Cuando sonries (5A/11) [AKame] (KAT-TUN)

Jan 30, 2013 11:44

Despues de lidiar con mis problemas existenciales por fin pude terminar de traducir esto ^^ Es muy largo y LJ no quiere postearlo (y encima escribe cosas mal WTF?)

Este fanfic es propiedad de auburn_witch más traducciones y fics  aquí.

Pareja: AKame
Resume Kame de verdad de verdad quiere ver a Jin, pero no puede. Las razones de esto varían. Jin es una estrella famosa, Kame es solo un chico normal. A pesar de que Kame consigue conocer a Jin, el idol es tímido y difícil de alcanzar. Pero ¿la razón más importante? Kamenashi Kazuya es ciego.

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( Capítulo 4) (Capítulo 5) ( Capítulo 6)

“Esto está yendo bastante bien” dijo Ueda, sonando muy complacido.

Kame y Koki estaban sentados en sus lugares usuales frente al escritorio de Ueda de nuevo, escuchando la evaluación del doctor de los primeros días en los que Kame tomó las nuevas píldoras. Incluso si no iba a tener ningún efecto real, tanto Kame como Koki estaban un  poco ansiosos por escuchar lo que Ueda tenía que decir.

“No hay signos de complicaciones hasta ahora” continuó Ueda. “Tampoco hay efectos secundarios, justo como había estimado. Aún falta que haya una diferencia comprobable en el estado de tu infección, pero aún tengo confianza de que llegaremos a ese punto.”

“Grandioso” dijo Koki, sonando muy aliviado.

“Lo que me gustaría hacer al final de las cuatro semanas de medicación es que vengas un par de días y hagamos algunas pruebas más extensivas” continuó Ueda.

Kame sintió que se hundía un poco en su silla.

“¿Es necesario?” preguntó sin gustarle la idea en absoluto. “¿No puedo venir durante el día?”

“Si Ueda-san dice que es buena idea, ¿no deberías hacerlo entonces?” dijo Koki, su tono era ligeramente impaciente.

“¿Es necesario?”” repitió Kame obstinadamente.

“No” admitió Ueda. “Podríamos ajustar todo durante el curso de un día, aunque eso sería un poco estresante.”

“Estoy bien con eso” dijo Kame inmediatamente. “Por favor, hagámoslo de esa forma.”

“Está bien por mi” dijo Ueda, haciendo alguna nota antes de que Koki tuviera tiempo para protestar. “Les dejaré saber cuándo sepa que día estaría bien. Estamos muy ocupados por aquí ahora, pero encontraremos tiempo para ti. Hasta entonces, asistirás a tus revisiones regulares como siempre.”

Kame guardó silencio en el coche mientras se dirigían a casa. Estaba esperando a que Koki hablara. Era obvio que su hermano no estaba complacido con el resultado de la reunión de hoy con Ueda. Después de mucho tiempo manejando, Koki suspiró.

“No voy a obligarte a quedarte en el hospital para las pruebas” comenzó, sonando cansado. “Porque no puedo hacerlo. Pero deberías, Kame. Estas causando inconvenientes al personal del hospital.”

“Lo sé” dijo Kame, sonando compungido.

“Algunas veces vas a tener que confiar en otras personas para algunas cosas” continuó Koki.

“Lo sé, Koki” repitió Kame. “No deberías preocuparte, estoy-“

“No me digas que estas bien” lo interrumpió Koki, sonando un poco divertido. “No siempre puedes decir que estas bien, Kame. Nadie está bien todo el tiempo.”

“¡Ahora lo estoy!” protestó Kame. “Y estoy definitivamente bien a pesar de que solo iré al hospital durante el día de las pruebas.”

“Entonces está bien” dijo Koki, dejándolo pasar por ahora. “Pero en alguna otra ocasión podría no funcionar así.”

“Solo no me gusta pasar la noche en el hospital” dijo Kame, molesto. “Se preocupan demasiado.”

“La mayoría de las personas dirían que cuidan de ti.”

“No necesito que cuiden de mi” dijo Kame, frustrado. “Como dije, estoy bien.”

