[exo fanfic trans] baby, we're just warming up + of baths and collars (catboy!au)

Feb 06, 2014 01:59

Título: Cariño, sólo estamos calentando
Pareja: jongin + kyungsoo
Fic original de: thesockmonster
Rating: NC-17
Número de palabras: 2,000
Resumen: Jongin vuelve a casa para encontrar a su gatito necesitado de atención.
Notas: spin-off de Nothing more than ordinary life. (Se escribió antes que NMTOL, que es la precuela a este.)





el fanart es de midnighttofu, por desgracia cerró su tumblr así que no tengo ningún link original al que enviarlo....
bunny escribió el fic para este dibujo.

Un fuerte suspiro de cansancio atraviesa el silencio de su casa cuando Jongin abre la puerta, la cierra tras él y se quita los zapatos. Su cartera cae al suelo con un sonido que retumba y entonces se da cuenta de que algo no va bien. Sus ojos peinan la habitación y avanza hacia el interior de la casa. Todo está organizado y en su sitio, todas las superficies están limpias e incluso parece que el suelo está meticulosamente limpio. Los libros de las estanterías han sido reordenados, así como los DVDs y los CDs y el estómago de Jongin da un vuelco de culpa repentina. Lo olvidó.

El suave sonido del agua corriente llama su atención y Jongin va corriendo al baño, esperando que no sea demasiado tarde. Al abrir la puerta, ve a Kyungsoo sentado en la bañera, con las rodillas contra el pecho y el agua de la ducha derramándose sobre su cuerpo desnudo. Tiene la piel más pálida de lo normal y eso crea un fuerte contraste con el collar negro que sigue firmemente abrochado en su cuello. Cada gota de agua que golpea sus orejas felinas hace que estas se estremezcan y mira a su dueño con los ojos abiertos como platos y los labios casi azules. Jongin se siente un poco sobrecogido ante la imagen de pura desesperación que hay en la cara de Kyungsoo mientras tiembla, y una nueva ola de escalofríos recorre su cuerpo.

Jongin se apresura a cerrar el grifo del agua fría que cae sobre su híbrido-de-gato-ahora-novio (es una larga historia) y lo saca de la ducha. Está temblando, y su cola gotea patéticamente y Jongin no pierde el tiempo en envolverlo con la toalla más grande y mullida que encuentra.

-Lo siento muchísimo -dice, frotando los brazos de Kyungsoo para secarlo-. Lo olvidé y lo siento mucho.

Quiere llorar, suplicar perdón por haber olvidado algo tan importante.

Kyungsoo nunca habría estado en la ducha si la situación no fuera realmente mala. A pesar de que no huye del agua, el felino prefiere darse baños calientes con ambos apretujados en la bañera, y pone todo su empeño en evitar las duchas porque no le gusta que el agua le dé en las orejas. Jongin también las seca cuidadosamente con la toalla y Kyungsoo esconde la cara en el cuello de su dueño, y a pesar de que está temblando, también ronronea. Está ronroneando y Jongin se siente mil veces peor. Ni siquiera le importa que su traje del trabajo esté empapado.

Unos dedos temblorosos se aferran a la camisa de Jongin para mantener el equilibrio y éste atrae a Kyungsoo hasta sus brazos mientras más disculpas se derraman de sus labios. La toalla se cae cuando Kyungsoo intenta trepar en brazos de su amante y Jongin lo acepta, levantándolo del suelo. Sus brazos y sus piernas se agarran a él y la cabeza que hay pegada a su cuello se acerca más mientras el ronroneo se hace más audible.

-Voy a cuidar de ti -promete, y los saca del frío cuarto de baño para ir al dormitorio al final del pasillo.

Jongin es consciente de la respiración entrecortada de Kyungsoo, de la cola que hay alrededor de su pierna y de la dura presión de su erección contra su estómago. Se siente avergonzado y se da cuenta de que nunca tendrá disculpas suficientes porque ha dejado a su Kyungsoo desatendido y descuidado en su momento más vulnerable. Su gatito está en celo y su mente había desechado las señales de advertencia esa mañana, distraído con demasiadas llamadas de la oficina antes de salir por la puerta. No sólo eso, sino que había llegado más tarde de lo normal, lo que implicaba que Kyungsoo había estado solo y sufriendo todo este tiempo.

