Autor:
rhea_carlysseFandom: House MD
Personaje/Pareja/Trío: Foreman/Chase
Tema: #7 - Celos
Nota: Quería publicar más, pero se niegan a salir de mi cabeza, así que sigamos uno por uno. Es una chorrada de fic, pero me pareció mono, qué queréis que os diga...
-¿Cómo se llama?
-Eso no es asunto tuyo.
-Pero quiero saberlo.
Foreman respira hondo y continúa luchando con el nudo de su corbata, ya que ésta parece haber decidido no dejarle salir ese día del hospital pareciendo una persona civilizada.
-Lorena.
-¿Es guapa?
-Eso sí que no es asunto tuyo.
Chase entorna los ojos y escruta atentamente a Foreman - Eso es que es fea -.
-A veces pienso que no puedes ser más infantil, Chase, y entonces dices algo como eso y veo lo equivocado que estaba - contesta, e intenta esconder la media sonrisa que comienza a formarse en sus labios.
-Lo que quieras, no soy yo el que tiene una cita con una Lorena.
-¿Qué tiene de malo Lorena?
-Es fea.
Foreman no dice nada, se ajusta la corbata - más o menos. En realidad no hay ningún nudo definido que ajustar - y se vuelve para mirar a Chase antes de sentenciar:
-Estás celoso.
-No.
-Sí.
-No - pausa, y Foreman todavía no ha apartado la mirada de él -. No. ¿Por qúe iba a estarlo?
Y lo dice con ese tono de estoy mintiendo descaradamente, que hace que Foreman no tenga ninguna duda de que, en efecto, lo está.
-Ese nivel de celos es de parvulario, Chase.
-No. Estoy. Celoso.
-Es fea - repite Foreman, agudizando su voz y con un falso acento australiano -. Parvulario.
Chase se contiene y no saca la lengua. Celos. La idea es tan estúpida que rebota en su mente sin parar. ¿Por qué tienen que ser celos? ¿Por qué no puede ser sólo una bonita y sana curiosidad? Es lo que tiene meterte en la cama con tus compañeros de trabajo de vez en cuando, acentúa tu curiosidad en cuanto a su vida amorosa.
-No son celos.-
-Claro que no - y el tono claramente dice: lo que tú digas, bonito.
-No lo son.
-No sé si lo repites para que me lo crea yo o para creértelo tú- tiene una sonrisa en los labios, el muy capullo.
-Lo repito porque es verdad. Es más, ¿sabes qué? Deberíamos hacer una cita doble.
-Oh, ¿por fin vas a presentarme a tu muñeca hinchable?
A la respuesta le sigue un Ouch, ya que Chase ha decidido lanzarle a la cabeza uno de esos bolígrafos que siempre guarda en el bolsillo de su bata.
-Para tu información, podría conseguir que cualquiera de las enfermeras de planta saliera conmigo.
-No te engañes, Chase, sólo están interesadas en tu pelo.
-Lo que tú digas, al menos la mía no es fea.
Foreman enarca una ceja ante la respuesta, pero tampoco dice nada. Se quita la corbata y la mete, prácticamente a golpes, dentro de su maletín, donde no podrá molestarle durante el resto del día.
-Y para que lo sepas - añade Chase -, no estoy celoso.
Y realmente no sabe si debería haberse callado o no, porque en dos pasos Foreman está a su lado, agarrándole de la corbata, y deslizando su lengua entre sus labios.
El beso no dura mucho, pero aun así le da tiempo a cerrar los ojos y a colocar las manos en la cintura de Foreman. Y entonces se acaba y Foreman murmura Llego tarde a mi cita contra sus labios, y le deja allí, contra la pared y con la sensación de que quizá, puede, a lo mejor, sí que está un poco celoso.