“Está bien” dijo Koki, casi riendo. “Oye, tengo una buena idea. ¿Qué te parece un buen helado?”

Kame no pudo evitar sonreír ante eso.

“Solo si es un buen helado de chocolate.”

Mientras Kame y Ran-chan caminaban a través de las puertas automáticas hacia el elevador, Kame sosteniendo un helado de chocolate y Ran satisfecha tras probarlo, ambos escucharon a alguien moviéndose hacia algún lado por el corredor. Kame se detuvo y escuchó por un momento. Sonaba como que alguien estaba cargando cajas de una habitación a otra. Las puertas se abrían y cerraban, y algo raspaba el piso de vez en cuando. Tal vez un almacén estaba siendo vaciado. Ellos caminaron lentamente hacia el elevador, Kame examinaba con cuidado el piso con su bastón mientras caminaban. No estaría bien si pisaba las pertenencias de alguien y las arruinaba.

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Cuando comenzó, Jin no pensó mucho al respecto. Era solo una broma de cualquier forma. Estaban en el apartamento de Kame, sentados en el sillón. Kame accidentalmente había rozado su mano contra la de Jin mientras se estiraba por su café, y había sentido alguna clase de pulsera de cuero ahí. Con curiosidad, le había pedido a Jin que le describiera como se veía.

“Es café” había respondido Jin.

“Claro, uno de los colores que no conozco” suspiró Kame, burlón. “Usas eso a propósito, ¿no es así?”

“Por supuesto que no” rió Jin.

Kame estiró la mano y encontró la muñeca de Jin de nuevo, examinando la pulsera por sí mismo.

“Hay algo metálico también” dijo con acusación burlona en su voz. “¿Por qué no me dijiste eso?”

“Tal vez intenté ocultártelo” dijo Jin, intentando y fallando en sonar serio. “Tal vez estoy ocultándote muchas cosas. Por lo que sabes, yo podría tener barba.”

“¡Imposible!” exclamó Kame, moviendo su mano a lo largo del brazo de Jin hasta su barbilla. “Ve, no hay nada. No soy tan estúpido, ¿sabes?”

La mano de Kame se movió un poco más hacia abajo, descansando en el hombro de Jin, jugando con algunos mechones de su cabello. Mientras la conversación continuaba y el tema cambiaba, él no quitó su mano. Esa primera vez, Jin apenas lo notó.

La siguiente vez, cuando la mano de Kame de alguna manera encontró el camino hacía el cuello de Jin, Jin si lo notó. No estaba seguro de cómo reaccionar al principio, así que terminó sentándose muy quieto, esperando a que Kame retirara su mano. Kame no lo hizo. En su lugar, experimentalmente tocó el cuello de Jin, moviendo los dedos hacia arriba y hacia abajo por la nuca de Jin. Él no lo detuvo porque podía entender porqué Kame estaba haciéndolo. Después de darse cuenta de cómo Kame atesoraba cosas simples como los apretones de manos, no había manera en que no pudiera comprender por qué era importante para Kame sentir el mundo a su alrededor. Incluso a medida de que Kame cada vez más seguido terminaba tocando los hombros de Jin, o sus brazos, o sus manos, Jin no lo previno de ninguna forma. En lugar de eso, él intencionalmente cesaba todo movimiento innecesario y dejaba que Kame se tomara su tiempo.

Jin no era estúpido. Él sabía muy bien que esto era significantemente diferente de sus toques anteriores. Los apretones de manos habían sido largos, aún así habían sido apretones de manos y por lo tanto eran considerados gestos amistosos y nada más. Con el nuevo hábito de Kame, Jin estaba repetidamente permitiéndole entrar en su espacio personal en una forma que simplemente no podía ser considerada platónica. Esta era íntima en una manera en que ellos no lo habían estado antes. A pesar de eso, Jin descubrió que no le importaba. De hecho, a él le gustaba. Cuando intentaba pensar en porqué, se le ocurría que podría estarlo permitiendo simplemente porque prefería que Kame lo estuviera tocando a él que a su guitarra. Para él no tenía sentido completamente dejar que su relación se tornara así simplemente por eso, pero no estaba seguro si estaba listo para considerar cualquier otra explicación aún.

