Effy está totalmente drogada para cuando Chris se sienta a su lado en el sofá, sosteniendo precariamente un porro en su mano derecha y pasando el brazo izquierdo por encima de sus hombros.
-Tú no sabes lo que es una fiesta de verdad, Effy.
Effy sonríe y arquea las cejas, alarga la mano con rapidez -quizá es que Chris está demasiado puesto para procesar nada- y le quita de la mano el porro mal liado, dando una calada profunda y soltando el humo en una risotada estruendosa.
Se sienta sobre él. Y le besa, sin más.
Al fin y al cabo es una fiesta. Al día siguiente nadie se acuerda.