Con tanto cuidado como puede, Jongin sube a la cama y se tumba sobre Kyungsoo, que se niega a soltarlo y que sigue lamiendo su cuello con insistencia. Cada roce de su lengua en su piel hace que una ola de calor recorra la columna de Jongin y cada vez es más difícil mantener la compostura cuando Kyungsoo se frota contra su cuerpo y maúlla con cada caricia. Sabe que el felino no está en plenas facultades, y por eso Jongin intenta con tanto ahínco no hacerle daño, tomarse el tiempo que haga falta a pesar de que su propia excitación es cada vez más fuerte. Es muy difícil mantenerse en calma cuando Kyungsoo actúa así, pero ahora es un reto incluso mayor, porque hay unas manos frías bajo su camisa, unos dedos que se deslizan sobre sus costillas y la prioridad número uno de Jongin es hacerlo entrar en calor.

Kyungsoo se queja cuando Jongin lo separa,  y cada sonido desesperado toca una fibra en el interior de Jongin y casi se permite rendirse hasta que otro escalofrío recorre el pequeño cuerpo que hay bajo el suyo. El primer contacto de los labios de Jongin con el cuello de Kyungsoo lo hace gemir y apretarse contra él. Unos ojos velados por la lujuria observan cada movimiento de Jongin, y sus labios se abren como si fuera a decir algo, pero no puede. Jongin reclama esos labios en un beso que deja a Kyungsoo sin aliento y colorado de las orejas al pecho. Su boca desciende, tomándose el tiempo justo para acariciar la piel fría para darle seguridad antes de detenerse frente al miembro de Kyungsoo.

Jongin no tiene que alzar la vista para saber que Kyungsoo tiene la cabeza echada hacia atrás sobre la almohada, con los ojos cerrados y la boca abierta en un gemido silencioso cuando su miembro se desliza en el interior de su boca. En cualquier otro momento a Jongin le gustaría jugar a provocar, pero ahora mismo sabe que Kyungsoo siente dolor tras pasar tanto tiempo sin que nadie lo toque y deja que entre hasta el fondo. Las caderas de Kyungsoo se levantan y Jongin lo permite, deja que embista en su boca con sacudidas espasmódicas y sonoros gemidos que seguramente los vecinos pueden oír. Kyungsoo hunde los dedos en su pelo y tira de las raíces, y Jongin gimotea por el repentino dolor, pero deja que Kyungsoo lo agarre mientras sus caderas se mueven a un ritmo cada vez más rápido. Su miembro es grueso y pesado sobre la lengua de Jongin y hace lo que puede por ahuecar las mejillas y chupar con tanta fuerza como es capaz.

Kyungsoo eyacula en la garganta de Jongin con un gemido un minuto después, su espalda se arquea lejos de la cama y sus muslos tiemblan. Mientras se recupera, Jongin asciende lentamente, besándolo antes de mirarlo y acariciar su cara con cariño.

-Jongin -susurra Kyungsoo, hablando por primera vez y apoyándose en la mano de su novio.

-¿Estás mejor, cariño?

-Un poco -confiesa Kyungsoo, con los ojos aún dilatados y desenfocados, pero ahora su piel está caliente al tocarla.

Al menos ha acabado con la urgencia, y ahora Kyungsoo es más él mismo y no está atrapado en la ola de lujuria que lo había invadido. Pero sigue sin ser suficiente, porque Jongin siente cómo su miembro vuelve a endurecerse. Kyungsoo le está tirando de la ropa, saltando un par de botones de su camisa antes de que Jongin consiga quitársela y dejarla a salvo en el suelo. Desnudarse es mucho más difícil cuando Kyungsoo se niega a dejar de tocarlo.

Jongin distrae a Kyungsoo con un beso, lamiéndole la boca mientras éste gime, y extiende la mano hasta la mesita de noche para coger el lubricante. Se le escapa de los dedos por la forma en que sus caderas se mueven una contra otra y juraría que Kyungsoo ya se habría empalado en su polla si no fuera porque Jongin lo está manteniendo quieto bajo su peso.

