Por no sé qué fuerzas de la naturaleza, acabo de decidir que voy a publicar esta historia. Quizá la vaya publicando más lenta de lo que me gustaría, porque me lleva su tiempo (y ahora mismo no tengo mucho de eso), pero irá avanzando. O eso espero. Llevo escribiéndolo alrededor de un año, puede que un poco más, y tengo menos escrito de lo que me gustaría, pero me lo voy a tomar con calma. No quiero presionarme. No quiero que escribir y publicar esta historia se convierta en una obligación, sobre todo porque le tengo mucho cariño y no quiero cogerle tirria. A otra vale; a esta no.
Dicho esto, espero que os guste, si la llegáis a leer. Me gustaría muchísimo que me comentéis si os ha gustado, qué os ha gustado, qué no os ha gustado, qué habéis aborrecido, si hay fallos de estos garrafales que soy tan propensa a tener, si hay dedazos que ni yo ni el Word hemos visto. Os agradecería de todo corazón cualquier cosa que me ayudara a mejorar a nivel general y, en particular, esta historia.
En este relato es posible que se traten temas adultos. Sobre la muerte, puede que sobre el sexo o puede que sobre cualquier otra cosa. No quiero herir a nadie, pero tampoco sé lo que me va a deparar este relato. Así que, aviso preventivo a navegantes.
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