: Draco Malfoy/Hermione Granger
Tema: 1.Inicio
VICIO 1: INCIO
Hermione se encontraba nerviosa y sus padres podían notarlo. Era el inicio de una nueva vida para ella. Con tan solo 11 años sufriría un cambio radical en su modo de vivir. Debía alejarse de sus padres por varios meses para poder comenzar sus estudios en el colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Porque según lo dicho en la carta y lo que el señor ese Albus Dumbledore le había contado en su visita ella era una bruja. Pero no una de esas malas que aparecían en los cuentos de hadas que sus padres le contaban, no. Ella era buena e iría allí para ser una extraordinaria hechicera. Pero igualmente sentía miedo… ¿Qué ocurriría si todo aquello era una mentira? Esa pregunta venía dando vueltas en su interior hace varios días…
-Hermione, cariño. Apúrate, se hace tarde…-gritó la madre de la joven desde el primer piso. La niña hizo caso, pero aun seguía con miedo. Hoy era el inicio de las clases. Como la carta decía tenía que ir a la Estación King’s Cross el 1ero de Septiembre a las 11 de la mañana. Y hoy, ¡era ese día! Ansiosa tomó sus cosas y salió corriendo con una sonrisa de oreja a oreja.
Pero había un problema.... Al llegar a la estación comenzó a buscar desesperada el andén que diga 9 ¾… ¡Pero allí no había ninguno! Estaba entre el andén 9 y el 10… Mirando con tristeza la carta. ¡Le habían mentido! Levantó la vista y vio a sus padres apenados. El reloj marcaba las once menos diez. De repente, como si fuera una señal una familia se acercaba discutiendo hacia el lugar que se encontraba Hermione. Adelante iba un joven rubio, peinado a la gomina y que caminaba con paso arrogante. Tenía puesta una túnica similar a la que ella le había visto a Albus Dumbledore. Atrás de él venían sus padres. Ambos eran rubios, con ojos grises y con la misma expresión de asco en el rostro. El pequeño la miró y se concentró en ella, la hizo ruborizar. El joven Draco Malfoy le dedicó una sonrisa y sin dejar de mirarla caminó con rapidez hacia la barrera que se encontraba entre los andénes 9 y 10.
-¡Cuidado!-gritó Hermione pensando que este se golpearía. Pero para su sorpresa, el joven rubio desapareció tras la barrera. Ahora sabía que debía hacer para llegar al andén 9 ¾. Miró a sus padres.
-Bueno, creo que aquí nos despedimos…- susurró con lágrimas en los ojos.
-Hasta luego, princesa. Cuídate mucho-dijo su padre dándole un abrazo. Se giró para saludar a su madre.
-Y escríbenos de vez en cuando…-le dijo a su hija.
Al finalizar el saludo, cerró los ojos y corrió hacia la barrera. Al abrirlos todo había cambiado. Pudo observar un gran tren escarlata con un cartel que decía Expreso de Hogwarts. Sonrío. Nadie le había mentido. Aún con lágrimas en los ojos subió al tren. No había ningún compartimiento libre, así que entró en el que se encontraba el joven rubio que la había ayudado indirectamente a entrar al mundo mágico. Abrió la puerta, él solo se limito a mirarla. Enseguida corrió la vista a la ventana. Hermione se sentó en frente de él…
-Hola…Hermione Granger-dijo extendiéndole la mano y presentándose.
-Malfoy, Draco Malfoy.-respondió simplemente este sin tomar la mano de la joven. Hermione apenada la apoyo sobre su regazo.
-¿Tu primer año?-preguntó el rubio
-Si, si. ¿El tuyo también, verdad?-dijo ella
-Exactamente.-dijo esta vez mirándola a los ojos. Era linda, pensó.- ¿Ya sabes en que casa estarás?
-¿Cómo en que casa?-preguntó ella
-Claro. Puedes estar en Hufflepuff donde van la mayoría de sangre sucias. Se dice que son “justos y leales”. Esta también Ravenclaw donde van todos los ratones de biblioteca. Gryffindor, que son la peste del colegio. Algunos dicen que son leales y corajudos pero para mi son un par de ratas apestosas. Y por último, la mejor casa, Slytherin, allí van los de linaje puro y los que realmente son astutos. Yo quiero entrar en esta última.-explicó Draco Malfoy.
-Pues… yo no sé que voy a elegir…-dijo algo confundida
-¡Pero si tú no eliges! El sombrero seleccionador dice donde irás… Espero que entres en Slytherin, me caes bien…-dijo divertido Malfoy.
-Ah, lo siento. No sabía.-antes de que Hermione pudiera proseguir entro un chico robusto un poco agitado y con una rana en la mano.
-Nevielle Longbottom. ¿Puedo?-preguntó señalando los asientos libres.
-Por supuesto.-respondió Hermione. En cuanto el joven se sentó la rana se le escapó de las manos.
-Trevor, vuelve acá. Otra vez no…-chillo- ¿Me ayudarían a buscarla?-preguntó.
-Claro, yo te acompaño.-dijo con una sonrisa Hermione.-Adiós, Draco Malfoy. Gracias pro compartir tu sabiduría conmigo y por ayudarme indirectamente a llegar al anden 9 ¾.
Con en ese saludo, Hermione salió del compartimiento. Muy en el fondo, ambos sabían que ese seria el inicio de una nueva relación.