-Ya casi está -le asegura Jongin mientras se lubrica los dedos.

Kyungsoo suelta un sonoro maullido y su respiración se detiene cuando Jongin mete un dedo en su interior, moviéndolo más rápido que de costumbre.

-Más -suplica, abriendo más las piernas-. Necesito más. -Y Jongin obedece, abriéndolo poco a poco con dos dedos y pronto tres mientras que Kyungsoo corresponde a los dedos con fuertes movimientos de su cadera-. Jongin -gime, y la poca resolución que le queda a Jongin se derrumba. Después de cubrir su miembro de lubricante frío, Jongin se sienta y pone a Kyungsoo sobre su regazo.

Sus ojos se encuentran y Kyungsoo le pasa un brazo a Jongin por los hombros para equilibrarse antes de guiar su miembro hasta su entrada. El ronroneo comienza de nuevo y las vibraciones los recorren a ambos cuando Kyungsoo empieza a dejarse caer hasta que Jongin está dentro de él por completo. Kyungsoo ni siquiera se da tiempo para adaptarse antes de apoyar el peso en sus rodillas y levantarse para volver a dejarse caer, provocando un profundo gemido de Jongin. Sus manos sujetan las caderas de Kyungsoo para mantenerlo quieto y que no se haga daño, hasta que su miembro vuelve a hundirse en él y se le escapa un quejido tan lleno de necesidad que Jongin no puede evitar embestir hacia arriba.

Todo Kyungsoo es increíble, desde la manera en que sus músculos aprietan su miembro hasta los sonidos desesperados que retumban en sus oídos, hasta su piel cubierta de sudor rozando la suya. Jongin se siente avaricioso porque lo quiere todo y más, y embiste cada vez más fuerte. Mueve las manos hasta el trasero de Kyungsoo y separa sus glúteos para que su miembro llegue más adentro, y su amante grita su nombre, botando más y más rápido sobre él. Vuelve a cogerlo del pelo y tira hacia atrás para que sus bocas se junten en un beso carnal lleno de lengua y dientes y gemidos entrecortados.

Jongin sabe que Kyungsoo está a punto cuando sus orejas se quedan planas sobre su cabeza y empieza a acariciar la erección del gato con sus dedos llenos de lubricante. Los músculos en torno a su miembro se tensan y Jongin no puede moverse, sin aliento, y Kyungsoo sigue moviéndose arriba y abajo. Sus instintos lo superan y Jongin los lleva a ambos al éxtasis, Kyungsoo se corre sobre sus estómagos y Jongin dentro de él.

Caen juntos en la cama, Jongin estira las piernas y Kyungsoo está cruzado sobre su pecho y su cola se balancea perezosamente. El collar sigue húmedo, y Jongin piensa en quitárselo pero se detiene enseguida. Cada vez que le quita el collar a Kyungsoo para lavarlo o secarlo, el gatito se queda en una esquina, gimoteando y bufándole cada vez que se acerca sin el símbolo de propiedad. Y con las hormonas de Kyungsoo revolucionadas, no va a arriesgarse hasta que esté profundamente dormido. Así que Jongin pasa dos dedos por debajo y tira de Kyungsoo para darle un beso.

Apenas hace falta estimulación y vuelve a sentir la erección de Kyungsoo contra su estómago otra vez, y Jongin piensa que mañana se va a tomar el día libre en el trabajo.

-¿Podemos darnos un baño? -pregunta Kyungsoo, mirando a Jongin a través de sus pestañas. ¿Y cómo le va a decir que no a eso?

Título: De baños y collares
Pareja: jongin + kyungsoo
Fic original de: thesockmonster
Rating: NC-17
Número de palabras: 1,460



El agua está caliente, y les deja la piel roja al tocarla, pero a Kyungsoo no le importa. Está más concentrado en las uñas que rascan su cuerpo cabelludo, murmurando con aprobación cuando Jongin le pone champú en la base de las orejas sin mojarlas. Es una sensación divina y suspira alegremente, su cola salpica en el agua cuando la agita sin pensarlo. Una mano le inclina la cabeza hacia atrás para poder enjuagarle el jabón, el agua caliente cae en cascada por su espalda y la arquea momentáneamente porque está demasiado caliente para su piel, que aún no se ha aclimatado al calor.

