Capricornio se encontraba sentado bajo la fresca sombra de un árbol, saboreando un vaso de nieve de nuez, mientras su compañera de turno disfrutaba de una paleta de mango, en un intento por hacer más llevadero el calor del mediodía.
- Oye Shura ¿tú crees que estoy loca? - yagi espetó sin más.
- Pues si hablar con un personaje ficticio no te da una clara idea sobre tu cuestión, entonces no sé que marcaría la pauta - responde sincero.
- Hablo en serio - dice enviándole una mirada de aquéllas que matarían si fuese posible.
El español también hablaba muy en serio, pero viendo sus ojos entrecerrados y recordando una nota donde se explicaba que para que los locos no cayeran en un violento desvarío, lo indicado era seguirles la corriente, él dejó que continuara sin preámbulo su debate personal. Para ello, le dio pie con un corto ademán de mano a que prosiguiera la charla, y así lo hizo: - Digamos que a esto - dice mientras menea su mano entre ellos - yo lo considero como un ejercicio mental.
La cabra no pudo evitar comparar tal razonamiento a uno de sus compañeros, más específicamente con Saga; pensó socarronamente que si ésto era un ejercicio mental, Géminis habría sobrepasado, en su momento, la tesis completa. Y aunque guardó estos pensamientos lo mejor que pudo, una leve sonrisa apareció, traviesa, sin que lograra suprimirla.
- Ehem... te refieres a que es algo parecido a un fic de los etiquetados...ah... ¿Cómo les llaman? ¿De Mary Sue? - ¡oh, sí! yagi se había encargado de instruir al moreno en una oportunidad anterior en el escabroso asunto del fandom.
- No, si éste fuera un fic mío tú estarías sufriendo - le aclaro mientras se ganaba una mirada del otro, que ella correctamente interpretó como "¿Y qué es lo que estoy haciendo ahora?" - Si ese fuera el caso, lo harías de amor y por mi persona - dice rodando los ojos por su aparente falta de memoria ¿Éste hombre no le ponía atención o qué?
Procesando lo anterior, Shura quedó petrificado ante la factibilidad de esta posibilidad. -Pero tu no haz hecho esto ¿verdad? - indaga cauteloso.
- No, supongo que no soy muy afin. Pero siempre me he preguntado si yo soy la del problema o son los demás autores, o sea, si en el fic puedo hacer lo que se me antoje contigo ¿Porqué jodidos me niego a traspasar ese límite y hay tantos que lo cruzan tan alegremente? - se explaya mientras pierde su vista en el horizonte.
- ¿Ése es tu dilema? es decir, ¿A eso se debió tu pregunta original? - finalmente atando los cabos sueltos, la observa atentamente con una elegante ceja alzada con naturalidad.
- Sí - fue la escueta respuesta.
Ante esto, Capricornio simplemente puso su mano sobre la cabeza de su confidente, sacudiendo su cabellera, gesto parecido al que se le ofrece a un cachorrito abandonado. Pero teniendo a bien omitir su plegaria interna que solicitaba así: "Athena mía. ilumina a esta alma perdida a encontrar mejores prioridades."
- ¿Me compras otra paleta? - sonríe, sintiéndose mejor que antes, simplemente por esa tierna muestra de solidaridad.
- Vamos - concede, levantándose ágilmente y dirigiendo el camino.
A su lado, yagi medita que si no puede obligarlo a hacer cosas que está segura, ni pasan por la mente del ibérico, entonces pasar más tiempo con él de esta forma no hace daño a nadie ¿verdad?
Después de un rato de cavilación, concluye sombríamente "Creo que he alcanzado un nuevo nivel de patetismo..."
Al parecer se dio cuenta que aún no ha terminado por escaparse de su época infantil. Y todavía no quiere hacerlo...
Extraño a Pegasus Fantasy T-T Ahí podía hacer esto...