[fic] #16 Fastidiar | Edward/Winry | Fullmetal Alchemist

Nov 16, 2008 21:24

Fandom: Fullmetal Alchemist.
Pareja: Edward/Winry.
Tabla: Vicios.
Prompt: #16 Fastidiar.
Palabras: 734.
Advertencias: post-manga. Presupongamos que Ed y Winry están juntos, ¿ok?



Estaban solos.

Un momento de calma en el silencio sepulcral de la noche bien entrada, solos en la casa a excepción de la compañía de Den, que permanecía tumbada en una esquina, alejada de ellos. Edward, con ciertas maneras un tanto caninas, también estaba tirado en el suelo; a su alrededor, un caos de libros se extendía en un radio de un metro. Libros llenos de polvo y arañazos, unos con tapas caídas, otros más nuevos donde las letras doradas de la cubierta aún se podían leer. Y en el centro neurálgico de todo ese conocimiento, Edward Elric encorvado sobre las páginas de algún manual de alquimia que le traía recuerdos de cuando era más pequeño. Cosas de estar en mitad de limpieza y organización de pertenencias, se decía Winry.

Ed se había empeñado en poner cierto orden en sus cajas repletas de libros, la mayoría de la antigua biblioteca de su padre. Tras quemar la casa, Alphonse y él los guardaron a buen recaudo, empaquetados y precintados, en el sótano de las Rockbell. Ahora Edward, haciendo uso de su tiempo libre después de que aquella pesadilla acabase años atrás, se dedicaba a remover entre aquellas cajas de recuerdos que incluso le hacían sonreír y reír en algunos momentos.

Pero estaban solos, repitió mentalmente Winry, y Edward ya había gastado gran parte de la semana en sus libros. Los dos habían estado demasiado tranquilos y relajados; Winry necesitaba algo de acción o, temía, al final acabaría por olvidar cuán placentero era tocarle las narices al ya-no-tan-enano.

―Eeeeed… ―le llamó, con voz cantarina y aflautada, mientras se aproximaba a él por detrás. Pudo percibir el ligero temblor del chico.

Giró la cabeza; una sombra oscurecía su rostro, y tragó saliva.

―¿Qué?

Winry no tardó ni dos segundos en sentarse en el suelo, justo detrás de él, y rodear con sus piernas la cintura de Edward. Luego llevó sus manos hasta la coleta alta que solía lucir el alquimista desde hacía ya un tiempo, dejando atrás la trenza de aire infantil. Enredó los dedos entre las hebras finas y suaves, rozando con toda la intención su nuca.

―¿Qué estás haciendo, Winry?

Ella se encogió de hombros y le lanzó una mirada de falsa inocencia. Él resopló y volvió a dirigir la vista hacia el libro que sostenía en su regazo. Pero los pies de Winry se interponían en su labor, y la muchacha no parecía dispuesta a aflojar su agarre.

―Estoy leyendo ―puntualizó, con tal de remarcar la evidencia y dar a entender que quería leer. Winry ya lo sabía, claro; pero ahí residía la diversión del asunto.

―Lo sé.

―Entonces, ¿por qué no te vas a peinar a Alphonse?

―Porque estamos solos.

Solos. Solos, repitió el subconsciente de Ed. Un nudo se le formó en la garganta, y por un instante no respiró.

Winry empezó a tironear de la coleta; primero sólo de un par de pelos, y al final de todos. Edward optó por el contraataque de “te-voy-a-ignorar-y-no-me-molestas”, concentrándose plenamente en su lectura. Winry se cansó de dar tironcitos y empezó a usar las puntas para hacerle cosquillas en el cuello; Edward dio algún que otro respingo mal disimulado cada vez que el cabello le rozaba, y por lo bajo gruñó para sí mismo. Tras varios minutos, Winry se aburrió de su tortura y comenzó a peinar la cabellera de Edward de una y mil formas: primero trenzó la coleta, luego la deshizo; después le hizo dos coletas, que según ella eran bastante monas; y por último se dedicó a componer un moño alto y sencillo, con algunas mechas cayendo.

―No soy una muñeca ―bufó, al fin, con voz irritada.

Winry dejó escapar una risita y lo abrazó por detrás.

―Aunque eres tan pequeñín como una.

Lo había conseguido. Conforme las palabras salieron de entre sus labios, Edward Elric lanzó el libro y se removió furioso entre la cárcel de papel que él mismo había creado y rompió el agarre de Winry, dispuesto a contraatacar las vejaciones de la mecánico con una buena dosis de cosquillas y pellizcos (y lo que surgiera después; estaban solos, ¿no?).

Winry sufrió y las lágrimas se le caían de los ojos a borbotones, incapaz de dejar de reír mientras Ed acariciaba ese punto mortal un poco más arriba de su cintura. Aún así, había valido la pena sólo por fastidiar un poquito más a Ed.

Crossposteado en 30vicios y fma_esp.

= fandom: fullmetal alchemist, ! fanfic, @ tabla: vicios, p: fma: edward/winry

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