Tabla kinky - prompt 001

Apr 19, 2009 16:29

Fandom: QaF
Personajes: Jennifer/Otra
Advertencias: Incluye F/F. Post 513, Brian y Justin ya viven juntos en Britin.
Palabras: 720
Rating: General
Notas: No preguntéis cómo, pero lo que iba a ser una mera escena entre Jennifer y otra mujer ha acabado con vida propia, pero bleh, me gusta el resultado.
Prompt: #001
Tabla kinky

Disfrutad!


Cree que puede culpar a la bebida, a esa sensación de achispamiento que le produce beber tantos martinis en apenas una hora, pero también a esa sonrisa traviesa, a estar en Liberty Avenue celebrando que la han nombrado agente inmobiliaria del mes, a que Debbie hace rato que se ha marchado alegando tener que ocuparse de ciertos “deberes maritales”. Debbie no lo ha expresado así, ha sonado más a “quiero follar hasta que se me caigan las pestañas, qué coño, aún somos jóvenes” pero cierta parte de Jennifer sigue siendo una mujer bien educada de la zona residencial de Pittsburgh.

-          ¿Vamos a mi apartamento? - Tucker está de viaje con sus alumnos, Jennifer siempre se ha preguntado qué sería experimentar un poco lo que sienten su hijo y Brian, o Lindsay y Melanie, que sería un ejemplo más acorde con el aspecto físico del asunto.

La voz que le susurra al oído le envía un estremecimiento que recorre su cuerpo y la deja más embriagada que el alcohol, así que sacude la cabeza, intentando serenarse.

-          No soy lesbiana.

Su acompañante es una mujer más joven, con una sonrisa llena de hoyuelos y promesas, que se encoge de hombros, lamiéndose los labios.

-          Todas dicen lo mismo, cariño. - Ríen juntas, hasta que el aliento se le atasca en la garganta, Jennifer nunca había besado a otra mujer, sabe a terciopelo y su cuerpo es suave y caliente bajo sus manos, mientras sus lenguas se rozan, abrazándose en la barra del bar.

Finalmente se separan, es obvio que a la mañana siguiente todo serían recriminaciones o promesas que no piensan cumplirse, así que su nueva amiga se encoge de hombros, dándole un último beso antes de separarse.

-          Lástima, nos habríamos divertido. ¿Te llevo a casa?

Jennifer sonríe, sacando su móvil, sabe a quién llamar.

-          No te preocupes, vienen a buscarme.

Por un momento ha estado a punto de ser la misma Jennifer de hace una eternidad, que acababa de entrar en la universidad y tenía toda su vida por delante. La mujer que creía que su existencia sería perfecta, que fundaría la familia ideal con aquel chico tan guapo del equipo de béisbol. Pero que se preguntaba qué sería ser más salvaje, vivir según sus propias normas y no las de la sociedad.

De vuelta a casa, oliendo a cuero y tabaco, no entiende por qué Brian sigue fumando dentro de su precioso coche, revive en su cabeza ese primer beso con una mujer, estallando en risitas de borracha.

Brian arquea una ceja, mirándola de reojo, esperando a que deje de estar histérica y se explique.

-          Hoy he besado a una mujer.

-          Bravo por ti, mamá Taylor. ¿Vas a unirte al grupo de Bolleras Unidas del LGC en un futuro cercano? - Su tono incluye casi tanto respeto y orgullo como diversión y sorpresa, a menudo cree que tiene calada a su suegra, y de repente le llama a altas horas de la madrugada para que la recoja de un bar de lesbianas de Liberty. Justin va a alucinar cuando se entere.

Parece pensarlo un momento, como si no fuera bastante haber iniciado una relación con un hombre más cercano a la edad de Brian o de Justin que a la suya. La crisis de los cuarenta le está afectando demasiado a la pobre mujer.

-          Fue diferente. Especial. - Mira a Brian al decirlo, sonriéndole con cariño. No estaba tan bebida como parecía.

-          Lo es.

No hablan de besos entre dos desconocidas en un bar, Jennifer le estrecha el brazo un segundo, en un gesto de apoyo, de comprensión, y ambos acuerdan de manera tácita no hablarle jamás a Justin del intento de su madre por cruzar la acera.

Ya tiene bastantes ataques de reina del drama con lo de Tucker como para darle más excusas para comportarse como a los diecisiete.

-          Pero si alguna vez se llega a enterar, yo no sé nada. No voy a quedarme sin follar sólo porque su mamá quería experimentar un poco.

-          ¡Brian!

El universo vuelve a su sitio, Brian la lleva a casa en un silencio agradable, Jennifer le agradece el favor con un beso en la mejilla, y cuando éste vuelve a Britin ya está amaneciendo, Justin apenas se mueve cuando vuelve a colarse bajo las sábanas.

drabbles qaf, kinky

Previous post Next post
Up