Kyungsoo quiere recostarse de nuevo en brazos de Jongin y quedarse así durante un rato, pero parece que su novio tiene otros planes. La bañera no es grande, y girarse puede llevar algo de esfuerzo, pero se las apaña y se encuentra cara a cara con Jongin mientras se sienta sobre él. Sabe que a Jongin no le apasiona darse baños, que prefiere darse una ducha rápida a quedarse en remojo, pero consiente a Kyungsoo de todas formas y el gato siempre se lo agradece. Una gota de agua resbala por su cara y Jongin levanta la mano para quitársela con el pulgar. Una sonrisa se dibuja en su cara y se inclina para besarla, siempre ansioso por demostrarle a Jongin cuánto lo adora. Ha hecho más por Kyungsoo que nadie.

Ronronear es una reacción involuntaria y Kyungsoo siente que va a hacerlo un momento antes de que empiece cuando Jongin le acaricia con cuidado sus orejas de gato. Los roces son medidos, como sus besos. Puede que Jongin esté intentando no excitarlo, pero se está excitando igualmente. Siente cómo la excitación se acumula poco a poco y pesa sobre él y contiene el aliento, que se queda atrapado en su garganta cuando su semierección roza el estómago de Jongin. Un quejido se le escapa de los labios sólo para quedar silenciado por los de Jongin. Gime de nuevo, más alto y con más urgencia mientras levanta las caderas y Jongin lo detiene.

-Fuera -susurra Jongin y Kyungsoo puede ver cuánto desea esto también en su rostro.

Sale del agua como puede y agarra la primera toalla que encuentra para secarse, pero lo vuelven a detener. La prenda se le cae de las manos por la sorpresa cuando siente a Jongin cogiéndolo por el collar y tirando de él para acercarlo. Parece que su cuerpo no quiere moverse, la presión del cuero húmedo corta la sensible piel de su cuello y por un momento, Kyungsoo se olvida de respirar. Envía una fuerte punzada de deseo y lujuria por todo su cuerpo y al segundo tirón de Jongin, se tambalea para seguirlo. Siente el aire frío sobre su piel húmeda, pero la excitación de pensar en lo que viene lo mantiene caliente.

El camino del baño a la habitación es corto, pero le basta para pasar de semierección a erección dolorosa sólo por cómo el collar roza su piel, cómo los dedos de Jongin se hunden sólo un poco en su garganta. Jongin también lo sabe, y sus ojos beben avariciosamente de la forma de Kyungsoo antes de hacerlo caer en la cama. Se queja por la pérdida del agarre en su collar cuando cae sobre las sábanas, el edredón sigue arrugado en el suelo de esa mañana. Jongin le había hecho el amor despacio antes de que la alarma sonara, hundiéndose en él con facilidad mientras estaban tumbados de lado. Se habían movido juntos lánguidamente hasta que estuvieron satisfechos, y Jongin se había adormecido con Jongin aún en su interior hasta que este tuvo que levantarse para ir a trabajar.

Pero esto es cualquier cosa menos suave y lento, con las manos de Jongin recorriendo todo su cuerpo y separando sus muslos hasta que casi duele. El hombre lo mira mientras le mete un pulgar lubricado, presionando para relajar los músculos mientras el gato gime. Cuando es así, todo lujuria y deseo, Kyungsoo siente que está al borde de una cornisa sin poder ver el fondo. Jongin es su barrera, lo que evita que caiga al vacío. Empieza a reaccionar a los dedos de Jongin que ahora entran y salen de él rápidamente, y embiste con sus caderas hacia abajo, sin vergüenza alguna por los gemidos que se escapan de su boca.

