Capitulo II
Todos los días Zoro entrenaba arduamente. La próxima vez que retara a Kuina tenia que vencerla, estaba decidido a ganar.
-Konnichiwa Zoro-kun.- se escucho una voz a lo lejos.
El pequeño peliverde detuvo su frenético ataque a los palos de bambú.
-Konnichiwa Shinta-san.- saludo mas por obligación que por otra cosa.
Himura Shinta era
(
Read more... )