Helados - Crema del cielo (tres años)
Fandom: QaF
Personajes: Brian/Justin, Jamie
Prompt: #019 Crema del cielo
Pote: Taza
Con cuchara: Post 513
Servilleta: Jamie tiene tres años o menos, Rose es su ama de llaves, y por lo demás, otra escena más de la vida de los Kinney-Taylor. Si esta noche acabo los pre Jamie, mañana sabréis cómo pensaron en tenerle y cómo lo anunciaron a sus amigos ;)
Justin se acerca a él con tal expresión de desolación que Brian juraría que nota crecer una cana en su pelo, haciendo una lista mental de las miles de cosas que pueden haber pasado. Observando de reojo a Jamie, por una vez está donde debería, sentado en el suelo de su despacho, rodeado de papeles llenos de rayas o círculos de diferentes colores.
- ¿Qué ocurre, Gus está bien? - No ha oído el teléfono, pero eso no significa que no hayan podido llegar noticias de Canadá. Sabía que debería haber insistido más en que se quedaran, que debería haber recuperado sus derechos cuando…
- No será artista. - Su tono es triste, apoyándose en el borde de su escritorio, mirando a Jamie, que insiste en sus garabatos, mezclando verde y ¿rosa? en una amalgama indistinguible.
- ¿Eh? - Desiste de continuar trabajando, cerrando el portátil, pasando la mirada de uno a otro, Jamie se ha aburrido de los dibujos y mastica un lápiz de color amarillo, al menos ahora ha escogido algo que combina con su pelo.
Se levanta, quitándole el color a Jamie, observando los papeles que cubren su suelo.
- Sunshine, ¿me has interrumpido para decirme que JD no será artista? ¡Sólo tiene tres años, por amor de dios! - Se muerde el labio para no reír, poniendo los ojos en blanco.
- Gus a su edad ya conseguía formas distinguibles, o al menos hacía algo más que comer mina de lápiz.
Por favor. Brian coge a Jamie en brazos, dándole uno de sus juguetes para morder y quedándose el maldito color, empiezan a martillearle las sienes y cree que Justin tiene todas las papeletas para ganarse una buena bronca.
Necesita un trago, una aspirina y un polvo, y no en ese orden.
Entonces Justin le mira, le brillan los ojos y Brian no sabe cómo no se ha dado cuenta antes.
- Capullo.
- Estabas tan mono ahí alucinando, deberías haberte visto. Creía que te iba a dar un ataque.
- Vete a la mierda.
- ¡Mierda! - Si con Gus al menos hicieron algún esfuerzo por mejorar su vocabulario, con Jamie hace meses que han desistido. Brian le pasa el niño a Justin, intentando alejarse cuando éste le sujeta por la corbata, tirando de él hasta que sus labios están a menos de un centímetro de distancia.
- ¿Qué tal si dejamos a Jamie con Rose y subimos arriba a que me castigues? Has estado trabajando demasiado, necesitas relajarte.
- Buena idea, Sunshine.
Se agacha a besarlo, mordisqueándole para que entreabra la boca, introduciendo la lengua despacio, sintiendo la calidez de sus mechones en los dedos, aferrándose a su nuca para ahondar el contacto.
Relajándose en oleadas, sintiendo cómo el peso de sus hombros desaparece, casi sin dejar rastro, sólo la calidez de Justin frente a él, el olor de Jamie junto a ambos.
Personajes: Brian/Justin, Jamie
Prompt: #019 Crema del cielo
Pote: Taza
Con cuchara: Post 513
Servilleta: Jamie tiene tres años o menos, Rose es su ama de llaves, y por lo demás, otra escena más de la vida de los Kinney-Taylor. Si esta noche acabo los pre Jamie, mañana sabréis cómo pensaron en tenerle y cómo lo anunciaron a sus amigos ;)
Justin se acerca a él con tal expresión de desolación que Brian juraría que nota crecer una cana en su pelo, haciendo una lista mental de las miles de cosas que pueden haber pasado. Observando de reojo a Jamie, por una vez está donde debería, sentado en el suelo de su despacho, rodeado de papeles llenos de rayas o círculos de diferentes colores.
- ¿Qué ocurre, Gus está bien? - No ha oído el teléfono, pero eso no significa que no hayan podido llegar noticias de Canadá. Sabía que debería haber insistido más en que se quedaran, que debería haber recuperado sus derechos cuando…
- No será artista. - Su tono es triste, apoyándose en el borde de su escritorio, mirando a Jamie, que insiste en sus garabatos, mezclando verde y ¿rosa? en una amalgama indistinguible.
- ¿Eh? - Desiste de continuar trabajando, cerrando el portátil, pasando la mirada de uno a otro, Jamie se ha aburrido de los dibujos y mastica un lápiz de color amarillo, al menos ahora ha escogido algo que combina con su pelo.
Se levanta, quitándole el color a Jamie, observando los papeles que cubren su suelo.
- Sunshine, ¿me has interrumpido para decirme que JD no será artista? ¡Sólo tiene tres años, por amor de dios! - Se muerde el labio para no reír, poniendo los ojos en blanco.
- Gus a su edad ya conseguía formas distinguibles, o al menos hacía algo más que comer mina de lápiz.
Por favor. Brian coge a Jamie en brazos, dándole uno de sus juguetes para morder y quedándose el maldito color, empiezan a martillearle las sienes y cree que Justin tiene todas las papeletas para ganarse una buena bronca.
Necesita un trago, una aspirina y un polvo, y no en ese orden.
Entonces Justin le mira, le brillan los ojos y Brian no sabe cómo no se ha dado cuenta antes.
- Capullo.
- Estabas tan mono ahí alucinando, deberías haberte visto. Creía que te iba a dar un ataque.
- Vete a la mierda.
- ¡Mierda! - Si con Gus al menos hicieron algún esfuerzo por mejorar su vocabulario, con Jamie hace meses que han desistido. Brian le pasa el niño a Justin, intentando alejarse cuando éste le sujeta por la corbata, tirando de él hasta que sus labios están a menos de un centímetro de distancia.
- ¿Qué tal si dejamos a Jamie con Rose y subimos arriba a que me castigues? Has estado trabajando demasiado, necesitas relajarte.
- Buena idea, Sunshine.
Se agacha a besarlo, mordisqueándole para que entreabra la boca, introduciendo la lengua despacio, sintiendo la calidez de sus mechones en los dedos, aferrándose a su nuca para ahondar el contacto.
Relajándose en oleadas, sintiendo cómo el peso de sus hombros desaparece, casi sin dejar rastro, sólo la calidez de Justin frente a él, el olor de Jamie junto a ambos.