Cuando está listo, Jongin se separa y lo mueve para que se apoye sobre las manos y las rodillas. Kyungsoo deja caer la cabeza, ansioso, aferrándose a las sábanas. La punta del miembro de Jongin entra en él y lo abre aún más, y el resto se desliza con facilidad por la cantidad de lubricante que Jongin siempre usa. Es reconfortante saber que siempre da ese paso extra para asegurarse de que Kyungsoo no sufre. Jongin conoce su cuerpo lo suficiente para saber que Kyungsoo no necesita tiempo para ajustarse a la intrusión, que quiere que se mueva inmediatamente, y eso es lo que hace.

Las primeras embestidas siempre son las más suaves, el lento movimiento de su miembro reduce a Kyungsoo a gemidos hasta que la verdadera diversión empieza. Kyungsoo se prepara, fuerza los codos para no caer de cara contra la almohada porque odia la sensación de que se le pegue a la mejilla. Sólo después de eso Jongin acelera el ritmo, sus caderas golpean deliciosamente su trasero, y siente unos dedos agarrar la parte de atrás de su collar. La descarga de estar obligado a permanecer de rodillas ahoga sus gemidos y se agarra a los muslos de Jongin, enredando la cola en torno a su cintura por instinto.

Jongin no abandona el control, y sujeta el collar tan fuerte como para que el cuero se hunda en su cuello. No le corta la respiración, pero Kyungsoo empieza a jadear de todas formas, y a ronronear de nuevo. Cualquier pensamiento racional que le hubiera podido quedar al gato ya hace tiempo que desapareció, y ahora se limita a hundir las uñas en la carne de Jongin en un esfuerzo por sentirlo aún más adentro. Abre la boca y apoya la cabeza en el hombro de Jongin para mantener el equilibro. Hace que el collar le apriete más, y Kyungsoo grita del puro placer que eso le proporciona.

La mano libre de Jongin recorre su costado antes de descender para coger con firmeza su miembro. El gato maúlla, empuja con las caderas hacia atrás como súplica muda por más y Jongin le da justo eso. Cuanto más fuerte aprieta Jongin su erección, más fuerte ronronea Kyungsoo hasta que se convierte en un ruido sordo y regular en su pecho. Kyungsoo está al borde de la saturación sensorial, y pone los ojos en blanco mientras siente cómo todo aumenta en un devastador crescendo.

Tiene la boca y la garganta demasiado secas como para emitir nada más que un siseo al correrse. El cuerpo de Kyungsoo se bloquea y oye los graves gemidos de Jongin en sus oídos mientras embiste entre los músculos que laten en torno a su miembro. Jongin no tarda en correrse dentro de él, mordiendo un lado del cuello de Kyungsoo, y el gato gime otra vez. Cuando los dientes se separan de su piel, Jongin pasa la lengua por la zona y Kyungsoo se estremece, con el cuerpo demasiado sensible para lidiar con el ataque.

Cuando Jongin suelta el collar, se sienta en la cama y atrae a Kyungsoo hasta él, y el gato está demasiado bien follado como para hacer otra cosa que usarlo de apoyo. Están cubiertos de sudor y semen y empieza a picar, pero a Kyungsoo no podría importarle menos. Jongin sigue teniendo los brazos alrededor de su cintura, con la barbilla apoyada en su hombro, y está conforme con quedarse dormido así.

-¿Jongin? -susurra, intentando no arruinar el ambiente ahora que su ronroneo se ha normalizado hasta alcanzar un volumen tolerable. Jongin le dirige un murmullo inquisitivo por respuesta-. Gracias por salvarme.

Jongin se mueve lo justo para mirar a Kyungsoo antes de besarlo.

-Tú eres quien me salvó a mí.

Kyungsoo intenta discutir, pero cada vez que abre la boca, Jongin lo besa. Acaba por rendirse cuando caen tumbados en la cama, Jongin sobre él y su lengua haciendo milagros en su boca. Kyungsoo le acaricia el pelo con los dedos y se siente satisfecho con esto.

Ambos tienen conocimiento suficiente como para no quedarse dormidos, desnudos a los pies de la cama sin nada por encima y con el pelo aún húmedo, pero eso no los detiene. Jongin abraza la cintura de Kyungsoo con un brazo fuerte y lo acerca a él. El gato hunde la cara en el pecho de su novio y se queda dormido con una sonrisa.




pairing: jongin/kyungsoo, catboy!au, traducción, exo fanfic

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