Personajes: Kevin y Scotty
Nota: Hago referencia al la 1º y 5º temporada.
Motivo: Porque creo que de vez en cuando la monotonía del matrimonio es lo más bonito del mundo.
‘Reconozco que no elegí el mejor momento.’
‘Para nada.’ Contestó Kevin. ‘Fue perfecto.’
Se miraron unos segundos. Ambos adoraban el hecho de que pudiesen decirse tanto sin hablar.
‘Había estado esperando que tu me lo dijeses.’
Kevin le acarició la mano. ‘Sabes que mi fuerte no son las palabras de amor.’
‘Eso no es verdad.’ Le contradijo él. ‘Eres bueno con las palabras de amor, lo que pasa es que no se te da bien expresar tus sentimientos. Temes ser vulnerable.’
Kevin dio un sorbo al café. Su marido tenía razón. Odiaba sentirse vulnerable y temía que los demás le viesen así.
‘No cuando estoy contigo. Contigo no tengo miedo.’ Las palabras salieron de su boca más serias de lo que se había propuesto, pero eso no molestó a Scotty.
‘Lo sé.’ Dijo sonriendo y acercándole la cuchara para que este pudiese probar la tarta.
***
‘¿Este es el famoso sitio?’ Dijo mirando el pequeño y cutre restaurante-take away, lleno de gente de gente de color, posiblemente pakistaní o turca o india.
‘Sí. Es el mejor.’
‘Si tu lo dices...’
‘Hay una cosa que tienes que aprender, mi pequeño padawan. Si en un restaurante de comida internacional, hay gente del lugar de la comida, es que es bueno. Desconfía de un chino sin chinos o de un turco sin turcos.’
Kevin le miró con esa cara que ponía él cada vez que algo le divertía pero le desconcertaba. Quizás tuviese razón.
‘Sí, maestro.’ Dijo siguiéndole la broma.
Scotty se acercó a la barra y pidió dos kebabs. Kevin no le dijo cómo lo quería y sabía que aunque lo hubiese hecho hubiese dado igual. Scotty era muy suyo con la comida. Tenía una especie de pasión por ella. No es era que a Kevin le molestase, pues había adelgazado misteriosamente desde que Scotty cocinaba para él, simplemente le divertía.
Scotty volvió con los dos envases de plástico y los kebabs.
‘Ha dicho que no tiene sitio, pero que aquí delante hay un parque. Que nos podemos sentar allí.’
‘¿Junto con los vagabundos y drogadictos?’
‘No seas snob.’
‘Pero si te encanta.’ Dijo Kevin abriéndole la puerta y siguiéndole.
‘Toma.’ Dijo Scotty dándole su kebab.
‘¿Cómo se supone que me voy a comer esto?’ Preguntó Kevin viendo el plato. En el lado derecho tenía el pan con la carne y las diferentes salsas, y en el izquierdo la lechuga, el tomate y la cebolla.
‘Con paciencia y guarreando.’
Kevin soltó una especie de bufido. Genial, pensó, no soy bueno con ninguna de las dos cosas. Estuvo unos segundos mirando el plato. No quería hacer el ridículo, no después del romántico momento que habían compartido en el coche minutos atrás. Pero vio a Scotty limpiando el banco y sentándose. Le miró con la misma expresión que puso Julia Roberts a Hugh Grant en Notting Hill y Kevin no pudo resistirse.
***
‘Nunca había guarreado tanto comiendo.’ Dijo Kevin mirando la cuenta y sacando la cartera.
En otra época ese gesto habría molestado a Scotty, pero no ahora. Ahora eran una familia que compartían una cuenta en conjunto desde hacía años, y si Kevin quería pagar, a Scotty le parecía bien.
‘Estabas muy gracioso.’
‘No era lo que pretendía.’
‘No.’ Dijo Scotty acordándose de como Kevin había intentado mantener su dignidad sin éxito.
Ambos se miraron y volvieron a sentir esa conexión tan especial.
‘Vamos.’ Dijo Scotty una vez que el camarero les trajo la vuelta. ‘La niñera esta a punto de llamar.’
‘Si.’ Dijo Kevin levantándose y dejando la correspondiente propina en la mesa.
No tardaron mucho en llegar a casa. Pagaron al canguro, comprobaron que los niños estaban dormidos y se fueron al dormitorio.
***
‘Cualquier hombre se hubiese enamorado de ti.’ Dijo Scotty mientras su pierna acariciaba a la de su marido y su mano izquierda jugaba con el vello de su pecho aún sudoroso por haber hecho el amor.
‘¿Qué?’
‘Si te hubiera visto comiendo ese kebab.’
‘Lo dudo mucho.’
‘¿Por?’
‘Porque no puedo imaginar una situación en la que esté menos atractivo.’
‘Pues yo te vi como realmente eres.’
Kevin le miró fijamente. Scotty paró de acariciarle.
‘Estabas natural, eras gracioso y adorable y preocupado de la opinión que estabas causando... Pocas veces te muestras así.’
‘Eso es porque no me siento cómodo siendo natural.’ Dijo intentando que sonase a broma.
‘No. Eso es porque te asusta que la gente pueda llegar a conocerte. Temes ser vulnerable y por eso te aferras a tu coraza de cinismo y sarcasmo, con tus trajes y tu forma de aparentar que nada te influye.’
Nada más decirlo Scotty se dio cuenta de que no había sonado como él quería y se apresuró a arreglarlo, pero Kevin no le dio tiempo.
‘¿Eso es lo que piensas?’ Dijo alejándose un poco de él.
‘No... Bueno, no es así. Así eras tu...’
‘No me refiero a eso.’ Dijo cortándole. ‘Me refiero que si así es cómo pensabas. Que yo era una persona fría a la que nada le inmutaba.’
Scotty le miró y se tomó unos segundos para contestar. ‘Sí.’
Kevin asintió. Hubo un pequeño silencio entre los dos.
‘Entonces, ¿por qué pusiste tanto empeño en conocerme?’
Scotty sonrió. ‘Porque sabía que valdría la pena.’
La mirada de Kevin se endulzó y Scotty lo aprovechó para volver a acercarse a él y besarle.
FIN