Leo esta mañana en la columna de Javier Ortiz que es muy probable que Txeroki sea una parafernalia de sombras chinas vascas. Es decir: que Txeroki no tiene res extensa, no come, no mea, ni yace con vasca placentera en los ratos de asueto que permite el ser un hijo de puta y tener pistola.

Una vez más la publicidad. Estar en la calle, retumbar en ( Read more... )

Al mediodía de mayo de la primera mitad de los 90, un moño de carteras escolares se iba componiendo ante de la puerta del Palacio de Jabalquinto (Baeza). El palacete gótico se hacía inasible en la distancia abisal con que la zagalería lo (ad)miraba y una monjita borrosa nos llevaba de la mano.

Fue entonces en la dispersión de los zumos y el papel de ( Read more... )

El cuarto poder es el cuarto de baño desde que se inventaron la política en el mismo país donde rodaron la película Mediterráneo. Parece una incoherencia, esa imagen de la puta magnífica (nombre de reina) sacudiendo el pulpo con el empuje de sus riñones. Muy probable que igual se lo pusieran a Paris, renuentes porque el mozo no se arrancaba. Pero ( Read more... )

La lectura constante de literatura de la creatividad, de los sistemas de pensamiento secundario, del subconsciente freudiano, de la incubación, de la intuición, del inconsciente cognitivo, de la introspección me juega malas pasadas o se corrobora pasándome a sujeto de la muestra, como aquella cosa que le pasó a Unamuno: que se le puso farruco un ( Read more... )

Cuando apenas adolescente me arrimé a la antología casi escolar y descubrí que el pan se llama pan y la ironía transmuta en vino.

...y este sol de la infancia.

Complemento de la estría del verbo
por cuna de tu lengua,
mezclo a llantos del alcohol que llama y arde.
Veredas continuadas
en el verde,
en la parva mácula recaliente
que es trigo meciéndose en invierno,
y la mies inerte,
como cuando se dicen
versos torneados y festejos viejos
[«a cagar a la vía»,
«¿da Usía su permiso?»
«somos pobres,
pero horadaos»]
en ( Read more... )

En la extraña apología de la gruta de las voces blue de los negros de la queja, se tensa el mercurio como los de-lirios de los niños pobres. En esa fiebre tan reseca de glándulas murientes se agolpan los grados a las sienes como una temperatura de metal fundido y pringoso. La letanía como desesperos en el pecho, como los batanes ineludibles que ( Read more... )

 
"NOS RECIBEN LAS CALLES CONOCIDAS...

Nos reciben las calles conocidas
y la tarde empezada, los cansados
castaños cuyas hojas, obedientes,
ruedan bajo los pies del que regresa,
preceden, acompañan nuestros pasos.
Interrumpiendo entre la muchedumbre
de los que a cada instante se suceden,
bajo la prematura opacidad
del cielo, que converge hacia su término,
( Read more... )

 
Una dulzura animal se convoca sobre la piel lazada del vientre. Cada perla de sudor que anega un poro es un pequeño mundo, un pequeño planeta que participa con los miles de los demás, en el desierto bronce de la espalda. El suelo, de barro, continúa como una avanzadilla hasta en el aire de la tarde y arranca un balcón, con la baranda de negro ( Read more... )

Como el náufrago metódico de Luis Rosales me parece ver ahora todas las horas como olas. Los tiempos denodados desolados podrán ser sepia a pesar de los esfuerzos de tantas fórmulas repetidas como salmos, y así ha de ser; tras los pasos quizá vengan los apartes del camino. Así ha de ser