Después de un tiempo, cuando Kame había mantenido su nuevo hábito el suficiente tiempo para conocer los hombros y brazos de Jin muy, muy bien, Jin intentó responder a sus caricias. Kame estaba sosteniendo su mano en ese momento, examinando cuidadosamente los dedos de Jin. Estaban hablando acerca de a donde ir a almorzar al día siguiente y Kame estaba, por alguna razón, insistiendo en comer pasta.

“Conozco un lugar grandioso” estaba diciendo Kame, sus dedos cerrándose alrededor del meñique de Jin por un momento. “Tienes que probar su tortellini.”

Jin habría respondido, pero estaba distraído por los círculos que los dedos de Kame estaban trazando ahora en el dorso de la mano de Jin. En ese momento, Jin decidió intentar hacer algo. Lentamente movió su mano libre y la colocó con cuidado sobre la muñeca de Kame. Sintió a Kame congelarse a su lado, deteniendo súbitamente la conversación.

Fue hasta entonces que se dio cuenta de cómo Kame debía haber interpretado su repentino movimiento. Su mano sobre la muñeca de Kame claramente parecía una señal para que Kame dejara de hacer lo que estaba haciendo. Ya que Jin no tenía tal intención, lentamente movió sus dedos por el brazo de Kame y de vuelta, deslizando las puntas de sus dedos por el dorso de la mano de Kame y hacia sus dedos. Presionó ligeramente los dedos de Kame contra su mano, incitando a Kame a no detenerse. Kame pareció entenderlo y comenzó a repetir los círculos de antes, aún sus movimientos ahora parecían un poco inseguros. Jin pasó de nuevo su mano gentilmente por el brazo de Kame, tranquilizándolo.

“¿Esto está bien?” preguntó torpemente, rompiendo el silencio.

Jin sintió que la pregunta era necesaria, especialmente después de la reacción sorprendida de Kame. Incluso después de pasar todo este tiempo con Kame, no se le había ocurrido a Jin que él no podía haber visto su mano moverse. Podría haber sido una experiencia aterradora hasta que Kame se había dado cuenta exactamente lo que Jin estaba haciendo. Jin no disfrutaba particularmente preguntar si todo estaba bien, a pesar de que sabía que tenía que hacerlo. Hasta ese momento ellos nunca habían hablado de las cosas que estaban cambiando entre los dos.

Kame tampoco dijo nada ahora. Él solo asintió en silencio. Satisfecho de que Kame no se sintiera incómodo en ningún sentido, Jin comenzó a trazar círculos en el dorso de la mano de Kame, intentando copiar los círculos que los dedos de Kame estaban trazando en el dorso de su otra mano.

Ellos nunca se besaron ni hablaron de sentimientos o algo por el estilo. Si lo hubiesen hecho, Jin no estaba seguro de que habría dicho. Estaba consciente de que esto estaba comenzando a ir más allá de una amistad, pero no estaba seguro a donde se dirigían. No era muy difícil para él aceptar el hecho de que probablemente le gustaban tanto los hombres como las mujeres, aun así no podía asegurar que este era el giro que su amistad con Kame estaba tomando. Al final había tantas cosas que lo confundían que intentó concentrarse en lo que estaba seguro.

Él sabía que definitivamente quería seguir tocando a Kame de esta manera, en parte porque el chico era muy atractivo y en parte porque esto abría una forma diferente para que se comunicaran. Una vez que ambos se hubieron acostumbrado a tener esa clase de intimidad con el otro, se sentía muy natural y bien. Hablar de eso habría significado complicarlo y Jin no quería eso. Así que él no habló acerca de este nuevo y confuso sentimiento y tampoco pensó mucho al respecto. No era algo que jamás hubiese sentido por otra persona, aún así la atracción era diferente. No le era familiar, aún así no podía decir en qué forma.

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A Kame le era muy familiar este nuevo sentimiento. Lo había sentido antes y sabía exactamente que estaba ocurriendo. En retrospectiva, estaba sorprendido de que hubiese estado tan confundido antes cuando había comenzado la nueva cercanía entre ellos. En ese momento, él ya había sentido por mucho tiempo que quería experimentar más de Jin que solo su voz. Por muy encantador que fuera el canto de Jin, le faltaba algo. A Kame no se le había ocurrido que la solución podría ser tocar hasta la vez en que quiso descubrir si Jin tenía o no barba.

Después de eso, no pudo evitar tocar a Jin cada vez que tenía oportunidad. Intentaba limitarse a los brazos y manos para no incomodar a Jin demasiado. Aún así estaba plenamente consciente de que lo que estaba haciendo ya no encajaba exactamente en la categoría de amigos. Debido a esto, él se sintió aliviado cuando Jin no pareció estar a punto de huir de él pronto. Él se había arriesgado al llegar tan lejos y aún así parecía que de alguna forma había resultado bien.

Cuando Jin tuvo la brillante idea de responder a los avances de Kame, él no podía decir que no estaba sorprendido. Esto era en parte porque literalmente no lo había visto venir y en parte porque realmente no había pensado que Jin podría estar interesado en algo así. Entonces de nuevo, Kame tampoco había pensado exactamente que Jin le habría permitido tocarlo libremente. Al principio se puso ligeramente nervioso de nuevo, pero en el fondo estaba emocionado.

A pesar de que ambos se habían acostumbrado bastante a esta nueva intimidad cada que estaba solos, ellos inconscientemente mantenían su distancia cuando salían en público. Si estaban en el café o en el parque ellos se comportarían con normalidad, pero una vez que la puerta se hubiese cerrado tras de ellos en el apartamento de Kame, nunca les tomaba mucho antes de que estuvieran sentados en algún lado, cerca el uno del otro y ocupados experimentando alguna parte del otro. Ellos aún hablaban, pero su comunicación resultaba volverse mucho más fácil si ellos tenían algún tipo de contacto piel a piel mientras hablaban. A Kame le gustaba pensar que acurrucarse juntos les ayudaba a entenderse mejor.

Cuando desabotonó por primera vez la camisa de Jin, él a penas se había dado cuenta de lo que estaba haciendo. En su opinión, era simplemente inconveniente que Jin estuviese vestido. Kame estaba cansado y había estado descansando su mano en el hombro de Jin mientras que la mano de Jin se movía arriba y abajo sobre su brazo. Él había pensado que sería mucho más agradable si pudiera tocar también la piel de Jin, aún así eso era difícil desde su posición actual. Fue por eso que se hizo hacia atrás y buscó los botones de la camisa de Jin.

Mucho, mucho después, cuando Jin ya se había ido, se dio cuenta de cómo Jin se había congelado en su lugar mientras él trabajaba en desabotonar su camisa. No le había puesto atención siquiera al pecho de Jin cuando acabó, yendo al su hombro en su lugar, y poniendo su mano de vuelta en su lugar. Ellos no habían estado hablando en ese momento, así que Kame tampoco había sido capaz de notar que la conversación se detuviera o algo así. Él podía recordar a Jin retomando sus movimientos contra el brazo de Kame un rato después, y todo había parecido normal mientras Jin se ponía de pie para irse. La siguiente vez que se vieron no hubo algo inusual, pero a partir de entonces de vez en cuando ocurría que las camisas eran removidas por conveniencia. Para entonces Kame sabía que las cosas se estaban volviendo más afectuosas entre ellos y solo un poco sexuales, aún así ellos estaban lejos de hacer algo entre esas líneas.

Esta no era la primera vez que Kame había estado atraído por otro hombre, pero no estaba seguro de que tan lejos habían llegado aún. El hecho de que no hubiesen hablado acerca de lo que estaba ocurriendo quería decir que él no podía definir qué relación tenían. No podía decir que estuvieran saliendo o que estuvieran juntos en algún sentido. Hasta ahora ellos solo eran algo, y no estaba seguro de por cuanto lo serían o si el serlo eventualmente terminaría en algo más profundo. Aún así, Kame no falló en identificar correctamente el sentimiento familiar y descubrir lo que quería decir.

A pesar de que muchas cosas eran confusas en ese momento, Kame sabía que lentamente se estaba enamorando de Jin.

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( Parte 2)

akanishi jin, akame, kat-tun, kamenashi kazuya

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